Qué grata sorpresa me ha supuesto comprobar cómo hemos recuperado a los mejores CRAZY LIXX. Y digo recuperar porque, aunque nunca llegaron a irse, dejaron aparcadas sus bondades con su tercer y regulero trabajo, “Riot Avenue”, el anterior a este que nos ocupa.
La carrera del ahora quinteto sueco se podría capitular de la siguiente manera: tuvieron una ópera prima prometedora, un segundo disco arrollador y un tercer lanzamiento claramente inferior a su predecesor porque sus temas no llegaban a funcionar. Mismo tipo de sonido y continuación de la fórmula exprimida anteriormente, pero con poco tino en el resultado que propició que nos encontráramos con un disco insulso y menor.
Pues bien, la formación escandinava liderada por el vocalista Danny Rexon ha retomado en este disco homónimo su mejor versión, de nuevo moviéndose a caballo entre el Hard melódico y el Sleazy, ofreciendo un buen puñado de melodías brillantes, de coros trabajados, donde nos topamos con la colaboración de todo un Mats Leven, de shredding llamativo y vistoso para los amantes del guitarreo, y siempre estando arropados por ese tono festivo y pseudoamericano que rodea a sus composiciones en todo momento y de un aroma, en su conjunto, que entra y sabe mejor, sin que tengamos la necesidad de estar apretando el oído para que calen mejor los temas, como sucedía en el anterior compacto.
En cuanto a los temas, tenemos una equilibrada balanza, que ya es marca de la casa en los escandinavos, entre los más bailables y estilizados al más puro estilo DANGER DANGER o WARRANT, y los más crudos y callejeros, más en la línea de CRASHDIET, compatriotas de los de Rexon.
Escarbando en el larga duración, uno se encuentra con temas tan llamativos como “Hell Raising Women”, idóneo para abrir el disco y dar un golpe sobre la mesa evidenciando que el grupo regresa con fuelle. De primeras, se atisba que la pócima elaborada a base de Hard pegadizo vuelve a funcionar. De corroborar esto mismo se encargan “Sound Of Loud Minority” y, especialmente, “Outlaw”, un medio tiempo muy trabajado en lo que a coros se refiere, donde el combo sueco nos recuerda a ese estilo elegante, sosegado y mágico, tan de la escuela DEF LEPPARD.
“Girls Of The 80’s”, con un sugerente título que le sacará la sonrisa a más de uno, completa un inicio de disco arrollador, siendo una pieza con un deje más Sleazy y eléctrico, pero sin aparcar esa faceta melódica y comedida que en todo momento planea sobre las composiciones de CRAZY LIXX. Algo más adelante, “All Looks, No Hooks” ofrece un riff de guitarra también más Sleazy, siendo otro tema pegadizo con cierto acabado a lo SKID ROW que deja entrever como los suecos se manejan sin problemas con sonoridades más explosivas y punzantes. Misma regla de tres para “Ain’t No Rest In Rock N’ Roll”, un Rock And Roll, como el propio título nos descubre, acelerado y pasado de vueltas que puede llegar a recordar a bandas como AIRBOURNE.
Para los postres, nada de temas sobrantes. Nos encontramos, curiosamente, con la regrabación de “Heroes Are Forever”, uno de los temas más exitosos de su primer disco (tampoco he entendido muy bien el motivo de la regrabación, todo sea dicho), y “Wrecking Ball Crew”, un pelotazo lleno de adrenalina, idóneo para dejarte con las pilas bien cargadas nada más acabar el disco, donde el ahora binomio de guitarristas derrocha una buena dosis de talento con el manejo del shredding.
La verdad es que necesitaba un disco de este pelaje, con empuje de principio a fin, porque algunos de los trabajos editados este año en el género, en los cuales tenía depositada mi confianza, no han logrado saciar mi hambruna de buen Hard Rock Melódico, y este, por el contrario, me ha dejado plenamente satisfecho.
Jorge Osoro
