Los franceses DESTINITY acumulan una larga carrera discográfica con, atención, nada menos que ocho discos de estudio, que fue evolucionando del Black Metal al Thrash-Death pasando por etapas más sinfónicas. En su último álbum, "Resolve In Crimson", se centran en el Death Melódico, y comprobamos por qué nunca han logrado ascender a primera división.
Los motivos son principalmente dos: cierta indefinición musical y sobre todo falta de originalidad. Pese a todo, se puede decir que DESTINITY es una banda competente y que cumple con los requisitos del Melodeath moderno, pero lo hace sin brillar y sin aportar novedades y, además, en la variedad de estilos en los que navega la banda no consigue sobresalir en ninguno de ellos. En resumen, las partes más Death Metal no destacan, y tampoco lo hacen los estribillos con voces claras orientados al Modern Metal, por lo que "Resolve In Crimson" no llega a atrapar en ningún momento.
Con todo, sigue habiendo cosas buenas y canciones aprovechables, como "Black Sun Rising", con un poquito de AMON AMARTH y esos estribillos a lo DISARMONIA MUNDI, y especialmente el tercer corte, "Aiming A Fist In Emnity", con muy buenas ideas a las guitarras como deja sentir su melodía central, curiosamente siendo uno de los pocos temas que no tiene voces limpias en el estribillo. En ese aspecto sí destaca una canción pegadiza -y además de larga duración, lo que permite incluir más evoluciones en su desarrollo- como "Can't Stand The Sight", adornada también por algún llamativo arreglo electrónico, si bien cabe destacar que el empleo de samplers por parte de DESTINITY no es para nada abusivo. También habría que destacar la puntual grandilocuencia de determinados pasajes de "The Hatred", pero donde otras bandas harían maravillas con el material melódico -por ejemplo, MERCENARY-, la formación francesa se queda corta.
Los cortes restantes... ya podrían ser como los mencionados aunque, si bien el grupo no ha querido caer en los manidos patrones del Death Melódico actual -y deberíamos darnos con un canto en los dientes por ello-, el riesgo tomado parece haber jugado en su contra, derivando en un desenlace correcto pero que no entusiasma, no atrapa, y se queda en un ejercicio de ramplonería que no cautiva en absoluto.
El problema con "Resolve In Crimson" de DESTINITY es, por lo tanto, que entra por un oído y sale por el otro. No queda poso pese a la corrección del propio grupo, y esa indiferencia que puede producir en el oyente es cualquier cosa menos satisfactoria.
Enrique Herrero
