Crítica de FERAL - Flesh For Funerals Eternal

La obra "Flesh For Funerals Eternal" nace en Skelleftea, muy al norte de Suecia (muy al norte del mundo). Allí un grupo de amigos decidió montar hace ya más de quince años un grupo sin más intención que satirizar los excesos del Black Metal. Se llamó VALMER & HOOK, hizo una canción llamada "Grim Winternight In The Bloodstained Kingdom Of Frost Under The Unholy Fullmoon Of The Apocalyptic Overlord" y en 2007 decidió cambiar de nombre, reiniciarse como FERAL y ponerse manos a la obra con el viejo sonido Swedish Death Metal, al que han honrado desde entonces, ya con tres excelentes discos en el currículum. El último, "Flesh For Funerals Eternal", el mejor. Y más: una de las piezas más brillantes que ha dado el género en los últimos tiempos.

Y voy a decirlo ya para que no me pese guardármelo durante todo el tiempo que me lleve escribir esta crítica, que no va a ser muy sesuda porque no hay muchas vueltas que darle al asunto: a ver si dejamos de dar más bola de la cuenta a discos, por poner un ejemplo, como el último de BLOODBATH solo por ser vos quien sois y empezamos a ir más allá. Porque hay mucho. Y muy bueno. Y voy a decirlo ya también, aunque no sé las veces que lo he repetido (por vía oral y escrita): la originalidad es estupenda y es uno de los motores más obvios de toda expresión artística. Pero la exaltación hueca de ella como valor en sí mismo no me parece más saludable que el extremo contrario ni hace a nadie más listo que el prójimo. Los que tengáis la suerte de ser todavía jóvenes lo acabaréis entendiendo.

Las grandes cosas de Skallaftea incluyen a FERAL

Skallaftea: muy al norte. De allí salió Stieg Larsson, el fallecido escritor de la saga Millenium, que nunca me atrajo como lectura y cuyas películas me parecieron (lo que vi de ellas) un tostón muy serio. También de allí salió, y quienes tengan mi edad supongo que se acordarán, la playmate Victoria Silvstedt. Y de ahí ha salido FERAL, pero su tradición va directamente a Estocolmo, al legendario sonido de los estudios Sunlight de Tomas Skogsberg, que parieron una variante del Death Metal que se separó lo suficiente de la estadounidense y al hacerlo estableció uno de los sonidos básicos del Metal Extremo. Y, por lo tanto, uno de los sonidos básicos de la vida. Esa es mi regla de tres.

En realidad la raíz del sonido Sunlight está, y es curioso, en Japón y Taiwán, donde en los ochenta se fabricó sin mucho éxito el pedal BOSS HM-S, que la marca no consiguió colar a los fiesteros del Hair Metal y que enfilaba el camino del olvido cuando Leif Cuzner, Uffe Cederlund, Alex Hellid y compañía, con Skogsberg y mucho material barato, parieron con él el inconfundible sonido de guitarra-serrucho que entre NIHILIST y el "Left Hand Path" de ENTOMBED pusieron rumbo a la historia. Con la ayuda y seguimiento de muchos otros, claro.

No es que cobre por palabra ni me estoy enfrascando en divagaciones nostálgicas, ese peligro está bajo control cuando, y ahora es el caso, escribo por la mañana y sin una cerveza cerca. Es, simplemente, que no quería enredarme demasiado con lo obvio ni dedicar demasiado tiempo a que si la falta de originalidad ñiñiñiñi y para eso ya tengo los clasicos ñañañaña. "Flesh For Funerals Eternal" es un disco de Swedish Death Metal fanático, ultra clásico y excelente. Apabullante. No hay nada de malo, y de hecho es una magnífica noticia, en que haya grupos que se mantengan muy fieles a los sonidos tradicionales. Sobre todo cuando lo que falta de novedad sobra en cuanto a pegada, energía, frescura y talento compositivo. Si alguna vez gozaste con "Like An Everflowing Stream" y ahora no puedes disfrutar ni un poquito con un disco como este, el problema es tuyo, no de FERAL. Y, personalmente, te compadezco.

"Flesh For Funerals Eternal" apela al lado más tradicional del Death Metal sueco

Así que, sí: esto es ENTOMBED (más o menos época "Clandestine"), UNLEASHED, GRAVE, CARNAGE, INTERMENT y, ya sabéis, un muestrario de aquello que han mantenido vivo después tantos otros: NOMINON, ENTRAILS, FACEBREAKER (algunos estribillos me recuerdan a ellos) y, por suerte, muchos más. Este disco acabó en mi lista de los diez mejores de 2018 y poco más puedo añadir: tiene una gran portada del inconfundible Costin Chioreanu, un sonido tremendo y un estilo que rebosa guitarras a la sueca, ritmos d-beat de batería, grooves apabullantes, melodías subterráneas, líneas vocales amenazadoras, estribillos del mundo animal... Todo está hecho con dosis exageradas de cariño, mimo y energía. Las composiciones tienen la suficiente enjundia aunque son directas e hiperactivas y el disco es una invitación constante al headbanging, 41 minutos en los que la frecuencia cardiaca se mantiene siempre alta. Insisto: no puedo decirlo más claro y no tiene mucho sentido repetirlo muchas veces más.

La cosa empieza a lo grande con "Vaults Of Undead Horror" y termina rozando el Crust con la frenética "Bled Dry", que cierra tras los ritmos mastodónticos y el aroma a terror de serie B de "Buried". El filo Thrash de "Dormant Disease" y "Stygian Void", la precisión de "Horrendous Sight" y la pureza impenetrable de "Gathering Their Bones" y "Of Gods No Longer Invoked" forman un núcleo de canciones a la altura, y de verdad que no exagero, de lo mejor que ha dado el Swedish Death Metal en los últimos años. Si te gusta el género, si sencillamente te gusta el Death Metal, te tiene que gustar mucho "Flesh For Funerals Eterna". Y si no, vuelvo a decirlo: la culpa es tuya, no de FERAL.

Discográfica: Trascending Obscurity Records