Creo que la crónica del concierto de AVANTASIA del pasado sábado en Madrid, será la más difícil de escribir de cuantas he realizado para HELLPRESS. No encuentro palabras para describir el espectáculo y el virtuosismo mostrado por la banda en las tres horas y cuarto que duró el concierto. Pocas veces habrá opiniones más unánimes sobre un show, como las hay de éste. Perfecto, no puedo decir otra cosa.
En 2014, AVANTASIA pasó por primera vez por España (después del fallido concierto del cancelado Metalway 2009) aunque de manera bastante fugaz, tocando como última banda de la edición de ese año del festival Sonisphere (curiosamente, la última vez que se celebró ese certamen) y dejando a todo el mundo boquiabierto, en aquel momento, el jefe tras todo esto, Tobias Sammet, prometió que volvería a España en tres años, con un show completo de tres horas y así ha sido. De hecho, Sammet bromeó durante el concierto recordando el frío que pasó y lo tarde que tocaron.
Y es que antes de entrar en faena, no sé muy bien cómo definir a AVANTASIA. Desde luego que es, sin discusión alguna, la mejor banda de Heavy Metal del momento, pero es que llamar simplemente banda, a algo como el proyecto de Mr. Sammet, se me antoja corto; como bien dice un amigo, AVANTASIA trasciende más allá de la música, es como un musical, donde cada miembro de la banda tiene su papel y todo, absolutamente todo, funciona como una maquinaria perfectamente engrasada.
No recuerdo ningún otro concierto que durando más de tres horas, se me pasara tan rápido o que tuviera tantas ganas de que no terminase, hasta el punto de lamentar que el concierto del día siguiente estuviera completamente agotado (sold out completo de los tres bolos en España) porque, sin dudarlo, habría repetido pagando los 40 euros de la entrada pues a la postre han sido una de las mejores inversiones que he realizado nunca.
Comenzando ya con el show en sí, todo fue puntual como un reloj suizo, a las 20:00 clavadas comenzó a sonar la banda sonora de “2001: Una Odisea En El Espacio” y los músicos de AVANTASIA iban tomando su lugar en un escenario que se quedó pequeño para La Riviera, pues el telón apenas cabía en el fondo del mismo y el castillo o catedral se notaba que no estaba completo, pero nada, pequeñeces, la expectación iba creciendo por momentos. Oliver Hartmann y Sascha Paeth a las guitarras, Michael Rodenberg al teclado, Felix Bonkhe a la batería (tres horas aporreando y sin flojear y los coros de Amanda Somerville y Herbie Langhans. Cada uno en su sitio, esperando a que saliera el director de pista.
Y con los primeros temas de “Mystery Of A Blood Red Rose”, aparecía Tobias Sammet en el escenario, pletórico, triunfante cuando esto acababa de comenzar. La noche prometía y vaya si cumplió. Destacar que como inicio, fue ideal y me hace lamentar que Alemania no haya seleccionado este tema de Hard Rock tan pegadizo para representarles en Eurovisión, porque sin duda les habría votado.
La primera etapa del concierto estuvo centrada en los dos últimos trabajos, el anterior “The Mystery Of Time” (en el Sonisphere sólo tocaron “Spectre” de este disco, tema que irónicamente no estuvo en el set de esta gira) y el más reciente “Ghostlights”; de hecho el segundo corte fue la canción que da nombre a este LP y llegó uno de los momentos más esperados, cuando Michael Kiske asomó en lo alto del escenario y consiguió que todos flipásemos con los mejores agudos de la historia del Heavy, con “Ghostlights” quedaba claro que daba igual lo que tocasen sobre el escenario (temas clásicos o nuevos) porque los íbamos a disfrutar por igual.
La fiesta continuaba con “Invoke the Machine”, del mencionado “The Mystery Of Time”, donde se nos presentó a otro de los vocalistas, el líder de PRETTY MAIDS, Ronnie Atkins, una canción más rápida que las anteriores, donde la capacidad de la banda quedaba sobradamente demostrada. Me van a perdonar si no me detengo en exceso en cada tema, no quiero que esto quede más largo de lo que ya va a quedar, pero si me gustaría demostrar, lo natural y orgánico que resultaba ver como se iban intercalando unos vocalistas con otros, estando Sammet fuera del escenario muchas veces, o los sensacionales coristas que sin esperarlo tomaban parte del protagonismo.
Con “Unchain The Light” tuvimos sobre el escenario por primera vez a tres vocalistas: Sammet, Kiske y Atkins. Siendo el segundo de ellos, el absoluto vencedor, con su vozarrón predominando sobre los demás y consiguiendo uno de los estribillos más pegadizos de su último disco. Trabajo que era desconocido para mucho de los asistentes, pero que no restó emoción ni emotividad en ningún momento. Para relajar los ánimos un poco, tocaba uno de esas baladas o medio tiempos que también compone Tobias Sammet, se trataba de “A Restless Heart And Obsidian Skies”, para la ocasión debutaba sobre el escenario, Bob Catley de MAGNUM y joder, los pelos como escarpias. Qué bien que pegan sus voces y los coros de Somerville y Langhans completando el trabajo de los primeros. Sobre todo Amanda, una soprano que da igual en que tono cante, se la distingue perfectamente.
El primer bloque se completó con “The Great Mystery”, diez minutos donde Tobias Sammet comienza variando sus registros para demostrarnos que no sólo es un tipo simpático que sabe componer, sino que también es un vocalista a la altura de sus invitados. A destacar cómo va ganando fuerza esta canción, gracias a una soberbia orquestación y un sublime trabajo en los teclados de Michael Rodenberg.
A lo tonto, llevábamos ya casi 50 minutos de AVANTASIA (un sueño hecho realidad, para muchos de los asistentes a juzgar por los comentarios en la redes sociales) y por fin Tobias Sammet anunciaba temas clásicos de la banda, comenzando por uno de los más largos de toda su discografía, “The Scarecrow”, del tercer trabajo de la banda y uno de los más complejos. Pero más que esperar una canción de esta etapa, era el músico que iba a acompañarle, pues en la gira de 2013 no estuvo, pero este año no faltó y a los pocos minutos aparecía en escena Jorn Lande con esa voz fría como el hielo, esa fuerza que desgarra y esa cara de mala hostia cuando canta para reflejar que se deja el alma con cada estrofa. Llegados a este punto, ¿cómo se podía mejor lo inmejorable? Pues la respuesta era sencilla, con un repertorio a la altura de las circunstancias.
Aprovechando la enorme presencia de Jorn Lande, la canción que abría la segunda etapa fue “Lucifer”, de su último trabajo “Ghostlights”, precioso tema que gana muchísimo en directo y donde una más que adecuada ambientación de luces rojas, hizo que la atmosfera en torno a los músicos fuera casi mágica. Uno de los momentos que más sorprendieron al público que abarrotaba La Riviera, fue cuando el guitarrista Oliver Hartmann nos demostró que también canta de maravilla, sirviendo de perfecta introducción a Tobias Sammet para que ejecutase una de las mejores canciones de “The Great Mystery”.
Ya habíamos visto a Kiske, a Catley, a Adkins y a Lande. A Somerville la teníamos siempre ahí (repito que su trabajo fue inconmensurable, como su simpatía), por lo que sólo faltaba el simpático Eric Martin de MR. BIG. Curioso y digno de admiración como Tobias Sammet, es capaz de componer canciones que se alejen de lo que suelen hacer los vocalistas a los que van destinadas y que queden del todo naturales. Mr. Martin, nos deleitó a todos con “What´s Left On Me”, una bonita balada con la que iba preparando a la gente para “The Wicked Symphony”.
Los nueve minutos y medio de este corte, que empieza con una intro instrumental muy épica que poco a poco aumenta su ritmo e intensidad, para pasar directamente a las poderosas cuerdas de los músicos de AVANTASIA estuvo coronada por el propio Eric Martin (que originalmente no formaba parte de ella) y acompañada de Hartmann, Somerville, Langhans y de nuevo Lande. El bueno de Tobias aprovechó para tomarse un merecido descanso. Cinco voces a la vez, perfectamente ecualizadas (un diez para el técnico de sonido) y fácilmente distinguibles. Aunque nada comparado con las nueve voces simultáneas que llegó a tener el concierto en algún punto concreto.
Una vez que Tobias Sammet salió a la palestra, dedicó una de sus divertidas charletas (además que su inglés es perfectamente entendible) y nos presentó el que será el segundo single de “Ghoslights”, “Draconian Love”, una canción con tintes góticos donde el vocalista principal es el corista Herbie Langhans, sus estribillos con un toque a lo EBM lograron que “Draconian Love” fuera uno de mis temas favoritos del concierto. Ya habíamos alcanzado el ecuador de su actuación y el líder de EDGUY por fin hacía referencia a “The Metal Opera”, el primer disco de AVANTASIA. Me daba igual que tocasen de ese álbum, pues uno de mis discos conceptuales preferidos, pero es que menudo momentazo cuando “Farewell” empezaba a sonar, lo que significaba por fin escuchar a mi adorada Amanda Somerville en toda su gloria, por cierto, que menuda coña la de Tobias, al presentar la canción como un tema “prestado” de la banda sonora de Titanic.
De nuevo Tobias Sammet, desaparecía del escenario para que la intro que precedía a “Stargazers” nos dejase sobre el escenario a ese tridente formado por Kiske, Lande y Atkins. Este corte (de nuevo cercano a los diez minutos) fue uno de los más coreados gracias a su estribillo sencillo y pegadizo. Genial la forma en que los cantantes iban intercalando sus momentos de gloria. Ya os podéis imaginar como AVANTASIA iba jugando con nuestras emociones, tocaban temas nuevos, luego otros más clásicos y Tobias siempre sabía cómo presentar la canción de turno, con “Shelter From The Rain” prometieron un tema rápido (tras decir que AVANTASIA tiene todo tipo de canciones y de cualquier género) y vaya si lo ejecutaron. De nuevo sin palabras (y ya iban unas cuantas veces).
“The Story Ain´t Over”, una de las canciones más bonitas que se han compuesto jamás, además una de las preferidas del público, pues al comienzo no hizo falta que ningún vocalista la cantase, el respetable la entonó a la perfección para deleite de la banda, ahora bien en lugar de seguir por donde la gente se paró, AVANTASIA demostrando una vez más profesionalidad y dedicación a sus fans, la tocó entera y bueno, las sonrisas y las lágrimas (de alegría) aparecieron.
Con “Let the Storm Descend Upon You”, nos despedíamos de “Ghostlights” y yo seguía sorprendido de ver como un tema de doce minutos se me pasaba volando y más uno con una larga parte instrumental, aunque todo lo que preceda a la salida de Jorn Lande, siempre es algo que merece la pena y si es acompañado por Ronnie Atkins, mucho más. Sin que Jorn dejase el escenario, pudimos disfrutar de “Promised Land”, broche de la segunda parte del concierto. Lo mejor (o lo todavía aún mejor) estaba a punto de llegar.
Tras un parón de unos segundos, comenzaba la introducción orquestal de “The Metal Opera” y Michael Kiske con su enorme presencia nos dejaba a todos temblando con el brutal grito de “Reach Out For The Light”, Power Metal en estado puro y todo un viaje en la nostalgia a una época donde descubríamos que era eso llamado “AVANTASIA” y fantaseábamos con lo mucho que molaría ver algo así en vivo y en directo… Quince años más tarde ahí estábamos. Sin respiro, tocaba el momento preferido del que esto humildemente firma, ese punto de inflexión en la vida de todo metalero que por fin escucha uno de sus temas preferidos por primera vez en un concierto, amigos, era el momento de escuchar AVANTASIA (no la tocaron en Sonisphere), no me importa admitir que me emocioné profundamente y como yo, mucha gente tal y como se vino arriba todo el mundo cantando aquello de “We are the power inside…”
Se podría haber acabado el concierto en ese momento, me habría dado igual, pero no, AVANTASIA todavía nos tenía preparados algunos temazos más y nada menos que con Eric Martin, que tras decir lo mucho que se divertía en las giras de la banda pese a la falta de sexo, se marcó un duelo de voz tremendo con Ronnie Atkins (al que definió como su “toxic twin”) con el tema “Twisted Mind”, para inmediatamente después darlo todo con “Dying For An Angel”, cuya ejecución hace olvidar totalmente a Klaus Meine, como el cantante original de este tema.
Ya sí que esto se terminaba y curiosamente eran más de las once en La Riviera, hora de corte en la que los dueños sueltan a los perros para echar a los heavys y que entren otras infectas criaturas sociales. Pero volviendo al concierto, Tobias nos recordó que AVANTASIA también grabó los EP´s “Lost In Space” y así para ir despidiéndonos nos ofreció en solitario “Lost In Space”; recordemos que no salía sólo al escenario desde la primera canción.
Como era de esperar, el show de AVANTASIA terminó con “Sign Of The Cross”, en la que todos los cantantes (los nueve, contando a Hartmann) tienen su momento de gloria en alguna estrofa. Dicho tema empalma directamente con el estribillo final de “The Seven Angels”. Un fin de fiesta ideal para lo que acabábamos de vivir en la sala. Lo mejor de todo es la sensación que dejó AVANTASIA, la ilusión en las caras de la gente y que prometieron volver después de ver que en España esta música sí que funciona.
Me muero de ganas de volver a verlos en directo en el Leyendas del Rock 2016, muchas gracias a todos por leernos y es una pena que no hayamos podido ofrecereos fotos de más vocalistas, pero ya sabéis como van estas cosas, sólo se permite el paso al foso de prensa durante los tres primeros temas. De todas formas, muchas gracias por leernos.
Crónica: Txema Sáez
Fotos: Samuel González
. La Metal Opera de Tobias Sammet arrasó en su actuación){kind=link}