Crítica de AGRESIVA - El Fin De La Razón

Cuando acudí a la preescucha para medios del nuevo lanzamiento de AGRESIVA, el aquí presente "El Fin De La Razón" me prometí a mí mismo, y así se lo hice saber a la banda, darle todas las escuchas que fueran posibles y que mi tiempo me permitiese para valorar lo que el combo madrileño ha dado de sí en su nueva obra.

Los motivos son varios: AGRESIVA es una banda musicalmente inquieta y muy trabajadora, siempre obcecada en darle a su producto un acabado profesional, con lo que qué menos que crease cierta reciprocidad en este aspecto e intentase ser lo más profesional posible con la digestión del disco y posterior escrito de mis pareceres. Por otra parte, este álbum ha supuesto un punto de inflexión en la carrera de la banda, dado que es el primer trabajo lanzado en castellano y, a su vez, el que más se distancia musicalmente de los anteriores álbumes.

Sobre el cambio de idioma, sigo teniendo, muchas escuchas después, sentimientos encontrados. Ardua tarea la de evaluar si la banda ha acertado o errado apostando por el castellano en esta nueva aventura. En lo que a recepción por parte del público se refiere, solo el tiempo indicará si esta valiente apuesta de AGRESIVA le ha reportado beneficios o no. Sí tengo claro que el castellano podría ajustarse mejor a la actual propuesta del cuarteto de la capital, donde emerge una línea musical más estandarizada dentro de ese amplio y a veces difícilmente abarcable concepto que es el Heavy Metal. Creo que cuando una banda se ciñe tan solo a uno o dos géneros que convergen y se asocian entre sí pierde capacidad de sorprender antes o después, así como ese regustillo a espontaneidad que, a titulo personal, agradezco bastante como oyente.

Y quizá es por eso que, a priori, parecía un buen momento para que AGRESIVA se desligaran de sus raíces Power/Thrash, ampliando miras y adhiriéndose a una base musical más melódica en la que siguen fluyendo elementos propios del Metal Progresivo (reminiscencias a bandas como DGM pero también a trabajos clásicos e imprescindibles en el gremio como "Somewhere in Time" y "Powerslave" de IRON MAIDEN), pero con un sentido más comedido que en otros trabajos. Técnica y virguerías al servicio de los temas, y no del regocijo personal, lo cual hace que estos tengan un enfoque más maduro y sobrio y que, a su vez, se vislumbre la posibilidad de que la banda aumente adeptos, y más recalcando el hecho de que esos estigmas de agrupación de US Metal, aun estando presentes en ocasiones, quedan algo soterrados en virtud de un Heavy Metal más tradicional a nivel global. La banda, en un ejercicio de pragmatismo musical, ha perdido en contundencia, pero ha obtenido a cambio un mayor control de su planteamiento y un conciso sentido de su dirección musical.

"El Fin De La Razón", un buen álbum con algún que otro "pero"

Compositivamente hablando, "El Fin De La Razón" es otro álbum brillante, creativo, experimental por momentos, donde Miguel Coello, uno de los principales artífices de la música que crea AGRESIVA, demuestra una vez más ser uno de los instrumentistas con más talento de la escena metalera nacional más enfrascada en el correoso y a veces no tan gratificante underground. Un gran lector de este género musical y un gran transmisor del mismo. Diría que el disco se halla algo por debajo de su anterior obra, "Decibel Ritual”, donde la banda tocó techo, pero igualmente es un disco muy vistoso y complejo para pararse a escuchar con amplio y concienzudo detenimiento.

AGRESIVA tienen una gran materia prima y tienden a aprovechar la oportunidad de explotarla eficientemente en cada ocasión que se les presenta para ello. Es por eso que hay algo me ha sorprendido para mal en este nuevo largo, un detalle que se erige como el principal hándicap del lanzamiento, que no es otro que el tratamiento vocal del mismo. El trabajo en la producción, una vez más, ha sido certero, corriendo en esta ocasión por cuenta de la banda, pero hay algo en la mezcla final que no me ha acabado de convencer en lo referente a la voz, puesto que he tenido la constante sensación de escucharla algo despegada del resto de instrumentos, como si estuviera en otro plano, creando una leve sensación de agriedad a la hora de disfrutar del disco y resultando ser un percance al que, pasadas las primeras escuchas, me ha costado acostumbrarme.

Eso sí, me parecería injusto ser lapidario en este aspecto y echar con ello por tierra todo lo que han desarrollado los madrileños en el álbum, que no es poco, por un elemento circunstancial que podría considerarse deficitario durante la grabación del mismo o, como indicaba, en su mezcla final.

AGRESIVA, gustosos por las intros, como ya evidenciaran en su anterior trabajo, encienden motores en su nueva obra con una melodía pausada y de tinte acústico que se va acrecentando hasta explotar en "Asesino De Almas", pieza que la banda utilizó como adelanto para medios y público y en la que veo a Samuel fuera de su zona de confort en las estrofas, acentuando ese aparente divorcio entre música y voz que comenté con anterioridad, pero algo más acertado y comedido en los estribillos. Nos hallamos ante una pieza ágil y vertiginosa, con el sello más primigenio de la banda y un llamativo cambio de ritmo en su tramo final en la línea de esas rupturas que, en tantas ocasiones, nos han ofrecido bandas como ANNIHILATOR o MEGADETH.

"Perdición" me recuerda de soslayo en su inicio al "Be Quick Or Be Dead" de IRON MAIDEN, aun ralentizando algo el tempo con respecto al mítico corte de los británicos. En este caso, nos adentramos en un corte de puro y duro de Heavy Metal tradicional donde ya se intuye cierto balanceo hacia melodías más asequibles por parte de la banda, como saca a relucir el estribillo, donde, esta vez sí, el trasfondo épico de la melodía cuaja a la perfección.

"La Bestia" arranca adormilada pero no tarda en enseñar las fauces y hacer honor a su nombre, transformándose en un tema de pura esencia Power americano donde el riffeado rápido manda. De nuevo, un certero estribillo redondea una pieza con toda la impronta de los viejos AGRESIVA. Unas melodías de guitarra dobladas, bastante coreables y de recepción directa y asequible, son la mayor razón de ser de "Los Olvidados”, una pieza mucho más nacional musicalmente hablando, donde el Heavy Metal de corte melódico campa a sus anchas mostrando otra faceta de la formación madrileña. "Embaucador" ofrece pasajes de Metal contundente y voluminoso acompañados de otros más melódicos, donde de nuevo resalta la labor a las cuerdas de Miguel, aunque al tema acabe padeciendo la falta de un estribillo con algo más de gancho.

"Ganar O Perder" es uno de los temas más completos del álbum. Alterna todo lo que es capaz de generar la maquinaria de AGRESIVA. Velocidad y shredding, algunos instantes más machacones y entrecortados e incluso el momento más suave y pausado que, hasta la fecha, nos ha regalado Samuel en toda la trayectoria de la banda. Por su parte, "Entierra El Pasado" peca de ser algo lineal y monótona y no logra resultar lo suficientemente punzante al aterrizar un estribillo algo más ramplón atendiendo a otros con mucho más tino que hallamos en la obra.

Acercándonos al final emerge "Contradicción", que irrumpe con pesadez y mucho groove, casi pareciendo un corte con cierta base de Metal Extremo, aunque enseguida se acelera adquiriendo otra fisionomía. Como curiosidad, durante el ecuador del tema, aparte de sonar un fragmento de audio pertenecciente a la película “Nadie hablará de nosotras cuando hayamos muerto”, vuelvo a acordarme de esos viejos ANNIHILATOR que, repentinamente, daban un giro radical y alocado en cuanto a intensidad a sus composiciones para, a continuación, volverle a insuflar una buena dosis de carga eléctrica a las mismas.

"Injusto Y Legal" es otro corte funcional y veloz que, sin aportar nada especialmente novedoso una vez llegados a este punto del álbum, sí que ofrece alguna que otra estructura justo a mitad de la pieza, y de ahí en adelante, que hará las delicias de los amantes del Prog Metal. "La Fuga" nos abre sus puertas con  otro guiño al cine español, en esta ocasión un corte extraído de “El dedo en la llaga”, película que vio la luz a mediados de la década de los noventa. La pieza, en su totalidad, es puramente instrumental; un corte vertiginoso donde el shredding, dentro de una línea musical bastante camaleónica y de tinte progresivo, campa a sus anchas poniendo el foco de nuevo en los oyentes adentrados en la música más técnica y elaborada. Un atípico y breve epílogo, con cierta declaración de intenciones a nivel letrístico, en el que aparece la voz de Samuel cantando a capella da por finiquitada la nueva obra de los madrileños.

AGRESIVA factura un álbum arriesgado que provoca sentimientos encontrados

Resulta curiosa la vorágine de sensaciones confrontadas que me ha producido este trabajo. Honestamente, y reconociéndome seguidor de la marca AGRESIVA desde sus inicios, nunca me había encontrado con esta dicotomía en un lanzamiento de la agrupación hasta la fecha. Por un lado, me he topado con una banda renovada y con visos de querer afrontar una nueva etapa en la que desmarcarse ligeramente de sus anteriores obras de cara a seguir explorando y creciendo musicalmente para no quedar catalogados constantemente como una banda de Power/Thrash. Heavy Metal con mayúsculas, flexible, aperturista e innovador por momentos.

Por otro, también me hallo ante el trabajo en que más anomalías me he encontrado, de las cuales ya me encargué de hablar en párrafos anteriores, y por suerte no tan severas como para que supongan un lastre en el cómputo global del álbum, aunque, eso sí, le deje unas leves cicatrices que, por seguro, no creo que vuelvan a repetirse durante la grabación o mezcla del próximo disco de una formación bastante avezada en la materia como lo es AGRESIVA. Habrá peros, sí, pero la agudeza de esta banda ideando y dándole forma a sus, en ocasiones, extraordinarias composiciones no parece que vaya a desinflarse a corto plazo. Esta vez, han arriesgado. Veremos qué les depara el futuro.

Discográfica: Minotauro Records

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