"Shadow World", segundo disco de WOLFHEART, sigue siendo el vehículo para la creatividad del inquieto Tuomas Saukkonen
WOLFHEART ha arremetido con mucha fuerza en la escena del Death Metal Melódico, lo que era de esperar sabiendo que la banda surgía de la humeante cabeza del multiinstrumentista y compositor finlandés Tuomas Saukkonen, quien dio carpetazo a sus numerosísimos proyectos para centrarse en esta nueva andadura musical.
"Shadow World" es la segunda obra de unos WOLFHEART ya constituidos como grupo, y cuyo sonido contiene reminiscencias de bandas como AMORPHIS, OMNIUM GATHERUM o INSOMNIUM, pero sin dejar de ser el vehículo para la creatividad del inquieto Saukkonen, pieza importante de la escena de su país. En el corazón del lobo hallaremos las típicas constantes del Death Melódico, sazonado con guitarras acústicas, bellos teclados que compiten con blast beats, estructuras variadas... Todo escuchado mil veces, pero ejecutado con mucha clase y alma.
Los temas de “Shadow World” son, por lo general, extensos, y además presentan una dualidad tanto formal como espiritual. Por ejemplo en "Aeon Of Cold", el delicado piano de la breve introducción desata un vibrante caos hasta llegar a su atractiva melodía. Esa combinación, lucha incluso, entre delicadeza y furia es una constante perenne que nos aturdirá a lo largo del disco.
"Zero Gravity", más bruto y contundente, subraya el poderío rítmico a lo SOILWORK o SCAR SYMMETRY, pero sin perder del todo la esencia melancólica que reside en el interior de WOLFHEART, al igual que se puede percibir en "Storm Centre", tenebroso y en cierta forma épico.
Sin embargo, si hay una canción que merece ser la estrella de la función es, sin ningún género de dudas, la apacible "Last Of All Winters". La mejor de la obra, absolutamente fascinante y embriagadora gracias a su preciosa melodía, que carga con todo el peso musical y emotivo y que conseguirá posarse en tu cabeza y no marchar. Una de las composiciones más sugerentes que os podréis llevar a los oídos este 2015.
Lo que viene después quizá pueda saber a poco, pero "Nemesis" tiene sus momentos, "Abyss" salta de instantes más intimistas y contenidos a otros en los que la banda está ansiosa por demostrar su fuerza, algo que ya sin contemplaciones hace en "Resistance".
Para el final, WOLFHEART reserva el corte más largo (con truco), "Veri". Cantado en finlandés presenta una melodía más simple y no tan memorable como la de "Last Of All Winters", pero destaca por el cambio que introduce el piano en su quinto minuto, lento y con tintes doom, que le sirve para transportarnos al invierno finés.
Frío y pesadumbre, pero también furor que surge del calor interior de WOLFHEART y Saukkonen, forjan un estupendo “Shadow World”. Un álbum que ningún fan del Death Melódico debe saltarse.