MOONLESS - Calling All Demons

La sombra creada por BLACK SABBATH es muy alargada. Tanto en su primera etapa, como en sus posteriores formaciones, Iommi y compañía lograron crear una constelación completa de bandas que bebían directamente de ellos, de forma descarada unas veces, de forma más velada otras. Bandas como SAINT VITUS, PENTAGRAM, SOLITUDE AETERNUS o CANDLEMASS, no existirían sin esa semilla que puso BLACK SABBATH y la influencia se nota incluso todavía en nuestros días. Ese es el caso de los daneses MOONLESS que debutan con su primer larga duración, después de una demo-EP autoeditada y tras dos años de gestación de este disco. Bajo el título de “Calling All Demons” se esconde un tributo al riff pesado y pegajoso, teñido con cierto aura de los noventa (ese toque Stoner de otros grupos del género), pero en general rezumando espíritu Iommi por todas partes.

Si bien es cierto que el sonido de la guitarra es más “alternativo” y no tan clásico, recordando a ALICE IN CHAINS o sobre todo KYUSS, el resto en MOONLESS es puro BLACK SABBATH y sus múltiples rencarnaciones. La voz, similar en cuanto a su aire rasgado a la de GRAND MAGUS, es lo único que se sale un poco de la tónica sabbathica, porque el resto es una oda al buen Doom envejecido en roble de alta calidad: riffs que caminan al medio tiempo cabeceante, ritmos de cadencia pegadiza y un bajo que tiene voz propia y no es una mera segunda voz. Todo ello confluye en “Calling All Demons” y en poco menos de cuarenta minutos y seis canciones se despachan a gusto para los amantes de lo clásico y de lo pétreo, del aroma a cementerio lleno de sombras y de segundas dimensiones, todo ello sin olvidar su dosis de psicodelia necesaria.

Tal y como decía, lo más “actual” de MOONLESS es su sonido: la producción potencia la reverberación de los riffs, dando mucho cuerpo a las guitarras y dominando la sección rítmica el devenir de los temas. El resto es composición clasicista Heavy-Doom, con temas basados en riffs fáciles de memorizar, unos más pegadizos, otros más lentos y pesados, y de vez en cuando algún solo muy setentero que sirve para demostrar las cualidades melódicas de MOONLESS, sin alcanzar el grado de epicidad de los citados GRAND MAGUS o bandas nórdicas similares, ni tampoco el aire eclesiástico de CANDLEMASS. En cualquier caso, el resultado es fabuloso porque todo está muy equilibrado y cada tema es una joya.


Entre las composiciones se podrían destacar cuatro, dos de ellas por su atmósfera pegadiza y excitante, y las otras dos por su desarrollo mastodóntico y sabbathico. En el primer grupo estaría el corte de apertura, “Mark Of The Dead” y “Horn Of The Ram”. Ambos tienen mucho aire Stoner y se quedan grabados a la primera. En el segundo grupo estaría “Devil’s Tool” y sobre todo “Calling All Demons”, probablemente el corte más completo y sabbathico de todos, perfecto resumen de lo que da de sí un disco que no dice nada nuevo pero que se disfruta de principio a fin. Los dos cortes que restan, sin bajar el listón sirven de complemento y redondeo a un gran disco.

En definitiva, MOONLESS se ha sacado de la manga un disco básico para todos los que amamos el buen Doom, ese añejo y clásico, rítmico y psicodélico, pesado y pegadizo. “Calling All Demons” no dice nada que no se sepa, pero tiene espíritu y energía, dos cualidades difíciles de encontrar entre tanto producto prefabricado.

 

Raúl Ureña

Artículo anteriorEscucha el nuevo tema de AVANTASIA “Invoke The Machine”
Artículo siguienteTIERRA SANTA - Mi Nombre Será Leyenda

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí