HELLPRESS FEST 2018 - Conciertos de GRAPESHOT, GLOOM, CRIMSON SLAUGHTER y EXODIUM - 10 de febrero de 2018, Madrid (sala Siroco)
Cinco años ya desde nuestro primer festival, ¡se dice pronto! Contando con cuatro bandas excepcionales como GRAPESHOT, GLOOM, CRIMSON SLAUGHTER y EXODIUM pocas cosas pueden salir mal, y os aseguramos que cada vez que tratamos de dar forma a una nueva entrega de la fiesta de esta casa los quebraderos de cabeza están a la orden del día. Pero todo salió a pedir de boca: Gran asistencia de público, muchos amigos y caras conocidas, gran actitud y entrega de todos los grupos, estupendo sonido y una descarga brutal de Metal... ¡y todo cumpliendo con precisión casi milimétrica los horarios de la Siroco! En definitiva, que nosotros estuvimos encantados de que acudieseis a nuestro HELLPRESS FEST 2018 y esperamos que os lo pasaseis tan bien como nosotros y las bandas. Se os quiere y se agradece muchísimo vuestro apoyo a este evento humilde pero matón.
EXODIUM
A las 20:00 y con una puntualidad exquisita, dio comienzo el HELLPRESS FEST 2018. Los encargados de dar el pistoletazo de salida fueron los jovencísimos EXODIUM, un quinteto formado en 2015 y que de momento cuenta con un único (pero más que recomendable) EP de cuatro temas que fue tocado íntegro en su concierto.
Solo media hora de concierto pero, en tan escaso periodo de tiempo, EXODIUM demostró que el Heavy Metal patrio tiene mucho futuro y es que su atractiva Metal moderno del estilo de bandas como TRIVIUM, conjugado con el de otras formaciones más clásicas como JUDAS PRIEST o IRON MAIDEN, es efectiva a más no poder.
Sonó potentísimo, como un tiro y gustó al público que poco a poco fue llenando la sala Siroco de Madrid. No sabría decir que me gustó más, si las guitarras de Alejandro Gutiérrez y Javier Molino, Sergi Díaz convirtiendo la batería en una locomotora o ese pedazo de vocalista que es Erik Acosta.
Ya se ha dicho que EXODIUM es potente en directo, pero es que además es una banda muy técnica. Sus temas son complejos, llenos de cambios de ritmo y estructura, en especial el brutal “The Bright Of Chaos” o “Godless”. Además, estos chavales le echan pelotas y se nota que disfrutan en el escenario. Y esa energía se contagió a un público que no paro de saltar y animar a los músicos, dándolo todo cuando EXODIUM demostró que se atreven con todo y nos brindó una majestuosa versión de IRON MAIDEN, en concreto “Be Quick Or Be Dead”.
Su set estuvo compuesto por los cuatro temas de su EP, la citada versión y “Virus”, un adelanto de lo que será su esperadísimo primer disco de larga duración.
Larga vida al Metal y larga vida a EXODIUM.
Txema Sáez
CRIMSON SLAUGHTER
A las 20:45 horas clavaron su presencia en escena los madrileños CRIMSON SLAUGHTER. El cuarteto de Thrash Metal arremetió con fuerza desde su primer tema “Ruthless Pacificator” perteneciente a su EP “Surveillance States”. Si bien el sonido no parecía acompañar a la banda, escuchándose en algunos momentos algo conglomerado y apabullante, fueron solucionando el problema a medida que su actuación avanzaba; aunque nada que no pudiera solventarse colocándose al final de la sala, el lugar que gozaba de mejor sonido de todo el recinto.
Con todo, CRIMSON SLAUGHTER resultó una apisonadora en directo, pura velocidad y agresividad que fue demostrando con sus siguientes cortes, que caían como disparos en la sala. Con “Endless War” y “Altar of Sacrifice”, tanto por sus títulos como por su actitud, pudimos darnos cuenta en seguida que no iban a darnos tregua.
Anunciado como un auténtico tiro en la cabeza por su bajista y cantante Víctor Sánchez, llegó “Punisher”, último corte perteneciente a su larga duración “Cycle of Decay”, que hizo mover las cervicales al unísono a media Siroco al compás del ritmo de batería marcado por José A. Rodríguez, muy bien ejecutado por parte de sus compañeros guitarristas Daniel Zolyniak y Fran J. Rodríguez.
La tónica del resto de su actuación se caracterizó por la rapidez, que no cesó en ningún momento, con un puro Thrash Metal en cortes afilados como “Horror Chamber” o “Death Squad", finalizando su actuación sin cesar en su violencia sonora y letrística con “My Fist, Your Face” (toda una declaración de intenciones) abandonando el escenario a las 21:25 horas y dando paso al tercer grupo del Hellpress Fest 2018: GLOOM.
Jessica Tornos Yebes
GLOOM
La nota más dura de la noche en el festival la ponía GLOOM con su Death Metal llevado al límite y de tendencia al Brutal Death. En mitad de la preparación de un nuevo disco y con alguna otra fecha próxima acompañando a los holandeses GOD DETHRONED, mucha gente nos agredeció personalmente su inclusión en el cartel del HELLPRESS FEST 2018. Es cierto, eso sí, que es una banda que despertó sensaciones dispares. Por un lado, había gente encantada con su propuesta, y por otro lado otros que no sabían ni cómo abordarla.
Yo mismo, que había escuchado con asiduidad su EP "...Bless You All" y el álbum "Doggod", tenía dificultad en reconocer y seguir algunos de los temas que GLOOM desarrollaba. Y es que no es nada fácil ejecutar (y sonorizar) un directo con brutalidad y precisión, pero creo que ese no fue problema de los músicos, fue más bien un tema de la sala. Bajo mi perspectiva la pega que puedo poner a su show es que faltó dotar de mayor claridad desde la mesa de sonido a la guitarra de Fer. Por otro lado, la voz de Ricardo en su registro más rasgado se escuchaba demasiado baja. Por ambos motivos, las canciones acabaron perdiendo algo de su identidad.
Debido a esto pudimos ver un grupo más bestial respecto a su versión en estudio, al borrarse parte de esos matices de melodía de guitarras y no dejando aflorar los contrapuntos presentes en GLOOM que le hace ser un grupo mucho más accesible (dentro de los cánones del Metal Extremo) respecto a lo vivido en esta noche. Una pena, porque habría ganado mayor acogida su propuesta y captado más seguidores. A pesar de esos problemas en el sonido, su propuesta desencadenó algunos pogos y agitación en las primeras filas, haciendo disfrutar a los más fieles del Death Metal en esta vertiente brutal y técnica.
Además de adelantar canciones de su próximo disco y tocar "Cosmic Devourer", "Erich Zann", "Mass Infection" y "Doggod", hubo espacio para meter una versión de BRUTAL TRUTH. Muchos se quedaron contentos con lo que pudimos ver, y un servidor con ganas de catar más efluvios lovecraftianos en su próxima actuación.
Carlos Herrero
GRAPESHOT
Poco antes de las 23:00, y con una sala Siroco prácticamente llena, aparecía en escena GRAPESHOT, el quinteto madrileño de Groove - Southern Metal. Lo primero que me llamó la atención de su puesta en escena fue el peculiar y original pie de micro de Esteban, el vocalista, confeccionado a base de latas de cerveza y un soporte a modo de trípode que no era otra cosa que un barril con el logo de la banda serigrafiado.
La banda arrancó su actuación con “Void Your Soul”, tema que abre su último y reciente disco, "All About To End", editado el pasado curso. El festín empezó con un sonido nítido, potente y muy recargado de guitarras, aunque con la voz de Esteban algo baja. Cabe decir en este punto que el vocalista había estado enfermo durante toda la semana, sin haber podido acudir a sus correspondientes ensayos, con lo que el esfuerzo realizado por su parte fue mayor de lo habitual teniendo en cuenta que no llegó al cien por cien para su actuación en el festival.
GRAPESHOT siguió dándole cancha a su último lanzamiento con temas como “Parasites”, “Hamster Wheel”, “All About To End” y “Naked Emperor”, prosiguiendo ese sonido férreo y contundente que, en general, brilló durante toda la velada, y es que puede que a la céntrica sala Siroco le puedan achacar muchas cosas en cuanto a tamaño mismamente, pero el sonido que escupe su P.A. de sonido es garantía de calidad, lo cual se agradece.
“The Scene”, una pieza cruda y directa del anterior trabajo del quinteto, y “No Flowers”, se sumaron a la fiesta, para la cual la banda ya empezó a hacer de las suyas sacando una botella de Southern Comfort y repartiendo chupitos a diestro y siniestro, evidenciando que el modelo de show yanqui se lo tiene más que aprendido. Como no quiero engañar al personal, he de decir que servidor se engulló dos ‘shots’ sin problema alguno.
“Riots”, ese tema tan meramente americano que es “Johnny”, New Kind Of Pain” y la algo más rockera “All In” pusieron el broche final a una actuación repleta de feeling, buen rollo y tablas por parte de los músicos. Una hora de Metal contundente que cerró la última edición del Hellpress Fest, hasta el año siguiente.
Jorge Osoro
Fotos: Gema Redondo