Crítica de BLACK STAR RIDERS - Another State Of Grace

"Another State Of Grace" es el cuarto disco que edita BLACK STAR RIDERS desde que, hace seis años, Scott Gorham decidiera reavivar la llama de los extintos THIN LIZZY con una formación que sigue muy de cerca la senda musical que, en su día, forjaron los irlandeses liderados por Phil Lynott. Esta nueva encarnación de esos viejos valores rockeros alcanzó sus mayores cuotas de calidad con "The Killer Instinct", su segundo trabajo y el más brillante y potente hasta la fecha. Con este, su cuarto retoño, poca novedad con respecto a sus predecesores pero misma frescura de siempre como incentivo. Lo vemos todo en sucesivas líneas.

Los de Gorham siguen haciendo un amplio recorrido por la genealogía del Rock, dejándose caer con frecuencia en los sonidos británicos más setenteros y abrazando con éxito ese Hard Rock de clara inspiración clásica que siempre tuvo la mirilla puesta en el Rock 'N Roll primigenio de los mágicos años 50; todo ello contando con el aporte del Folk irlandés para acicalar algún que otro tema. Primerísimos KISS, THIN LIZZY o WISHBONE ASH son alguna de las inevitables referencias a la hora de inmiscuirse de lleno en el mundo que nos presenta una vez más la guitarra del incombustible Scott Gorham, tipo que a punto de entrar en su etapa septuagenaria sigue brillando con luz propia, y de Ricky Warwick, el mejor maestro de ceremonias con el que pudieron contar nuestros THIN LIZZY 2.0., toda una garantía de calidad y de desbocada personalidad con sus envolventes cuerdas vocales.

BLACK STAR RIDERS tira de veteranía y estilo en "Another State Of Grace"

BLACK STAR RIDERS es pura filosofía musical, es una suma de dogmáticos credenciales aplicados con sabiduría que, de momento, le siguen dando la razón a unos tipos que navegan en un mar de canas y arrugas. "Tonight The Moonlight Let Me Down" posee esa necesaria fisionomía de Rock melódico de taberna irlandesa idóneo para capturarte en una sola toma. "Another State Of Grace" es enérgica, embriagadora de un ambiente festivo y verdaderamente potente. A su vez, "Ain't The End Of The World" nos dibuja unas guitarras puramente THIN LIZZY. Viejas melodías dobladas de las que el señor Gorham sabe que siguen siendo la gallina de los huevos de oro y de las cuales nunca debería divorciarse.

Por su parte, "Underneath The Afterglow" tiene un groove moderno apoyado en una base clásica y old school, recordándome a ese peculiar y ambiguo estilo en el que se suele apoyar Slash en su banda/proyecto junto a Myles Kennedy. "Soldier In The Guetto" vuelve a tener ese aire gélido irlandés que incluso puede rememorar a los U2 en su etapa más guitarrera. Con "Why Do You Love Your Guns" aterriza el primer medio tiempo del trabajo, un tema que, seguramente por el timbre de voz grueso y férreo de Warwick, tiene más conexión con el material de bandas como NICKELBACK o FOO FIGHTERS, aunque sin dejar de lado del todo esa insistente perspectiva clásica.

En el último tercio del disco nos encontramos con "Standing In The Line Of Fire", una pieza con un sonido más inflado e incluso noventero que, por instantes, llega a acariciar de soslayo el sonido de bandas como CORROSION OF CONFORMITY o CLUTCH. "What Will It Take" es otro medio tiempo que recuerda excesivamente en sus estrofas al "Human Touch" de BRUCE SPRINGSTEEN. Salvo casos en los que prime la evidencia, no me suele gustar recurrir a la palabra plagio. Prefiero pensar bien y que la inspiración ha ayudado a generar las similitudes entre uno y otro tema, y más sabiendo que Warwick fue un tipo que creció escuchando las canciones del Boss.

"In The Shadow Of The War Machine" es otro corte que se deja contagiar por el espíritu del Rock contemporáneo, distanciando a la banda de su sonido más natural y recurrente, mientras que "Poisoned Heart", que ejerce de cierre, vuelve a poner el foco sobre la faceta más puramente irlandesa y THIN LIZZY de la banda, apoyándose en unas enigmáticas guitarras y en unos convincentes coros en el estribillo.

Uno más, y suma y sigue. BLACK STAR RIDERS, con este "Another State Of Grace", sigue construyendo paso a paso su historia, contando hasta la fecha con más victorias que derrotas y afianzando una fórmula que, por el momento, no parece mostrar síntomas de la más mínima flaqueza.

Discográfica: Nuclear Blast

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