MEGADETH - Th1rt3en

Dave Mustaine no da síntomas de desaliento, trece discos en 26 años dan fe de ello. Su trabajo y tenacidad son a prueba de bombas, pero otra cosa es su creatividad cuando se sienta a escribir. Mermado por la constante necesidad de sacar y sacar material al mercado, MEGADETH está pariendo discos que no dejan demasiado poso en el recuerdo, si bien este "Th1rt3en" aguanta bien.

"Th1rt3en" se sostiene sobre buenas canciones y pequeñas gotas de genialidad, pero al igual que todos los trabajos de la última década (y si me apuráis, media de los 90) no pasa de ahí. No hay algo memorable que te exija pincharlo cada cierto tiempo, pero da de sí lo suficiente para que los acérrimos no abandonen su causa y se siga hablando del grupo, se cocinen grandes giras por todo el globo y se den conciertos de alto nivel.

Es así como se ganan la vida estos músicos, material bien hecho pero que deja un poco indiferente. Harto difícil es que nos hubieran sorprendido cuando han pasado más de dos décadas de sus orígenes. Lo más positivo que tiene el disco es el resultado global, no habiendo ningún tema que realmente estorbe, todos con la marca de la casa: voz arrastrada, punteos vertiginosos en la vena tradicional de MEGADETH y riffs por un tubo, aunque no demasiado originales, en ocasiones más rápidos y otras más pausados.

Los dos primeros cortes "Sudden Death" y "Public Enemy No. 1" condensan lo mejor de "Th1rt3en". Son pegadizos y están por encima de la media, con algunos momentos brillantes. El quinto tema "Guns, Drugs And Money" es otro pequeño repunte, aunque posiblemente me haya resultado más gracioso por algunas palabras en castellano metidas aquí y allá, y por tratar el tema del narcotráfico en México, con esos mariachis sonando de fondo en los últimos segundos de la canción.

Rescatando la más vieja escuela, tenemos "Never Dead", otra de las mejores canciones del disco, con un riff furioso, contundente y a la cara, que es introducido por un minuto de redobles de caja. Desconozco si se deberá a esta canción, pero el libreto del álbum está plagado de zombis, contando 13 en cada doble página donde aparecen los músicos. Debe ser una obsesión compulsiva... como curiosidad, he podido saber que tres temas llevan compuestos desde 1991 ("New World Order", "Black Swan" y "Millenium Of The Blind") y alguno fue incluido ya en una edición especial de "Youthanasia". Supongo que se habrán metido (sin desentonar, eso sí) para que este álbum tuviera también el número 13 como total de pistas, como las trece velas rojas que adornan la portada. Gracioso y enfermizo el abuso de esta cifra en este disco.

Otro pequeño pedacito de gloria sería "Fast Lane", donde el grupo vuelve a imprimir su velocidad, aunque no llegando a su tope. El agudo punteo de "Black Swan" que se repite durante la canción y el tema en general (con una buena melodía vocal en los estribillos) también reverdecen los laureles de MEGADETH. Tampoco está mal el cierre "13", también con un estribillo bastante interesante.

El total de las sumas y restas deja a "Th1rt3en" acercándose a un notable. ¿Esto es suficiente para una leyenda como MEGADETH? No nos engañemos, no se puede pedir tampoco mucho más. Se podrá defender en directo con cuatro ó cinco canciones (aunque la mayoría luego caerán en el olvido) y no supone un bajón en su carrera, es pura continuidad sobre una línea de calidad estandarizada durante los últimos años. El trece ha resultado un número de relativa buena suerte en esta ocasión, a pesar de que Vic Rattlehead de la espalda en la portada y luego aparezca dentro de un ataúd.