Se presenta ominoso y muy orientado hacia el Death-Doom el nuevo trabajo, tercero en su discografía, de los portugueses HOLOCAUSTO CANIBAL. Con un nombre breve pero suficientemente descriptivo, “Gorefilia” se presentan en su lado más contenido en el tema de apertura “Cortex”. Pero es todo una introducción, lo que se desarrolla después es una oda a la brutalidad, brevedad y adoración al Grind más auténtico como pocos discos se han escuchado en la península desde HAEMORRHAGE.
Y en cualquier caso las comparaciones con la banda de Madrid se terminan ahí porque si bien el mundo de los CARCASS-clones junto a bandas como los suecos GENERAL SURGERY es suficiente válido para desarrollar una escena propia, lo de los portugueses es mucho más ambicioso y sobre todo técnico que todo lo anteriormente mencionado. “Objectofilia Platonica” se lanza al cuello con la velocidad del Grind pero la técnica más densa de unos SINISTER completamente descerebrados, mientras el teclado de peli de terror de “Afogada En Vomito” apenas puede contener la abrasada sónica consiguiente.
Tras otro interludio (en general ayudan mucho a que el disco no suene demasiado asfixiante por intenso) suficientemente oscurantista vuelven a la carga con su Goregrind técnico y abrasivo con cinco cortes que no superan los tres minutos (y algunos ni siquiera el minuto). La voz blacker junto con la gutural se entremezclan como exigen los cánones, eso sí, con el Death Metal siempre presente en densidad musical y sonidos vocales (e incluso un momento de la escuela Devin Townsend en “Supremacia Carnivora”).
Veteranos ya de la escena portuguesa -comenzaron en 1997- Z. Pedro al bajo, Eduardo F. (guitarras) y Diogo P. (batería), durante este “Gorefilia” adoran a CANNIBAL CORPSE y CARCASS por igual y se nota en cada nota y pasaje del álbum (interesante esa concesión al slam en “Prepucio Obliterado”). Pero la cuidada secuenciación temas en donde se pasa de una barrabasada aural para luego brindarnos un corte de once segundos y tras otro interludio cinemático asaltarnos de nuevo con “Perfurada Por Anzois”, merece una clara alabanza desde el primer momento.
Incesante, el disco puede a veces saturar ante tanta brutalidad imparable (aunque los fans del Goregrind deberían de chuparse los dedos), pero si se le da oportunidad puede ser una experiencia arrolladora por intensa. Recomendable
Pedro Blackearth
