METALLICA despliega sus armas ante 65.000 personas en Madrid

Metallica James Hetfield - Concierto en Madrid
Foto de Live Nation

Crónica de los conciertos de METALLICA, GHOST y BOKASSA en Madrid (3 de mayo de 2019, Valdebebas - IFEMA)

Bajo un sol de justicia… así podría comenzar una linda epopeya sobre caballeros y doncellas del Medievo. Sin embargo, estamos en el año 2019, un 3 de mayo para ser más exactos, en Valdebebas (Madrid), y nos disponemos a presenciar uno de los conciertos del año, el de METALLICA, banda teloneada por los cuasi novatos BOKASSA y por los ya veteranos y no por ello menos polémicos GHOST.

Con este ambiente y rodeada por numerosas camisetas negras, cuero y atuendos varios de la multitud que allí se congregaba (no en vano la entrada rondó las 65.000 personas), nos acercamos al recinto que el año pasado (y este) se acondicionó para el Festival Mad Cool (de hecho, todavía se mantiene el cartel puesto) para disfrutar de tres conciertos que, con sus más y sus menos, como ahora relataré, sin duda quedarán en la retina de todos los asistentes.

La entrada al recinto fue bastante fluida. Con las puertas abiertas desde las 16:30 horas de la tarde, no nos encontramos con ninguna cola reseñable, salvo, claro está, las de los 2 controles de acceso de bolsos, mochilas y demás que tuvimos que pasar. Por otro lado, la amabilidad del personal también fue destacable, aunque sí que es cierto que eché en falta más información acerca de los transportes de regreso del festival (pregunté a varios por los autobuses que dejaban en Plaza de Castilla y nadie sabía nada de cómo funcionaban). Al fondo, un escenario inmenso, flanqueado por la M y la A de METALLICA, lleno de artificio y siendo todo una pantalla que, por supuesto, durante las actuaciones de BOKASSA y GHOST, apenas se pudo disfrutar.


Por lo demás, mismo formato que un festival: cambio de moneda por tokens (un token equivalía a 3 euros) y precios… pues como el de algunos festivales. Litro de cerveza a 12 euros (cuatro tokens) y el vasito de plástico duro especial con el logo y la frase de “Metallica… and beer for all”, 3 eurillos de nada (un token). Personal vendiendo cervezas y nachos entre el público, dos puestos (el de la entrada bastante más grande) de merchandising y gente, mucha gente… y colas, muchas colas para todo, fue la tónica general de las poco más de cinco horas que allí estuvimos.

No nos alarguemos más…. Sin más preámbulos, comencemos a relatar lo que dio de sí tan especial velada.

BOKASSA

15 minutos antes de los horarios marcados y anunciados por la organización, esto es, a las 18:15 horas, saltaron al escenario los noruegos BOKASSA, una formación con un larga duración a sus espaldas, y otro segundo que lanzarán este año 2019, como pudisteis leer en la entrevista que recientemente les hicimos. Intentaron levantar al público español allí congregado aunque, todo sea dicho, con escaso éxito. Se notaba que el personal no los conocía.


Como he dicho antes, las pantallas traseras, en las que se proyectaba la actuación de la banda, eran imperceptibles, dado que aún era de día y el sol deslumbraba todo. De todas formas, dada la luz natural de la que gozábamos, pudimos ver perfectamente el concierto, que comenzó con bastante caña con “Impending Doom”, intro de su primer álbum, “Divide And Conquer”, para proseguir con “Last Night (Was A Real Massacre)”.

Los noruegos estaban emocionados (aunque el público no respondía del todo), y tras contarnos que el día de antes habían actuado en Sevilla para 40 personas e invitarnos a beber con ellos (lo de beber fue una constante a lo largo de su show), continuaron con “You Bring Party, I Bring Gasoline”, que sonó bastante limpia. Como tercer corte vino un tema que, según la banda, se compuso en su bar favorito de Noruega, “No Control”, y de seguido, tras comentarnos que sus colegas de Noruega no se creían que hiciera este tiempo en Madrid, vino “Mouthbreathers Inc.”, primer single de su nuevo disco que saldrá a la luz en junio, “Crimson Riders”.

Como colofón final nos deleitaron con “Vultures”, lo que ellos denominaron un tema de baile, invitándonos a coger a las parejas y a bailar, y donde el cantante en los tonos bajos desentonó bastante, acusando el cansancio; y concluyeron con “Walker Texas Ranger”, de nuevo cera para dejar al personal contento.

Al final, aun no siendo una mala actuación, pues gozaron de un buen sonido, dio la sensación de haber presenciado a un grupo bastante gritón (al final la voz del cantante y guitarrista Jørn Kaarstad resultaba estridente) con unos coros (los de los otros dos miembros, Bard Linga al bajo y Olav Dowkes a la batería) que, sin duda, es para echarles de comer aparte… ¡madre mía qué desafinación! No entonaban ni una y pegaban un bajón a la actuación brutal.


No obstante, esto no deja de ser cuestión de experiencia, así que supongo que en cuestión de unos meses o años, habrá mejorado la cosa… esperemos.

GHOST

Ghost - Concierto en Madrid
Foto de Live Nation

Voy a lanzarme a la piscina, aun a riesgo de detractores y haters: la de GHOST fue sin duda alguna la mejor actuación de la velada. Un sonido perfecto desde el principio, unos Nameless Ghouls entregados y un Cardinal Copia (Tobias Forge) que ejerció de maestro de ceremonias a la perfección, paseándose por el escenario y cantando de manera excelente. La lástima es que actuaran con la luz de la tarde y el sol aún de fondo, porque no nos permitió ver todo el espectáculo que traían de la manera que se debe, con una especie de altar con vidrieras.

Ghost - Concierto en Madrid
Foto de Live Nation

De nuevo con 15 minutos de antelación sobre el horario anunciado por la organización, apareció la banda al completo, todos vestidos de negro y con sus correspondientes máscaras, con el sonido de “Ashes” grabado de fondo, para continuar sin descanso con “Rats”, arengándonos Tobias Forge con un “Madrid… Are you ready to fucking rock?” que fue seguido tímidamente por los asistentes. Y es que se notaba demasiado que el respetable había ido allí a ver a METALLICA y que GHOST… le daba un poco lo mismo. Al final la formación consiguió que la gente acabara entrando en su juego, pero ya en los últimos compases. Una lástima, porque el bolo fue para disfrutarlo de principio a fin. No obstante, el grupo lo dio todo, y con unos petardos dio paso a “Absolution”, donde comenzaron a acercarse a la plataforma que había frente al escenario, más cerca de los fans, transmitiéndonos muchísima energía.

“For Madrid… Españaaaaa”. Así dio paso el Sr. Copia al temazo que es “Ritual”, donde consiguieron que la gente comenzara a entrar en materia; que fue seguida de “From The Pinacle To The Pit”, donde se pudo comprobar el genial estado de forma y registro vocal de Tobias Forge con los guturales; y continuada por “Faith”, que sonó contundente y perfecta. “Cirice” no le vino a la zaga, y por su parte, “Miasma”, la instrumental, fue de lo mejorcito del concierto, logrando sorprender al personal, pues en la parte del saxo, sacaron a un Papa Emeritus tocándolo en directo (el saxo, me refiero), lo que sin duda descolocó a los asistentes.


Ghost - Concierto en Madrid
Foto de Live Nation

Para el final se dejaron cuatro señores temas: “Year Zero”, que traía los coros gregorianos grabados y que vino ambientado por el humo que salía de todas partes del escenario y unas llamaradas al final; “Mummy Dust”, acompañada de los movimientos sensuales y sexuales del Cardinal Copia (ya que, como él mismo anunció, era una canción heavy que haría mover nuestros culos); la maravillosa “Dance Macabre”, que acabó, por fin, de animar a la gente; y la grandiosa “Square Hammer”, que sonó perfecta y que terminó con unas bengalas como fin de fiesta.

Desde luego, GHOST sí que nos dejó con ganas de más. Por su actitud, su entrega y su perfección. Una lástima que mucha de la gente que allí estaba no supiera disfrutarlos. Sin duda, fue el concierto de la noche.

METALLICA

Metallica James Hetfield - Concierto en Madrid
Foto de Live Nation

Poco más de un año había pasado desde la última vez que estuvieron por tierras patrias, con más pena que gloria debido al sonido desplegado en el Wizink Center, y había ganas de redención entre el público. ¿Cómo se presentaría esta vez la banda de Ulrich, Hetfield, Hammett y Trujillo? Por de pronto el escenario era distinto, tal y como hemos descrito en la introducción de esta crónica. La ubicación y el recinto también. ¿Qué espectáculo traerían? ¿Con qué sorprenderían esta vez?

Lo primero que llama la atención en estos eventos, aunque esto no depende de la banda, sino del público, es la cantidad de gente “no-verdadero-fan” de METALLICA que había. No voy a ser purista, pero es cierto que, sobre todo en el Golden Circle, los fans de METALLICA de toda la vida se contaban con los dedos de las manos. El resto… pues directos para su Instagram o Facebook y poco o ningún ánimo ni entrega durante las canciones.

De todas formas, a fe de ser justos, también es cierto que durante los temas se oyó un gran corear de gente entregada a la causa, lo que, sin duda alguna, siempre resulta emocionante y pone los pelos de punta (y no era por el frío que hacía en Valdebebas, no).

Metallica Kirk Hammett - Concierto en Madrid
Foto de Live Nation

Esta vez el retraso hizo su aparición en escena. Si GHOST y BOKASSA habían comenzado con 15 minutos de antelación sobre la hora marcada, METALLICA lo hizo con 15 minutos de retraso, es decir, hasta las 21:15 no comenzaron a sonar los acordes de “It’s A Long Way To The Top (If You Wanna Rock And Roll)” de AC/DC, que era el preludio a la ya conocida “The Ecstasy Of Gold”, del gran Ennio Morricone, que ambientaron con trozos de la película a la que pertenece: “El Bueno, El Feo y El Malo” en las pantallas del escenario, aunque las imágenes se cortaban, paraban y se veían pixeladas. Cosas del inicio, supongo.

Sin descanso, comenzaron a hincharse dos globos en la parte superior del escenario con la portada del último disco de la banda “Hardwired… To Self Destruct”, mientras sonaba la intro del tema y la propia canción en sí, que inauguró el concierto y ante la que la peña comenzó a gritar enloquecida, aunque no sonó como debiera… El bombo de Ulrich sonaba demasiado, lo sentíamos bajo nuestros pies, haciendo el sonido un poco bola, y a la voz de Hetfield le tuvieron que subir volumen porque se le oía bajito. Al final, y al mismo tiempo que terminaba el tema, los globos reventaron.

Metallica James Hetfield - Concierto en Madrid
Foto de Live Nation

De seguido llegó “The Memory Remains”, cuyo sonido mejoró, aunque el bombo de la batería seguía retumbando, y así fue hasta casi finalizar el concierto, aunque la gente no parecía percibirlo, pues estaba, en general, enloquecida cantando. Hetfield (con un chaleco a lo SAMCRO en el que había un parche que ponía “Papa Pet”) entonces dio la bienvenida a lo que él denominó la “Familia Metallica” para dar paso a “Disposable Heroes”, que siguió sin sonar a la perfección, dando la sensación, a veces, de que Ulrich iba como descompensado. Aun así, entró como un cañón entre la gente.

Las luces entonces se tornaron amarillas y la pantalla frontal se cubrió de imágenes de guerra para dar la bienvenida a “The God That Failed”, a la que siguió “The Unforgiven”, coreada por el público y con imágenes del videoclip detrás que, lamentablemente, sonó demasiado alta (quizá era por la posición en la que nos encontrábamos). Tras este momento Hetfield nos anunció que volvíamos a su último disco en el mercado para tocar una canción que iba para un buen amigo, para lo cual se vino a la pasarela frente a la gente y pudimos verlo más de cerca. Sonó entonces “Here Comes Revenge”, cuyo solo de Hammett fue engullido literalmente por la batería de Ulrich.

Metallica Robert Trujillo - Concierto en Madrid
Foto de Live Nation

Y con el “Hardwired… To Self Desctruct” continuamos, pues el siguiente tema fue “Moth Into A Flame”, dedicada según Hetfield a la adicción a la fama, y ambientada con fuego tanto en el escenario como en las torres de arriba. Ha de decirse que las llamaradas de las torres vinieron genial, pues el frío que hacía no era ni medio normal. Tras este momento, Hetfield apeló a su edad, diciendo que eran ya viejos, y que llevaban ya girando cerca de 38 años (no es por nada, pero se les nota, sobre todo a él, que apareció mayor, con un golpe en el ojo y heridas en las manos, y más anchote), a la par que aprovechó para agradecernos eso, porque gracias a los fans estaban donde estaban, lo que la gente coreó con el “oeoeoeoe” ya archiconocido. Esto sirvió de preludio al “Sad But True” que, ya sí, sonó decentemente bien.

Los sonidos grabados y épicos, así como las imágenes de luces de edificios de ciudad, sirvieron para dar paso a “No Leaf Clover”, que supuso un pequeño bajonazo entre el respetable. Aunque para bajonazo lo que vino después: el momento Trujillo-Hammett tocando una canción de “Los Ramones de Algete”, LOS NIKIS, concretamente “Brutus”. Sin palabras. Desde luego, la gente alucinó, estaba como patidifusa. Y así se quedó con el solo de bajo de Trujillo que vino a continuación, levantándose un poco para aplaudir a las imágenes de Cliff Burton que se proyectaron de fondo.

Metallica James Hetfield - Concierto en Madrid
Foto de Live Nation

Todo este espectáculo dio paso a “St. Anger”, que sonó descompensada, entrando a destiempo en algunas partes, sobre todo en las lentas, quedando bastante deslucida, pese a las luces de láser de diferentes colores proyectadas, que molaban bastante. Pero tras esta bajona llegaron cortes que, para ir cerrando, levantaron al personal llegando a hacerle enloquecer. Comenzaron con “One”, que vino precedida de llamaradas, bengalas y sonidos de guerra; siguieron con “Master Of Puppets”, en cuyo estribillo dio la ligera sensación de que se desacompasaban de nuevo, aunque la peña ni lo notó, pues estaba enloquecida cantando; enlazaron con “From Whom The Bell Tolls”, para lo cual toda la banda fue a la pasarela frontal, incluido Ulrich, y ya se quedó allí durante la traca final: “Creeping Death”, que destrozaron ligeramente; y “Seek And Destroy”, que cerraron con la pantalla central mostrando las letras de METALLICA.

Con los coros de “oeoeoe” del personal, que había llegado desde muchas partes, no solo de España, comenzaron los bises con “Lords Of Summer”, que volvieron a tocar desde atrás y que vino ambientada con una bandera española de fondo con las letras de METALLICA, en blanco, encima. Y ya, para cerrar, llegaron los dos temas que la gente echaba en falta: “Nothing Else Matters”, ambientada con luces láser de color verde; y “Enter Sandman”, que dio pie a la gente para saltar y que terminó con diversidad de fuegos artificiales proyectados al aire desde detrás del escenario.

Al final, 2 horas y 15 minutos de espectáculo desigual del que pudimos disfrutar. Y digo desigual porque el set no fue de lo mejorcito que se podía esperar, porque a nivel sonido no fue todo lo bueno para una banda de la talla de METALLICA y porque, sinceramente, ya se les nota mayores en escena, sobre todo a Hetfield. El concierto fue disfrutable, claro que sí, y escuchar temazos como “Master Of Puppets” o “From Whom The Bell Tolls”, o los que sean del “Black Album”, siempre lo es, y siempre se da todo en los mismos y se canta y se elevan los cuernos al alto, pero hay que ser críticos. En este caso METALLICA dio todo de sÍ... Todo lo que pudo.

Ojalá todos los que fueron lo disfrutaran a lo grande.


 

Más información sobre METALLICA en su Facebook.

Facebook de GHOST.

Facebook de BOKASSA.

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Padawan. Con los pies aposentados aquí casi por casualidad, unas veces cámara en mano, otras sobre el teclado, voy dejando testimonio de lo que acontece en cada concierto o en cada disco. Oscura por elección, todo lo que tenga ese tinte es mi debilidad.

3 COMENTARIOS

  1. El concierto además de caro fue bastante malo, y peor aún la ubicación, no se veía nada a no ser que fueses vip. El set list tampoco ayudó nada. Es una opinión generalizada de los que allí estuvimos. Mucha gente de brazos cruzados, impensable en un concierto de este tipo.
    A no ser que la próxima vez sea en un pabellón o estadio, no vuelvo

  2. Un timo, con todas las letras, pagué para ver y oír a mi grupo, no para tener una sesión de youtube con un sonido pésimo. Escenario muy bajo para que solo lo vieran los vip (entrada Gold) sonido no probado y, por consiguiente, pésimo. El robo de los Tokens y los vasos, mejor no mencionarlo, casi no había urinarios, si llegaban a uno por mil, ya era mucho. Una decepción, me siento estafado

  3. Increíble, hace ya 3 años de esta critica del concierto de Metallica en Madrid. Que se diga que están viejos y que hicieron lo que pudieron cuando y a día de hoy (2022) es la banda de rock más potente del planeta, me parece hecha por un detractor de la banda. Todo el mundo sabe que Metallica es tan querida com oodiada,pero no deja de ser la más potente que ha existido nunca. Su sonido es siempre perfecto, alucinante. Escucha un directo de la banda hoy en 2022 y lee de nuevo la crítica.

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