Los canadienses añaden una muesca más a una hoja sin filo y aparentemente oxidada
Tan solo dos años después de que lanzaran su anterior LP, “Impact Is Imminent”, los canadienses ANVIL se presentan de nuevo con “One And Only”. Un trabajo que, según ellos, se ha adaptado a los tiempos que corren y con el que insisten en desmarcarse del sonido noventero de corte Thrash Speed y las letras sexuales que les definieron tiempo atrás.
Seamos sinceros; si bien ANVIL nunca fue una banda de las que llamaríamos puntera, supo colar algunos éxitos en las listas, sirviendo de influencia para otros músicos de su generación; pero su carrera no logró posicionarse en la pista adecuada y lentamente cogió rumbo al olvido hasta tocar fondo. Sobre todo esto se han escrito libros de tinta desde que se proyectó el famoso documental sobre sus vidas allá por el 2008. Un metraje que les sirvió como bote salvavidas y al que se aferraron con firmeza para volver a la carrera.
Desde ese momento han cogido impulso y con él, la rutina de sacar álbumes cada pocos años, manteniéndose con disimulo a flote para salvar el abismo y es que, pese a todo pronóstico, ellos insisten y persisten en seguir dando holgura a su dilatada discografía.
ANVIL cocina un álbum batallero: simple, correcto y vacío de sorpresas
En esta ocasión tenemos entre manos un LP compuesto por doce cortes y una duración aproximada de 45 minutos. Doce temas producidos por Martin ‘Mattes’ Pfeiffer (U.D.O.) y Jörg Uken en su estudio Soundlodge y entre los que a duras penas podemos rascar algo de interés.
No me gusta criticar con dureza, pues entiendo que tras un proyecto así hay mucho, mucho trabajo. Pero lo primero que vamos a ver nada más girar el álbum es una colección de riffs simplones que machacan cadencias manidas y unas líneas vocales escuetas que en ocasiones llegan a sonar hasta cortas de rango.
Sí, está claro que no se trata de una banda de adolescentes grabando en el garaje de casa. Son músicos profesionales con medios suficientes. Así que nos aferraremos a un sonido depurado, donde las guitarras suenan potentes y afiladas y la batería de Rob redonda y contundente cortando la mezcla con presencia. Sin lugar a duda la producción es coherente y la masterización a la altura de lo esperado.
"One And Only" despega machacando ritmos manidos y escasos de creatividad
El álbum arranca con “One And Only”, dando nombre a este trabajo y por desgracia, apenas necesitaremos unos segundos para darnos cuenta de lo que tenemos entre manos. Un tema sin garra ni chispa, de ritmo repetitivo y aburrido donde todos los instrumentos suenan aislados sin llegar a compenetrarse entre ellos.
Me hubiera encantado que el fatídico arranque quedase en anécdota, pero la cosa no mejora con “Feed Your Fantasy”. Aquí la banda imprime algo más de ritmo sin llegar a volverse locos, pero las voces dobladas enturbian un tema al que sumamos una letra repetitiva y vacía que solo se salva gracias a los fraseos de Steve 'Lips' Kudlow a modo de paréntesis.
“Fight For Your Rights” despega con un riff que, pese a oler un poco al “Stone Cold Crazy” de QUEEN, despierta algo de interés en la escucha gracias a la sinergia electrizante entre guitarras y batería. La progresión de este tema, con sus cambios de tonalidad y el intercalado de instrumentos hacen que por primera vez podamos disfrutar de casi tres minutos sin “peros”.
“Heartbroken”, concebido como medio tiempo para corear al ritmo de galeras se queda sin fuerza en los primeros acordes. La letra apenas atina a rellenar los huecos que dejan los instrumentos y el tempo, excesivamente lento, desespera hasta alcanzar un estribillo agónico.
“Gold And Diamonds” gracias a su arranque prometedor y un buen groove se suma a “Dead Man Shoes” con su ritmo acelerado y riff pegadizo en los que posiblemente sean los temas más prometedores de lo que llevamos de escucha. La batería de Robb Reiner sonando como timbales de guerra y unos arreglos de guitarra resultones hacen la función de ariete, garantizando la escucha un rato más.
“Truth Is Dying” resucita al mejor Blackmore con un riff que evoca de forma inequívoca el “Man Of The Silver Mountain” de RAINBOW. Siendo esto lo más destacado, los canadienses progresan sin chispa en un tema que poco o nada llega a decir y del que únicamente salvaría unos coros pintones que sustentan algunas partes de la pista.
“Rocking The World”, con una letra minimalista y evidente, muestra un tema manido y repetitivo con ínfulas de himno de masas. Sobre todo, nada nuevo en el ideario metalero.
“Run Away” se cuela como un soplo de brisa fresca en una mañana estival. El cambio de dinámicas y un groove atractivo hacen de este, un corte interesante y reproducible. De nuevo los fraseos vocales suenan algo impostados, pero el acompañamiento es impecable y el tema disfrutón.
La recta final concentra lo mejor de "One And Only", permitiendo quitarnos el sabor amargo de los primeros temas
Encaramos la recta final con “World Of Fools” otro medio tiempo de ritmo pesado donde, por fin, sentimos que la parte instrumental acompaña de forma coherente a la vocal. El tema avanza de forma directa gracias a las voces corales hasta abrir un claro donde colar un solo, algo simple y escueto, pero correcto.
“Condemned Liberty” con su místico arranque da paso a una sección rítmica pesada, de bajo potente y guitarra lacerante marcando un groove más que decente con el que sacudir las canas. Me hubiera gustado algún giro de melodía que salpimentase el tema, pero me conformo con haber llegado al fin de la pista de forma satisfactoria.
Con “Blind Rage” los canadienses cierran este trabajo de forma más que decente. El arranque es prometedor. Tirón de palanca, armónicos por doquier y a zurrarle bien al riff mientras la batería mete caña al tema. De nuevo la sección vocal, abusando de los coros, desmerece un poco la canción, pero me atrevo a decir que han sabido guardar lo mejor para el final.
Si has llegado hasta aquí, pocas sorpresas te depararán las conclusiones finales. Si bien podemos decir que han logrado el objetivo principal de desligarse del sonido noventero, lo han hecho a costa de traer al mundo un álbum prescindible, repleto de temas predecibles y poco apetecibles. No diremos que es un absoluto desastre, pues en el sonido se aprecia una ejecución impecable y unos niveles de producción profesionales, pero al oyente poco o nada le aportaran tras una o varias escuchas.
Es una pena, pues no es necesario regresar a los inicios de su carrera para encontrar algo de buena música. Basta con escuchar el trabajo anterior para rascar algunas cosas interesantes, aunque, parece que en esta ocasión el objetivo último era el de producir para justificar seguir en la carretera.
Listado de canciones de "One And Only"
- One and Only
- Feed Your Fantasy
- Fight for Your Rights
- Heartbroken
- Gold and Diamonds
- Dead Man Shoes
- Truth Is Dying
- Rocking the World
- Run Away
- World of Fools
- Condemned Liberty
- Blind Rage
Discográfica: AFM Records
Más información sobre ANVIL y "One And Only" en su página de Facebook.