SEXPLOSION - Swallow N’ Shut Up??

Hace tres años me llamó la atención el debut en el mercado discográfico de la banda madrileña SEXPLOSION. “Powerful As It’s Name” resultó ser un disco plagado de buenas intenciones que, si bien no llegaba a la cima de lo que pretendía (sonar como un auténtico grupo de Hard Rock americano) sí que evidenciaba cierto buen hacer y algunas ideas interesantes que, con el largo que tengo ahora entre mis manos, este “Swallow N’ Shut Up??”, han llegado a cuajar y a coger la forma necesaria como para que podamos enchufarnos a la música del cuarteto de la capital.

La ópera prima de SEXPLOSION, para mi gusto, evidenciaba un pecado menor del que se ha desquitado este segundo trabajo: tenía el aliento de los norteamericanos TESLA pegado a la nuca casi en todo momento. Pero no solo eso. Entre el tremendo parecido de Guillermo con Jeff Keith, vocalista de los de Sacramento, y cierta linealidad en unas composiciones que además no se vieron respaldadas por el sonido preciso y certero que posee este segundo trabajo, el resultado fue que el debut de SEXPLOSION se presentara como un buen compacto a secas, disfrutable por momentos, pero alejado de ese puntito explosivo y magnético que tanto gusta en el género.

“Swallow N’ Shut Up??”, sin ninguna duda, es un trabajo más completo que su predecesor a todos los niveles. El sonido obtenido redecora mejor las costuras de los temas y eso que SEXPLOSION no explota precisamente un sonido contundente y Heavy, dado que la banda se mueve claramente en ese Sleaze rocanrolero y, a veces, garajero que gana enteros cuanto más crudito se presenta.

Sin dejar de lado el tema del sonido, diría que me ha gustado mucho; quizá lo que más, el tratamiento de las guitarras, con ese riffeado astutamente ensuciado que tan pronto te traslada al desenfado de los añejos HANOI ROCKS, de LA. GUNS o de los primerísimos GUNS N’ ROSES del mítico “Appetite”, como lo hace al paradigma del groove setentero, donde me acuerdo de guitarristas como Keith Richards. También brilla el trabajo solista del citado instrumento, donde hallamos punteos envolventes y ralentizados o, por el contrario, atolondrados y desbocados, donde resalta el efectivo y preciso shredding que Alex y Guillermo llevan a cabo con sus inquietos dedos.

Sobre la base rítmica, me gusta ese aroma a sencillo telón de fondo, sin florituras ni notorios ejercicios en su labor; tan a  la vieja usanza y con una mecánica muy profesada en el género a finales de los 80. Mientras vas leyendo, supongo que te estará dando la sensación de que este es un trabajo muy enfrascado en el viejo Sleaze ochentero, pero no, no es así en su totalidad. Lo bueno del mismo es que posee canciones enraizadas en ese Rock N’ Roll americano de toda la vida, nutrido tanto en los ochenta como en los setenta, pero también piezas que refrescan el sonido de la formación y con perfecta cabida en el año 2014. Hablo de amplias referencias que, aun con sus distintivos, reman en la misma dirección y te hacen acordarte de bandas como KIX, TESLA, HERICANE ALICE, TORA TORA, LOVE/HATE, los GUNS, pero que a su vez te llevan a entender también que SEXPLOSION es una banda que empuja esa propuesta hasta nuestros días, como hacen mismamente los suecos HARDCORE SUPERSTAR; aunque para algunos esto pueda resultar contradictorio. Pero es así es como creo que sucede y así lo hago saber.

Otra cosa que me ha entusiasmado de este compacto es esa combinación de temas cazalleros, rudos y a veces atolondrados con piezas más suaves y elegantes, donde la banda no duda en ponerse el chaqué, haciendo de este modo que luzca su cara más estilosa. “Bitch House”, que abre el compacto, “Justified Aggression”, “The Hunting” y “I’m Not What Your Mama Wants Four You”, entre otras, abanderan ese lado gamberro, desenfadado y polvoriento de SEXPLOSION. Especialmente, el último de los cuatro temas citados, toda una frenética inyección de actitud, tanto musical como letrísticamente hablando, al más puro estilo “Back Off Bitch” de GUNS N’ ROSES.

Al otro lado de la balanza se halla “Just Fight”, un ejercicio de Hard Rock sureño donde los coros femeninos en el estribillo me han sumergido en los buenos tiempos del género, los de los mágicos medios tiempos de CINDERELLA, con ese trasfondo tan ilustrativamente americano. La misma circunstancia se da con “The Chance”, una balada puntillosa y preciosista, de las que se gustan a sí mismas y con la que me he acordado de esas añejas e imperecederas Power Ballads con voz rota al frente, como son un “Dream On” de AEROSMITH o un “Love Song” de TESLA. Mención aparte es el punteo de guitarra de este tema. Dinámico, preciso, soberbio en su ejecución y recubierto de ese feeling que rememora y homenajea a muchos de los grandes del género. Slash, Frank Hannon, Jeff LaBar y tantos y tantos otros, lo cual me lleva a pensar algo que me viene a la mente con frecuencia al escuchar material de este tipo y que se basa en que a veces, y en la parcela musical que sea, lo mismo de siempre pero bien elaborado es de lo mejor con lo que te puedes encontrar.

“Dark Halo” también encuentra su sitio en esta segunda subdivisión de temas, siendo esa pieza que podrían haber compuesto desde DOGS D’AMOUR o los ROLLING a cualquier banda de Hard Rock angelina con ganas de marcarse un unplugged. Una guitarra acústica, la calidez de la voz de Guillermo, un leve acompañamiento coral y algunos elementos percusivos que, a ojo, podrían ser unas congas o djembés, trazan el “Simpathy For The Devil” particular de los madrileños, siendo este formato casi un cuadro costumbrista en el género cuando se usa como recurso, lo cual no quiere decir que sea fácil de plasmar, y es que sin mano diestra y tacto estos temas nunca tendrían razón de ser.

“Swallow N’ Shut Up” no solo es un disco talentoso, trabajado y resuelto con avidez. Es un disco con estrella que demuestra que la banda ha encontrado un momento dulce en lo que concierne a la labor compositiva. Como comentaba antes, el Sleaze es un género al que le hace un gran favor tener como compañeros de viaje carisma y feeling. Y estos, sin duda, han estado al lado de SEXPLOSION en la gestación de esta, su segunda obra de estudio; uno de los mejores discos de Sleaze Rock facturados en España que he podido escuchar hasta la fecha.

Jorge Osoro