THE NIGHT FLIGHT ORCHESTRA y ONE DESIRE ofrecen una fiesta de altos vuelos en Madrid

Crónica de los conciertos de THE NIGHT FLIGHT ORCHESTRA y ONE DESIRE en Madrid - 10 de marzo de 2020 (sala Mon)

El pasado martes 10 de marzo acudimos a la madrileña sala Mon Live para disfrutar de una noche de Hard Rock de calidad de la mano de las bandas THE NIGHT FLIGHT ORCHESTRA y ONE DESIRE. Un plan apetecible para disfrutar de una buena velada de música en directo en la capital. Lo que no me imaginaba es que fuera posiblemente uno de los últimos bolos que se podrán ver en sala debido a la pandemia mundial provocada por el coronavirus. Como ya sabréis, todos los eventos de más de mil personas quedan suspendidos cautelarmente, y los recintos cuyo aforo sea inferior a esa cifra deberán reducir el número de entradas a un tercio. Se avecinan tiempos complicados para la música en directo, pero mientras tanto hablemos un poco del concierto de marras.

ONE DESIRE

Las puertas de la Mon se abrieron a las 19:30, y el panorama era un tanto desolador con apenas diez personas haciendo cola. Los fineses ONE DESIRE eran los encargados de calentar el ambiente comenzando su actuación unos minutos antes de la hora prevista, pasando las ocho de la tarde. Unas treinta personas estaban allí (por fortuna ese número fue aumentando paulatinamente)  para ver al cuarteto que tan buen sabor de boca nos dejó hace un par de años con H.E.A.T.

Lamentablemente ONE DESIRE tuvieron la mala suerte de contar con un sonido pésimo durante toda su actuación. Las guitarras no se escuchaban, la ecualización del bajo saturaba al resto de instrumentos y para colmo el micro estaba algo bajo. Eso sí, sobre el escenario una banda de diez a nivel de entrega. El guitarrista y cantante André Linman se ganó al respetable con su carisma.

El set de ONE DESIRE se basó principalmente en su primer disco de título homónimo, aunque nos dejaron escuchar un par de adelantos de su próximo "Midnight Empire" como fueron "Shadow Man" (con la que comenzaron) y "Down And Dirty".

Sobre las tablas pudimos ver a una banda solvente de Hard Rock con ese sonido “Frontiers” tan característico (para bien y para mal). Sobre el resto de temas, destacar la cálida intro de teclado que anticipaba ese gran hit que es "Apologize", tema que enlazaron con la pegadiza "Whenever I’m Dreaming", que levantó a todo el respetable que se agolpaba en las primeras filas. Redujeron la intensidad bastante con la balada, insoportablemente pastelosa para un directo, "This Is Where The Heartbreak Begins". El colofón lo dieron con "Buried Alive", su tema más potente.

El grupo agradeció durante todo el concierto el cariño recibido, y es que al final contaron con algo más de cien almas, a la par que hicieron alguna coña al respecto al coronavirus. No creo que tardemos en ver a ONE DESIRE girando por España en solitario. Habrá que estar atentos.

THE NIGHT FLIGHT ORCHESTRA

Pasadas las 21:10 de la noche (de nuevo con algo de antelación) se volvieron a apagar las luces de la Mon Live. Entre cien y ciento cincuenta personas esperaban con ansiedad que las azafatas de vuelo de TNFO Anna Mia-Bonde y Anna Brygard nos dieran a todos las instrucciones precisas para abrocharnos las cinturones y despegar a la fiesta de altos vuelos que montó la superbanda sueca.

Máxima expectación por disfrutar de los temas de su nuevo disco "Aeromantic" (sucesor del maravilloso "Sometimes The World Ain’t Enough"). Además todavía se mantenía en el recuerdo el conciertazo que dieron en su anterior visita. Teníamos todos los ingredientes necesarios para una gran velada pero… los problemas de sonido que acompañaron a ONE DESIRE en su actuación siguieron vigentes durante buena parte del show de THE NIGHT FLIGHT ORCHESTRA.

El bajo de Sharlee D’Angelo (ARCH ENEMY) junto con la batería de Jonas Källsbäck saturaban el resto de instrumentos. No es que fuera una bola de sonido ininteligible, no, es que solo es escuchaban esos dos. El micro de Björn Strid (SOILWORK) tenía un volumen ridículamente bajo, así como los de las Annas, que no pararon de moverse y animar pero cuya voz no pudo apreciarse hasta que pasaron unos cuantos temas.

En la sala, indignación y gritos entre tema y tema. Pero sobre las tablas algo muy distinto: THE NIGHT FLIGHT ORCHESTRA estaba sencillamente hechizando al personal con toda una lección de clase y glamour. Un montaje donde no faltaban las luces de neón, la brillantina, las chaquetas con solapas o el champagne. Los músicos demostraron un talento y un amor por la música (sin importar el estilo) fuera de lo normal, poniendo de manifiesto su habilidad para adaptarse a un estilo tan distinto del que suelen practicar habitualmente.

Este festival de Hard Rock, AOR, Pop con sus ramalazos y miradas al Funky o al Soul comenzó "Servants Of The Air", el tema con el que se abre su nuevo disco. Sin un segundo de descanso THE NIGHT FLIGHT ORCHESTRA puso toda la carne en el asador con su clásico "Gemini", seguida de "Divinyls" (muy celebrada y coreada por sus fans). En estos dos cortes el sonido del micro de Björn mostró claros síntomas de mejoría, que a partir de este momento solo irían perfeccionándose.

Las Annas hicieron acto de aparición (a nivel técnico, porque a nivel escénico siempre estuvieron sublimes) con "Living For The Nighttime". A partir de la siguiente canción, "This Boy's Last Summer" se da el punto de inflexión. El sonido poco a poco se recupera en todos los instrumentos. La banda parece percatarse de ello con el consiguiente éxtasis sobre el escenario que provocó una mayor comunión con la gente. Björn no paró de moverse a partir de entonces, interactuando con todo el grupo, regalando sonrisas… grandes momentos quedaban por vivir con esta pequeña píldora de felicidad que THE NIGHT FLIGHT ORCHESTRA nos regaló a todos el pasado martes.

Solo un par de acordes de teclado de Richard Larsson bastaron para identificar "Something Mysterious", siendo uno de los temas más cantados de toda la actuación.  Larsson siguió acaparando algo de protagonismo cuando se hizo cargo de la percusión ligera en "Paralyzed". También tuvimos la ocasión de escuchar un solo del instrumento de Larsson que precedió a esa oda del AOR ochentero que es "Can't Be That Bad"... Vamos, que me dicen que la canción es interpretada por Robert Tepper o Stan Bush y me lo creo de todas, todas.

Uno de los momentos más cómicos tuvo lugar con "Golden Swansdown" donde las Annas pusieron una capa dorada a Björn. Divina, hortera, sencillamente perfecta. La pega fue que puntualmente volvieron los problemas con el micro impidiendo disfrutar como es debido de la canción. Poco a poco nos acercamos al final de un generoso set de diecisiete temas (generoso para los tiempos que corren) con "Taurus" o "Satellite". La banda anunció que llegaba el momento del último tema, la excesivamente larga "The Last Of The Independent Romantics".

Todos sabemos cómo funciona esto, por lo que THE NIGHT FLIGHT ORCHESTRA volvió a salir al escenario para regalarnos "Stiletto", "Midnight Flyer" y "West Ruth Ave". Un buen trío de ases para rematar un concierto donde la banda rodó a un nivel excelente, en especial Björn, que lejos de forzar la voz como en otras ocasiones, tiraba de falsete para las notas más exigentes, complementando perfectamente su voz con la de las Annas.

Acaban de irse pero ya tengo ganas de que regresen.

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Promotora: Madness Live!

Crónica: Txema Sáez

Fotos: Laura Ruiz