Tras su reciente - y reiterada- salida de MASTERPLAN el nórdico vocalista de voz cautivadora JORN LANDE vuelve a las andadas. Esta vez con un álbum de tono orquestal, que bajo el título de “Symphonic”, contiene versiones de temas propios y ajenos, muchos de ellos ya asentados como clásicos del Rock u otras variantes de éste.
Es el caso de consolidados cortes como “Rock ´N´ Roll Children“ de DIO, tema que el noruego ya versionó en su (algunos dicen oportunista) disco homenaje al difunto cantante y que ahora rescata con un toque de chapa y pintura orquestal, de manera un tanto sosa y anodina, todo hay que decirlo, sin cambios o mejoras vocales. O el imperecedero clásico de BLACK SABBATH “Mob Rules”, también pasado por la batuta del encargado de los arreglos de orquesta del disco, Lasse Jensen, aunque en este caso con una sinfonía mucho más sutil y desapercibida que mantiene casi intacto el toque rockero de la pieza.
No obstante a muchos de nosotros nos asalta la gran duda. La pregunta sobre el porqué del lanzamiento de este álbum. Hablando en claro ¿merece realmente la pena? Es decir, con tan sólo seis meses de diferencia respecto a la edición de su último trabajo de estudio “Bring Heavy Rock To The Land”, sus colaboraciones presentes con AVANTASIA y el ir prácticamente a disco por año desde 2006, quizá no sea algo del todo positivo, sin mencionar las sospechas (tengo una mente mal pensante, qué se le va a hacer) de una supuesta presión por parte de la discográfica.
Pero siguiendo con el contenido del plástico, encontramos otras canciones que a nuestros oídos también resultan conocidas como ocurre con “Time To Be King”, un corte que se me antoja algo innecesario en esta nueva versión más instrumental y arreglada, pues profesando gran admiración por su banda creadora, MASTERPLAN, atestiguo que tiene temas mucho mejores predispuestos a ser orquestados.
Pero así es JORN, y al rubio parece que le gusta esto de dar un suave lavado de cara a piezas más antiguas de su carrera, también en solitario, como las pertenecientes a los discos “Out To Every Nation” y “Spirit Black”, respectivamente. Son la lograda y emotiva “Vision Eyes” o la pegadiza “Burn Your Flame”, la cual no pierde ni un ápice de ritmo ni fuerza en esta versión orquestada.
Algo parecido viene ocurriendo con el resto de tracks que componen el álbum, aunque aquí vemos sin disimulo alguno como JORN saltea con violines y pianos una mayoría aplastante de temas de su último y más reciente disco, “Bring Heavy Rock To The Land”, entre los que se encuentran “I Came To Rock”, “The World I See”, “Black Morning” o “My Road” siendo especialmente destacable esta última , la cual cuenta con un halo de misterio muy bien logrado en una canción cuya hermana gemela original, un breve tema acústico, es de por sí muy susceptible de ser llevada al lado orquestal.
Canciones barnizadas, pasadas por la brocha de un fulgor brillo de violines, junto a otras con ligerísimos toques orquestales, componen sin mucha sorpresa este “Symphonic”. Un trofeo más para JORN, aunque quizá no para mi estantería.
Jessica Tornos-Ybes
