El principal baluarte del Power Heavy Metal asturiano y en la actualidad, el mayor representante del género en España, hace con "Inmortal" su octavo trabajo, sin salirse de su esquema habitual.
No podemos esperar que WARCRY cambie sus formas, habiendo sido siempre fructíferas en cuanto a resultados, tanto comerciales como creativos. Era pues difícil que no fuera así en esta ocasión, y sin cambiar prácticamente nada se ha facturado otra obra de calidad.
Ha habido en el aspecto técnico una producción de primer nivel (dudo que en este aspecto los estudios Finnvox hayan fallado alguna vez) que ha dejado espacio suficiente para que cada instrumento se desarrolle a la perfección. Desde la dosis de historia como "La Maldición Del Templario", la egiptología en "Keops" y el canto a Asturias de "Mi Tierra" muestran la tremenda variedad de las letras y temas a tocar de nuevo por Víctor García, como viene siendo habitual. De todos modos son las canciones de índole más personal y reflexivo las que riegan el resto del minutaje.
Los dos primeros temas abren el disco acorde a lo que se espera de WARCRY. "Quiero Oírte" y "Venganza" son cortes intensos, ideales para los minutos iniciales de "Inmortal" y que funcionarán bien en los conciertos, con esos estribillos mágicos fáciles de cantar, casi diría que por una posible identificación con el mensaje, más allá de su gancho sonoro. Esta siempre ha sido una característica que ha definido siempre a WARCRY y por fortuna se sigue manteniendo. Más adelante en el disco, hay cortes variados, en los que los asturianos no se cierran ninguna vía trabajando en distintos campos.
Vídeo de "Quiero Oírte"
Para el tercer corte "La Maldición Del Templario", el tempo elegido, la construcción de los riffs alrededor de una narrativa estupenda, estructurada en muy buenas estrofas y el propio conocimiento que aporta la canción hacen de esta una de las piezas más atractivas del álbum. Es una breve lección de historia a la que se han sumado los aspectos legendarios y el halo místico de la Orden del Temple. Gran canción, dura en las guitarras y que me ha cautivado en todos los aspectos.
"Siempre" cuenta con atractivos estribillos, pegadizos y repetitivos, haciendo que la canción funcione a las mil maravillas, y estoy convencido que también se dejará escuchar en los conciertos. Es quizá demasiado sencilla, aparentemente, pero ahí radicará su éxito. Si hubiera algún single que seleccionar, a parte del primer tema quizá se podría haber elegido este corte.
De nuevo, ha habido espacio para soltar algunos palos para aquel que los quiera hacer suyos, aunque según la explicación ofrecida por WARCRY es un simple alegato de venganza no dirigido a nadie concreto. Aún así, la fuerza de "Huelo El Miedo", colmada de vertiginosos solos de guitarra, le va al pelo a las durísimas palabras que incluyen sus estrofas, siendo una de las mejores del disco. Algo habrá tenido que ver en esta apreciación el que la canción me haya traído el recuerdo del desenfado que gobernaba sus dos primeros discos.
La sonoridad de "Si Te Vas" está próxima a "Keops", ya que aprecio ciertas tendencias de música del oriente medio o arábicas en ambas, aunque el concepto de cada canción es totalmente independiente. Ese medio tiempo le va como anillo al dedo para fortalecer esa impresión y hubiera quedado de maravilla que fuera una detrás de la otra, pero no, entre ambas se encuentra "Elección", que sería probablemente la pista más floja de todo el álbum.
En "Keops" se ha forjado un tema pensado de una forma más pausada y que es el que establece esa variedad compositiva de la que hablaba anteriormente. Se ha trabajado en esta pieza para recrear el ambiente egipcio y místico, denso y pesado, con diversos pasajes y silencios bien colocados que marcan el devenir de la canción. Puede que sea la canción más larga de WARCRY hasta el día de hoy y su grado de elaboración es digno de elogio. Es, sin duda, la canción que reina sobre las demás.
Para el final han quedado "Como Un Mago", un buen tema pero que no destaca en comparación con el resto del material puntero de "Inmortal", y el cierre del trabajo... que es magnífico: "Mi Tierra". Se trata ni más ni menos de un canto a la cruda belleza astur, las bondades y la dureza que por igual ha repartido esa tierra a sus habitantes, y que henchirá el pecho de orgullo a los oriundos de aquellos maravillosos parajes, ya que se identificarán perfectamente con lo que ahí se cuenta.
Era muy difícil que WARCRY pudiera superar "Alfa", de hecho era ya difícil igualarlo... y creo que no se ha conseguido. De momento "Inmortal" es una gran continuación para los asturianos, y esto ya son palabras mayores. No todos los días puedes poner el listón tan alto, pero se ha obtenido un resultado final satisfactorio. Creo que es más que suficiente para seguir valorando positivamente el trabajo de la banda.
Carlos Herrero
