Crónica del concierto de HOUR OF PENANCE, PUTRID TORSO y OBSTETRA en Madrid (sala Silikona, 3 de noviembre de 2024)
Dicen que no hay dos sin tres. Y va a ser cierto porque si el viernes asistía al que, para mí, ha sido el concierto del año en lo que a Death Metal se refiere con la increíble descarga de ULCERATE, y el sábado fue el turno de ver grupos nunca antes vistos por estos lares (con permiso de NECRODEATH que sí habían tocado en nuestro país anteriormente) como INCULTER, NEKROMANTHEON y MESSIAH, en el día del señor tocaba de nuevo, por tercer día consecutivo, acercase a la Silikona para presenciar la actuación de HOUR OF PENANCE. Mucha tralla en muy poco tiempo, sin duda.
Debido a estas circunstancias, y teniendo claro que ni por asomo la asistencia iba a ser la de los dos días previos, asumí que íbamos a ser pocos, muy pocos, los asistentes al bolo de los italianos. Efectivamente así fue pero, sinceramente, me esperaba aún menos gente. Sin embargo, y como comentaré a lo largo de la crónica, las ganas de liarla (en el mejor de los sentidos) de unos cuantos de esos asistentes superó con creces cualquier expectativa que tuviera sobre el ambiente y la respuesta del respetable hacía las actuaciones de las tres bandas que formaban parte del cartel.
OBSTETRA: Ioritz Rosa Gutiérrez a por todas
Siendo rigurosos, la primera de ellas no corrió a cargo de una “banda” como tal sino de un músico. Esto se debe a que OBSTETRA es el proyecto personal, en plan “one man band”, de Ioritz Rosa Gutiérrez. Como muchos otros proyectos de este tipo, él se lo guisa y él se lo come cantando y tocando todos los instrumentos necesarios (batería programada incluida) pero, normalmente, estos no tocan nunca en vivo circunscribiendo su actividad a editar discos de estudio y, si lo hacen, cuentan con músicos de directo. En su caso optó por la tercera vía, es decir, tocaba la guitarra y cantaba pero llevaba el resto de instrumentos grabados. En otros estilos he llegado a ver dúos y hasta incluso sólo un cantante cantar sobre bases pregrabadas, pero siempre lo he considerado más una “performance” que un concierto en sí. Iba a presenciar por primera vez algo de estas características en versión Grindcore. Curioso cuanto menos.
Venía a presentar “Nuclear Powerviolence”, su segundo disco recién salido del horno pero, sin embargo, arrancó su actuación con “Gunshot Punishment” del compartido con METATOR, MUGRE y CAPHRE llamado, acertadamente, “Extremo Norte” del que también interpretó “Extended Suicide”.
Entradas relacionadas:
A lo largo de unos treinta minutos, Ioritz repasó de manera bastante extensa su trabajo en OBSTETRA. ¿Cómo es posible que si sólo tocó media hora diga que el repaso fue bastante extenso? Pues básicamente porque sus canciones tienen la duración propia del estilo, es decir, en su mayoría duran entre uno y dos minutos por lo que el balance global fue de trece temas.
Tuvieron que pasar unos minutos, pocos obviamente con semejante duración de las canciones, hasta que, tras “Damage & Liberation” y “I Love Ur Voice” de su primer esfuerzo “The Evolution Paradox” y el compartido con MUTILATED JUDGE. respectivamente, presentó el primer corte de su último disco. “GxFxYxAxDx” fue la elegida y, a partir de aquí, dedicó la parte central de su actuación a desgranar algunos de los cortes que lo componen como “Enemy Of The Sober Reign”, “I’ve Only Got Two Friends And They Both Live In My Head”, “Enclosed In Purgatory” o el que le da título. Mientras tanto, algunos de los presentes se animaban a agitar sus melenas al viento y el resto mirábamos al músico, con una mezcla de curiosidad y perplejidad, desenvolverse en escena de manera solvente, he de decir.
Es cierto que me cuesta mucho valorar un concierto de estas características porque no estoy para nada habituado a ello; sin embargo, Ioritz ha decidido llevar su música a los escenarios de este modo y, obviamente, así hay que aceptarlo. Dicho esto, creo que supo aprovechar su tiempo sin extenderse en largos e innecesarios discursos entre canciones haciendo el concierto bastante dinámico. Tan sólo hizo algún chascarrillo del tipo “esto no es una banda, pero es lo que hay” o “tranquilos, que ya sólo me quedan dos” provocando alguna que otra sonrisa.
También aprovechó el tiempo entre temas para agradecer nuestra presencia, alabar a sus compañeros de gira y, para mi sorpresa, mentar a su padre y darle las gracias. Me gustó mucho este gesto porque, en ocasiones, los hijos somos muy ingratos con todo lo que nuestros padres hacen por nosotros y él reconoció públicamente la paliza que se había metido con la furgoneta para que él pudiera estar allí tocando para nosotros. Encima le ayudó a recoger los paneles laterales que llevaba y parte de su equipo. Totalmente merecido el reconocimiento a su progenitor.
Sin tiempo para mucho más, volvió a recalar en su primer disco con “The Tree of Science”, “In-Famous” y la que le da título, cerrando su corta e intensa actuación con “Off The Leash!” recibiendo nuestros aplausos por el esfuerzo realizado. No es mi estilo favorito ni de música, y eso que la voz me sonó menos “grind” y más “death” que en disco, ni de concierto pero creo que es justo reconocerle a Ioritz la pasión y el empeño que mostró por defender este proyecto.
Rapidísimo cambio para que, cuarto de hora después, aparecieran los también vascos PUTRID TORSO, aunque ya comentó Igor en una de sus intervenciones que algunos miembros eran de otras provincias de España, para ofrecernos una ración (o más bien aperitivo) de Brutal Death Metal. A tenor de lo presenciado, fue del agrado de un público que se volcó con ellos sorprendiendo esta reacción incluso a la propia banda.
Compenetración total en PUTRID TORSO
Formados hace apenas dos años por el guitarrista Ion Santos (encargado también del bajo en estudio) y el vocalista y encargado de la programación de las baterías, Igor Sánchez, PUTRID TORSO recientemente han incorporado a sus filas al bajista Oskar y a David a la otra guitarra. Después de presenciar su escueta, pero brutal, actuación de poco más de media hora sólo puedo decir que son grandes fichajes porque su nivel instrumental es francamente alto. Lástima que aún no hayan sido capaces de encontrar a alguien que se ocupe de la batería en vivo, el vocalista hizo un llamamiento por si hubiera un baterista en la sala interesado, porque llevar esas partes grabadas deslució un poco la actuación. Pero vamos, después de lo visto con OBSTETRA, a nadie pareció preocuparle este hecho lo más mínimo.
Con sólo un disco editado hace un año y un EP, “Structured Labyrinth”, que recogía los dos sencillos editados en sus inicios y que obviaron esta noche, su apuesta fue clara tocando al completo, y creo que en orden, “Trails Of Hypnotized Human Veins”. De este modo comenzaron con “The Second Coming Of Negative Utopia” que enlazaron con “Maremagnum Cacotopia” sin más pausa que nuestros aplausos. Desde el inicio les vi totalmente concentrados, tanto que cada uno de ellos permaneció clavado en su posición durante el tiempo que estuvieron en escena y tan sólo Igor se movió mínimamente en algún momento. Tal vez esto les penalizó un poco escénicamente pero ya estaba parte del público para compensar su ausencia de movimiento con los pogos que se empezaron a formar para mi sorpresa y del propio grupo, que ni siquiera los había pedido como sucede en otras ocasiones.
“The Chaotic And Pseudo-Slave Existence Of The Proletarian Turning To a Violent Revenge Against The Corporativist Businessman” (ahí lo llevas, báilalo) fue presentada con gracia por el vocalista, consciente de lo ridículamente largo que es el título del tema en cuestión, provocando algunas risas antes de arremeter con todo mediante “Path To Avoid” y “Cataclysmic Decline”, que siguieron la senda marcada por la brutalidad y el tecnicismo.
Me resultó curiosa la facilidad con la que los miembros recién incorporados al grupo tocaban las canciones. Esto, en el caso del bajista Oskar, rayaba lo insultante porque parecía absorto pensando en sus cosas mientras ejecutaba sus “imposibles” líneas de bajo. Muy crack el castellanomanchego publicitando, además, con su camiseta (al igual que David que le secundó en esta causa) su otra banda ARTHROPODAL HUMANICIDE.
Con el grupo totalmente asentado en las tablas sonando razonablemente bien para la sala en la que estábamos y el estilo que practican, una vez que bajaron un poco el sonido de la batería grabada que opacaba al resto de instrumentos (todos sabemos que el inmaculado sonido de ULCERATE jamás lo volveremos a escuchar allí), el público estaba cada vez más animado y volcado con PUTRID TORSO. Buena prueba de ello fue que el movimiento no cesó en el foso mientras afrontaban la recta final del concierto a ritmo de “Undesirable Hypothetical Society” y “Devoid Morality”.
Supongo que la gente no estaba muy al tanto del bagaje discográfico del grupo ya que, cuando Igor anunció que iban a tocar el último tema de la noche hubo gestos de desaprobación y peticiones a grito pelado para que tocaran más. Sonriente y complacido por este hecho tuvo que aclarar que “no tenían mucho más” y que era su quinto concierto. Esto me dejó alucinado porque, aunque todos los miembros del combo tienen un bagaje musical previo, sonaron francamente sólidos y conjuntados para haber tocado juntos tan pocas veces con anterioridad. Cuántas bandas con mucho más rodaje he visto dar conciertos infinitamente peores… Desde luego ver para creer.
De este modo, mostrándose absolutamente agradecidos por la respuesta obtenida y con la gente dándolo todo aún más, “Kowloon Resurgence” fue la encargada de dar por finalizada su actuación y dejarnos grabado en la retina otro hecho insólito y poco frecuente. Ante el animado ambiente que había, una chica que no parecía por su atuendo muy seguidora de los sonidos más extremos de la música (aunque soy de los que piensan que el hábito no hace al monje por lo que vaya usted a saber) decidió probar suerte y meterse en el pogo formado por chicos y chicas que se empujaban sin miramientos. ¿Consecuencia? Que según entró, medio segundo después, salió despedida de un empellón a un par de metros acabando en el suelo. Afortunadamente no hubo que lamentar lesión de ningún tipo y fue ayudada a levantarse apareciendo sonriente asumiendo que era parte del riesgo que corría ya que no hubo mala intención por parte de nadie. Peculiar colofón a una descarga que me gustó más de lo esperado y dejó a la gente con ganas de más. Eso siempre es una buena señal.
HOUR OF PENANCE, intenso pero breve concierto
A pesar de los horarios publicados, ningún grupo tocó el tiempo de que disponía. En el caso de los teloneros tenía sentido, y más cuando PUTRID TORSO no podían hacerlo ni tocando todo su material editado, pero no en el de los italianos que presentaban “Devotion” que es, ni más ni menos, su noveno disco de estudio quedándose su actuación, para mi gusto, bastante escasa en lo que a duración se refiere. De cualquier manera, debido a esto, HOUR OF PENANCE salió, afortunadamente, unos 25 minutos antes de lo previsto. Y digo afortunadamente porque, con todo “el pescado vendido” en lo que a asistencia se refiere, siempre es bueno ganar unos minutos de sueño, sobre todo si es domingo y madrugas al día siguiente para trabajar.
Los minutos previos a su actuación fueron un poco caóticos ya que hubo algunos problemas técnicos durante los ajustes y pruebas finales de sonido que demoraron su arranque. El micrófono se acoplaba y no parecían dar con la clave para arreglarlo desde la mesa, el bajo de Marco Mastrobuono no se escuchaba y la guitarra de Giulio Moschini, el miembro más antiguo del cuarteto romano, directamente no parecía estar conectada. Caras de estupor y, por qué no decirlo, también de resignación al ver el panorama que hicieron que, finalmente, decidieran empezar y que fuera lo que Satán quiera.
“Devotion For Tyranny”, el tema que abre “Devotion”, y “Birthright Abolished”, también del último trabajo, fueron las cartas de presentación ante los cuatro gatos allí reunidos. Tampoco creo que los italianos esperaran mucho más pero es cierto que el ambiente fue un poco frío en estos primeros compases tanto por parte del público, un tanto expectante, como de la propia banda que parecía que no tenía sangre en las venas a pesar de ser “mediterráneos”. Y eso que empezaron a echar la vista hacia atrás con “Cast The First Stone”, “Paradogma” y “Incestuous Dynasty Of Worms”, estas dos últimas de uno de sus mejores trabajos como es “Paradogma”. Pero ni por esas parecía “despegar” el concierto.
Volvió a ser necesaria la pasión de las dos chicas más activas esa noche para catalizar, de nuevo, el fervor del sector más animado del respetable y aparecieran otra vez los pogos. Primero tímidamente en la citada “Incestuous Dynasty Of Worms” y ya, a partir de “Flames Of Merciless Gods”, un no parar aunque no fueran precisamente “masivos”. Esto animó un poco al grupo aunque, en realidad, el único que se dio por aludido fue el bajista que, de larguísimo, fue el miembro más activo del cuarteto acercándose al borde del escenario, poniendo “caretos” y viviendo con intensidad el concierto. El resto, sobre todo Giulio, la verdad es que permaneció en su lado del escenario a lo suyo mientras Paolo Pieri se ocupaba de la parte vocal y las siete cuerdas de manera más que correcta. Sin embargo, en el apartado de frontman creo que pudo dar más de sí y no simplemente limitarse a presentar los temas y ya. Sé que no tocan el estilo más feliz del Metal pero tampoco hubiera pasado nada si hubiera arengado algo a la gente que estaba por la labor.
Además de presentar “Devotion”, no muy exhaustivamente la verdad ya que “Retaliate” dio por finiquitada su representación, tiraron de su considerable catálogo para dejar alguna pildorita de sus otros trabajos a excepción de los dos primeros. Inicialmente pensé que era porque nadie de la formación que nos visitó estaba en ellos (vivimos tiempos en los que “todo vale” porque desde hace casi tres lustros no hay un solo miembro original en HOUR OF PENANCE y ahí siguen) pero resulta que Giulio sí que grabó “Pageantry For Martyrs”, ya que entró en 2004 sustituyendo a Francesco De Honestis. De hecho, de su tremendo “The Vile Conception” sí rescataron “Misconception” en la recta final de su descarga, justo antes de su falso bis, y de ese disco también estaba presente esa noche únicamente el guitarrista de Campobasso. Sus razones tendrán.
“Blight and Conquer” acabó con las referencias a “Misotheism” mientras que “Regicide”, del disco de mismo título, dio paso al bloque dedicado a “Sedition” con la ejecución de “Sedition Through Scorn” y “Ascension”. Estábamos en los momentos álgidos del concierto y la gente parecía estar disfrutando bastante. Lástima que, llegados a este punto, Paolo anunciara “Misconception” como último tema de la velada cuando no llevaban ni 50 minutos y la gente más “arriba” parecía estar.
Como he dicho anteriormente, no fue la última canción del grupo porque faltaba “Theogony” pero, supongo que la misma chica que acabó en el suelo en el pogo de PUTRID TORSO no lo sabía y quiso aprovechar la coyuntura para volver a lanzarse al “abismo”. Fue recibida con júbilo y risas por los que seguían dándolo todo y se convirtió, por unos momentos, en la “reina del pogo” ya que los más corpulentos apenas la empujaban levemente y la intensidad bajó bastante para evitarle un nuevo susto en forma de caída. De hecho estaba tan en su salsa que se quedó también para la siguiente.
Tras “Misconception” los italianos hicieron amago de retirase y llegué a pensar que nos iban a escamotear, pese a la insistencia del público, la ya nombrada “Theogony” que formaba parte del repertorio que estaban tocando en esta gira. Afortunadamente no fue así, porque es una canción alucinante, y con ella se marcharon definitivamente sin llegar a estar ni una hora sobre las tablas. La gente no quería irse y pidió con insistencia otra más pero debe ser que sólo han ensayado las trece que tocaban y el verdadero bis nunca se produjo, y mira que creo que nos lo merecíamos. Una pena porque ese gesto sí que habría sido de agradecer.
Promotora: Kivents
Sigue a HELLPRESS en Whatsapp para más contenidos de Metal.
){kind=link}