ANATOMIA - Dead Bodies In The Morgue

De desempolvar los trasteros del underground salen discos como este, unos más valiosos que otros, algunos joyas y otros batiburrillos de poca monta. Este “Dead Bodies In The Morgue” va por la calle de en medio. Ni lo uno ni lo otro, una recopilación interesante, aunque desde luego no imprescindible, de un grupo interesante aunque desde luego no extraordinario. ANATOMIA lleva más de una década trabajando la escena japonesa, sus miembros curtidos en proyectos veteranos y más o menos relevantes, seguramente el más renombrado sea TRANSGRESSOR.

ANATOMIA es uno de esos grupos que surgieron para llenar el vacío que por entonces ya había dejado AUTOPSY, en ese lapso entre su etapa gloriosa (1989-1993) y el actual revival amparado por la reivindicación de tantas bandas jóvenes y, en muchos casos para bien, más papistas que el Papa. El sonido tira por ahí, enfermizo y oscuro, y enlaza con lo que ahora hacen tantos, de sus compatriotas COFFINS a DECREPITAPH. Con ambos y no por causalidad ha compartido Split ANATOMIA, que no es un grupo excelso pero sí, repito calificativo más templado que caliente, interesante.

Así que esto es Death Metal opresivo, sufocante, primitivo y oscuro. Denso y con Doom a calderadas, atmósferas roídas y aterradoras, riffs que exprimen el libreto de la vieja escuela, ritmos en formato mastodonte y esa pulsión psicótica que AUTOPSY convirtió en libro de estilo con una perfección que ninguno de sus imitadores o seguidores ha igualado. Tampoco ANATOMIA, que ni es el grupo más imaginativo ni el más retorcido ni el más corrupto dentro de su estilo, pero que hace bien lo que hace y le pone la habitual temática que disfruta explotando tabúes: canibalismo, muertos muy vivos o a los que no se deja estar convenientemente muertos y tranquilos.


Con una buena y apropiada portada a cargo de César Valladares (que ha trabajado para KRISIUN, ASPHYX o GRAVE MIASMA), el fundamento de “Dead Bodies In The Morgue” son las dos Demos editadas por el grupo nipón. Su primera grabación de 2003 y “Human Lust”, de 2009. Hay van siete de las trece canciones del disco, el resto piezas en directo, grabaciones en formato demo de temas que vieron la luz en splits o en el primer disco del grupo, “Dissected Humanity” (2005), y un par de versiones de… AUTOPSY, cómo no: el clásico “Charred Remains” y ese pestañeo de ojos infame que responde al nombre de “Fiend For Blood”.

Entre la primera y segunda demo hay una evidente diferencia de sonido a favor de la última, mucho más profesional y menos rugosa, y una materialización compacta y tenebrosa de un sonido que por lo demás no varía mucho: asfixia rítmica y pasajes torturados, Death Metal gestado en el sótano del infierno. No están nada mal balas como “Morgue Of Cannibalism”, “Drowned In Sewage”, “Dead Art Body” o “Human Lust” dentro de un nivel general correcto que gustará, a ellos y seguramente sólo a ellos, a los más ávidos de pureza underground con denominación de origen.

 

Juanma Rubio

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí