DYSNOMIA - Dysnomia

Es agradable comprobar cómo un estilo como el Death Metal Melódico sigue teniendo calado en nuestro país en cuanto a número de bandas, y además que estas formaciones sean de calidad.

La última de ellas es DYSNOMIA, que desde Vigo nos trae su debut homónimo bajo este nombre (anteriormente los gallegos eran conocidos como DARK ETERNITY). Vaya por delante que, si buscamos la novedad, en "Dysnomia" no la vamos a encontrar, como suele ocurrir cuando nos acercamos a una obra adscrita a las directrices más clásicas del género, pero también es un alivio que los fundamentos de los vigueses partan de ahí, sin rastro de modernidades electrónicas ni estribillos coreables.

La música de DYSNOMIA bebe de grupos de la escuela finesa como OMNIUM GATHERUM, INSOMNIUM o MORS PRINCIPIUM EST, perceptible en las guitarras, y de una banda sueca clave como DARK TRANQUILLITY.



Vídeo de "Reach Clarity"

 

Después de la épica intro "Kallisti" llega la primera avanzadilla del grupo, "Let The Spark Ignite", de regusto finés y guitarras que recuerdan a los grupos mencionados antes e incluso a esa gran banda australiana que es BE'LAKOR, y que hacen de escuchar esta canción una experiencia placentera. DYSNOMIA, imparable, sigue ofreciendo más caña con "A Light At The Shore", o el feroz "Checkmate", con efluvios de AT THE GATES o DARK TRANQUILLITY, y es que el cantante Álex de la Sota llega a recordar en ocasiones a Michael Stanne, algo aun más evidente en "Into The Void Of Your Eyes", un tema genial cuando aparece la melodía, especialmente en la segunda ocasión, precedida por unos misteriosos arreglos.


En general las canciones de los vigueses cuentan con muchos cambios, pero quizá su música se nos pueda hacer un poco espesa según progresa la escucha. Seguimos avanzando en ella con "In New Form" y llegamos a las únicas balsas de tranquilidad del disco, que incluyen un cambio estilístico no muy pronunciado. Éstas son "Baptized In Rain", que gracias a los sutiles teclados y a la voz femenina -única incursión en todo el álbum- concibe un ambiente distinto y algo más delicado, y la etérea instrumental "Serenade". “Reach Clarity” y “Behemoth”, que despiden el álbum, son los cortes que más me ha costado asimilar, quizá por la densidad de los anteriores temas -la duración del disco no llega a 40 minutos así que ese no es el motivo- pero con unas cuantas escuchas mejora la sensación.

A DYSNOMIA le puede faltar un punto de cocción para explotar, pero sin duda los fans de los sonidos menos amables y más tradicionales en el Death Melódico están de enhorabuena con su debut, que podría pasar por manufactura de país del norte sin problemas.

 

Enrique Herrero

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