U.D.O. - Steelhammer

"Steelhammer" supone para U.D.O. un nuevo comienzo por los varios cambios de formación que ha sufrido. Salió Kaufman, luego Igor Gianola y Udo Dirkschneider continuó su banda, incorporando a la formación dos nuevos guitarristas y distribuyéndose entre él mismo y el bajista Fitty Wienhold casi todo el peso compositivo del grupo. El resultado ha sido más o menos el mismo de siempre (es decir, un buen disco) pero se percibe que en "Steelhammer" ha habido una cierta involución en el sonido, que ha perdido ese espíritu mecánico que predominaba en las últimas obras para tornarse, en esta ocasión, en algo más orgánico. Esto ha beneficiado a U.D.O. al lograr temas con un poco más de gancho y más parecidas a las grabaciones de los 80.

El álbum empieza con el tema que le ha dado nombre, un tema machacón y poderoso, impactante y con un título Heavy a más no poder. Le sigue, ya bajando la intensidad, "A Cry Of A Nation" y la de nuevo ultrapesada "Metal Machine", que cuenta con riffs, melodías de guitarra y estribillo pegadizos, convirtiéndola en una de las mejores canciones del trabajo y que por este motivo ha sido objeto de un videoclip.

Vídeo de "Metal Machine"


 

Mención a parte merece la canción en castellano "Basta Ya", donde ha colaborado WARCRY y canta Víctor García, y creo que, precisamente por este motivo, ha recibido algunas críticas bastante fuertes. La principal razón estoy convencido de que es esa especie de manía que ha cogido una parte del público a los asturianos, pero la realidad es que la canción atrapa por sus letras sencillas y cargadas de mensaje, además de por su velocidad y potencia, con unos buenos riffs.

Como nota curiosa está "Heavy Rain", una canción de la que también se ha preparado un videoclip y que no sé cómo calificarla. Básicamente es un tema lento guiado por un piano y algunos instrumentos de viento y donde predominan los registros más dramáticos de la voz de Dirkschneider, pero no sé si se puede considerar una balada si quiera.


Vídeo de "Heavy Rain"

 

Después viene "Devil's Bite", que descoloca al principio con esos toques electrónicos, pero rápidamente se encauza en el sonido más mecanizado de U.D.O., contando con buenos coros y giros en las guitarras rítmicas, a las que seguramente sacarán mayor partido en la próxima obra, si se estabiliza la actual formación.

La segunda mitad del álbum está igualmente repleta de correctas canciones. Bajo el título de "Death Ride" se esconde una  pieza rápida y con la misma pegada que otras como "King Of Mean", "Timekeeper" o "Take My Medicine", y ese es el problema del disco, es demasiado largo para la homogeneidad que ofrece. Con menos canciones y manteniendo las notas discordantes o raras del álbum (sin perder el norte de lo que es U.D.O.) habría resultado más fresco. Sencillamente, una hora de música ha resultado ser demasiado.


Eso sí, si alguien pensaba que de la mitad del álbum hasta el final no había nada especial que nos hiciera vibrar, se equivoca: "Never Cross My Way" es un medio tiempo con unas líneas vocales magníficas, dramático y que te atrapa por completo con sus melodías. Un temazo en toda regla. La obra termina con "Book Of Faith", una crítica a la religión organizada y que podría tildarse de experimental para un grupo como U.D.O. por el uso de percusiones acústicas y presentar una estructura nada convencional, además de presentar arreglos orquestales de lo más interesantes hacia el final, cerrándose la audición de la obra con una buena sensación.

El objetivo se ha cumplido, hay un nuevo álbum en el mercado y tiene calidad de sobra para llevar el nombre de U.D.O. en su furiosa portada, pero habría sido aún mejor reduciendo su duración y siendo más selectivo a la hora de completar "Steelhammer".

 

Carlos Herrero

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Empecé a escuchar Heavy Metal en 1995 y con el paso de los años fui ampliando el espectro ahondado en el Metal Extremo, pero nunca olvidando esas raíces. Llegado el momento, sentí que aquello no era suficiente, empezando a involucrarme más en la escena con el periodismo musical desde 2005.

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