Como un Frankenstein emergido de las aguas de la bahía de San Francisco, irrumpe en la escena una nueva formación de Thrash llamada KILL RITUAL, hecha a partir de restos o escisiones de otras bandas de la escena metalera mundial. De los extintos IMAGIKA proceden Steve Rice (guitarra y cabeza pensante) y Wayne Devecchi (batería), de los también difuntos DARK ANGEL, Danyael Williams (bajo) y de los italianos ELDRITCH Roberto Proietti (guitarra). La parte vocal corresponde a Josh Gibson, ex RAWK KANDY. Con toda esta mezcolanza hay que coser muy bien las distintas partes de nuestro engendro para que se mueva y hable correctamente… y he de decir que el encargado de hacerlo no ha conseguido del todo ese objetivo con este “The Serpentine Ritual”, si bien tenía una ardua tarea sobre su mesa de operaciones.
La verdad es que me pongo en la piel del cirujano y veo complicado hacer cuadrar la voz de Josh Gibson (más aún escuchando su grupo de procedencia, una especie de Hard Rock modernete que tanto ha brotado en Estados Unidos durante la última década) con la maquinaria Thrash del resto de la banda. Hay temas, los más melódicos, en los que si se consiguen resultados aceptables y en ocasiones de cierta brillantez, como por ejemplo “Time To Kill”, pero en otros la voz adolece de falta de fuerza si se la compara con lo que suena detrás de ella, ejemplo claro es “Old School Thrasher”, que para más inri ha sido elegido como single y videoclip promocional del disco, o algunas partes de “Prisioner Of The Flash”, donde curiosamente se alternan tramos realmente flojos de voz con otros mucho más acordes a lo que en principio podríamos esperar.
Dejando de lado éste aspecto, que no deja de ser una apreciación personal, el resto de engranajes están bien engrasados y nada chirría. Un riff poderoso comanda la mayor parte de los temas, apoyado en la sólida base rítmica Debecchi-Williams, y acertados arreglos de guitarra trufan con buen tino aquí y allá cada canción, obteniendo a veces notables resultados. Además de la mencionada “Time To Kill” son particularmente destacables el tema que da título al disco “The Serpentine Ritual”, “Ambush”, en la que Gibson baja el tono consiguiendo algo más de empaque, el genial inicio de “The Day The World Dies” y el sabor añejo que nos deja “My Neighborhood”, con más carácter de Heavy clásico que de Thrash. El resto de temas no pasan de ser correctos, y en algunos casos ya citados, incluso pobres.
Tras acabar de escuchar “The Serpentine Offering” la sensación que queda es de cierta decepción. Un disco que podría haber sido notable se queda a las puertas de todo por poco. Una voz más acorde, algunos temas más que llamasen la atención… y estaríamos ante un debut remarcable, una pena. La verdad es que, si me permiten la salida de tiesto y sacando la vena patriótica a pasear, ni si quiera tenemos que recurrir al buque insignia del Thrash patrio, ya saben de quien hablo, para poner sobre la mesa alguna carta que supere ésta apuesta de KILL RITUAL.
R. Caspárez
