Leyendas Del Rock 2016 - Conciertos de AVANTASIA, MAYHEM, DIRKSCHNEIDER, CHILDREN OF BODOM, DARK TRANQUILLITY, SKINDRED, GRAVE DIGGER, ELUVEITIE, ANAAL NATHRAKH, BARÓN ROJO, LEIZE, CENTINELA, BELLA BESTIA, AVULSED y SAUROM
GRAVE DIGGER
El viernes empezaba de manera inexplicable para el que esto firma con la actuación de los teutones GRAVE DIGGER, ¿en serio? Una banda de esta trayectoria tocando a las 16:30 de la tarde y con sólo cincuenta minutos… Algo no me cuadra, pero así son las cosas. El caso es que lamentablemente y debido a las aglomeraciones que se formaron en la entrada, debido a que las puertas se abrieron con muy poco antelación y a que las colas avanzaban despacio por los exhaustivos cacheos, que ya se sabe, puedes meter una granada y una pistola, pero como entres con algo de bebida que no sea agua…
Sea como fuere y para desgracia de un servidor, llegué con el bolo empezado, cuando estaban comenzando los primeros acordes de “Ballad Of A Hangman” (más tarde descubrí que me había perdido dos temas) y ¿Qué puedo decir de GRAVE DIGGER a estas alturas que no sepa nadie ya? Muy sencillo, son una bandaza en directo, los de Chris Bottendhal se mantienen en un gran estado de forma y su líder sigue siendo igual de enérgico y de comunicativo con el público, que no era especialmente numeroso y que iba llegando con cuentagotas pero que se mostró muy compenetrado con la banda.
En el apartado de novedades, GRAVE DIGGER estrenaban teclista, Marcus Kniep, quien iba vestido como la parca y que sinceramente tenía que estar pasando un calor de cojones. Pese a que los germanos tienen en su haber un buen puñado de discos de estudio, en un festival saben lo que la gente quiere escuchar y disfrutar y así en el escaso tiempo que tenían, sonaron unos cuantos clásicos, como pudieron ser “Excalibur” o “Highland Farewell” o las más recientes de su última obra, “Season of the Witch” y la pegadiza “Tattooed Rider”.
Para el final y como no podía ser de otra manera, llegó el turno de la eternamente coreada “Rebellion”, que la gente disfrutó muchísimo, en especial aquellos que nunca habían visto a GRAVE DIGGER en vivo y la mítica “Heavy Metal Breakdown”, el himno que toda banda del palo debe tener.
Dejaron con ganas de más, quizás en el futuro podamos verlos más tiempo en un festival o quién sabe, en una gira por sala, que llevan sin venir de esa guisa desde 2011 si no me equivoco.
Txema Sáez
CENTINELA
Un concierto de CENTINELA es una apuesta segura. El grupo de Cano siempre resuelve sus actuaciones de manera satisfactoria. Ver una fisura en su sonido es casi tan complicado como ver a un cura en un concierto de ROTTING CHRIST. Y con este concierto me han convencido una vez más de que vuelva a verles la próxima vez. Porque sonaron como un auténtico cañón. Una vez más. Como no podría ser de otra manera.
Con cada actuación los manchegos se van creciendo. La base rítmica de Miguel Moreno y José Simarro suena aplastante. Las guitarras de Fernando Moya construyen un impresionante muro melódico. Y, como tampoco me canso de decir, tenemos en José Cano a uno de los mejores cantantes de Heavy Metal de España. A él, particularmente le vimos tanto física como vocalmente en un muy buen estado de forma. Dicho de otra manera: ha perdido peso, y mucho. Y eso repercute muy positivamente en su voz.
Los temas de CENTINELA ganan numerosos enteros en directo. De hecho pudimos disfrutar de las canciones más inspiradas de sus últimos discos: "Más fuertes", "Hueso Y Piel", la metalizada versión del "Abre Fuego" de SANGRE AZUL, "Valor" y "Me Verás". Como es habitual acabaron con el que para mí y muchos de sus seguidores es su tema insignia: el inconmensurable "Como Un Huracán".
CENTINELA abandonaban el escenario "Mark Reale" visiblemente emocionados con una más que nutrida audiencia aplaudiendo enfervorecida.
Brave Sir Robin
DARK TRANQUILLITY
Con una hebilla de RUSH sujetando el pantalón del siempre comunicativo Mikael Stanne (absoluto protagonista de toda la actuación) DARK TRANQUILLITY hacía presencia a plena luz ante el público de Leyendas Del Rock. Todos los miembros de la banda actuaban vistiendo de riguroso negro, algo a lo que hizo referencia Stanne, mientras comentaba el calor que reinaba en el escenario y las obligaciones estéticas para una banda como la suya.
Los suecos fueron otros de los penalizados por el sonido en sus primeros temas, aunque igualmente para la banda era “un precioso día para el Death Metal”. Entre las canciones ejecutadas pudimos disfrutar de “Wonders At Your Feet” y “Lesser Faith”, donde ya pudieron reflotar su tradicional sonido envolvente.
“Soportamos el calor como podemos, tenemos cerveza fría aquí arriba”, decían los suecos mientras desde abajo disfrutábamos de piezas como “Terminus (Where Death Is Most Alive)”, “Final Resistance” o “Misery´s Crown”. Los rayos de sol no pararon a la banda en ningún momento, y el público parecía más sofocado por ver ese torbellino (muy especialmente Stanne) sobre el escenario que por la propia situación ambiental sufrida a esas horas en Villena.
Como digo, no se dejaron nada dentro a nivel físico, ni si quiera se quedaron sus secretos, al menos los confesables… DARK TRANQUILLITY anunció que tiene listo su próximo disco: “lo terminamos ayer y sale en noviembre”. El público agradeció tal revelación y se desató con una ráfaga de aplausos.
Como nota más emotiva del show, pudimos ver como al final del concierto una chica mostraba una nota escrita a Mikael, quien, sorprendido, bajó a saludar y permaneció abrazándola durante casi un minuto. No tengo la más remota idea de qué trataba aquello, pero aún ajeno a la situación como el resto del público, fue realmente bello observar la absoluta emoción y el sincero agradecimiento sobre el rostro del vocalista hacia esa desconocida.
Carlos Herrero
SKINDRED
Menudo monstruo de los escenarios es Benji Webbe. El frontman es el auténtico corazón y gran valor de SKINDRED, y lo es por su facilidad pasmosa para ganarse la simpatía del público. Cualquiera que haya visto en directo a los británicos tiene que admitir, que más allá de filias y fobias musicales, sus actuaciones son una fiesta.
Y lo son en gran parte por el poderío arrollador de Benji, que no para de moverse, bromear, hacer guiños a míticas bandas de Metal y contagiar a la audiencia con su arrolladora energía. Obviamente no podría hacerlo sin el apoyo de una gran banda detrás, en la que destacan las rojas barbas del guitarrista Mikey Demus, pero el cantante es sin duda el centro de atención. Ya sea con canciones como "Under Attack", "Rat Race", sus reuniones "con el presidente de España", su combinación de Reggae y Metal es alegría y diversión. Así lo demostró mandándonos a tomar por saco, después de "Doom Riff" a los fotógrafos de prensa que salíamos del foso: "ahora que se van los cabrones de los medios podemos empezar la fiesta".
Haciendo cantar y pegar botes a todo el mundo con "Sound The Siren", "Pressure", los recuerdos al "Sad But True" de METALLICA y "Warpigs" de BLACK SABBATH, "música malvada y satánica" era lo que quería el público del Leyendas según SKINDRED, de ahí que su DJ también aprovechara para deleitar nuestros canales auditivos.
Pues sí, todo esto y mucho más es SKINDRED y me consta que muchos de los que asistían por primera vez a uno de sus conciertos quedaron (gratamente) sorprendidos. Para el final sonaron temazos como "Kill The Power", "Nobody" y el inevitable "Warning". Este último corte ya la locura definitiva de la banda inglesa. Benji invitó a los presentes, como de costumbre y con mucho éxito, a quitarse la camiseta y agitarla en lo alto durante la canción, creando un paisaje de colores, movimiento y juerga. Como siempre, SKINDRED vino para que el público se lo pasara bien, y así fue.
Enrique Herrero
LEIZE
Memorable. Si no fue el mejor concierto de una banda española del festival, se quedó cerca. A juzgar por las caras de felicidad, el entusiasmo y los aplausos de la multitud que se congregó en el escenario secundario, no soy el único que piensa así.
Félix Lasa y los suyos salieron arrollando desde el primer tema "Solo Para Ti", al que siguieron casi sin pausa "Futuro Para Mí", "Revolución" y "Hundiéndome En La Noche". "Vamos a ir deprisa que aquí los minutos son carísimos", bromeó el cantante y guitarrista haciendo referencia a los escasos 50 minutos cronometrados con los que contaban para su actuación.
Tras "Sospechoso" llegó la siempre emotiva "A tu lado" en la que aproveché para mirar hacia atrás y sorprenderme de lo abarrotado que estaba el recinto del escenario Mark Reale. Apostaría a que LEIZE ha sido una de las bandas clásicas nacionales que más gente ha congregado dentro de la carpa de los conciertos "secundarios".
En la recta final se encadenaron "Buscando Mirando", "Devorando Las Calles" y "Muros", coreadas todas y cada una por un respetable que iba dejándose las gargantas. Entre aplausos y peticiones de un bis que no llegó -el respeto a los horarios es casi británico- LEIZE se despidieron del Leyendas como auténticos triunfadares. Ninguno de los asistentes pudo negar que la suya fue una actuación potente, divertida, emocionante y que encima se hizo corta.
Brave Sir Robin
DIRKSCHNEIDER
¿Alguien en la sala que haya ido a ver en alguna ocasión al señor Dirkschneider o, lo que es lo mismo, Udo, y que haya salido defraudado? No, ¿verdad? Y es que dudo que eso, hasta la fecha, sea posible. El viejo vocalista alemán le ha colocado su apellido a su banda con motivo de la gira que lleva realizando este último año en la que solo interpreta clásicos de ACCEPT que en su día el citado músico teutón registró con sus excompañeros, lo cual ha generado interés por la posibilidad de escuchar algunos temas rescatados del baúl de los recuerdos y difíciles de presenciar tanto en los bolos de ACCEPT como en los del propio Udo en solitario. Inmejorable oportunidad para cualquier fan del Heavy Metal que se precie.
La banda encendió motores con “Starlight”, lo cual provocó los primeros vítores de las miles de personas allí congregadas. El sonido era nítido y ajustado, pero levemente pobre de volumen y falto de garra y potencia, lo cual se suplió con “Midnight Mover”, “Breaker” y “London Leatherboys”, las siguientes entregas de la banda. El vocalista sexagenario, como viene siendo habitual, demostró de primeras ser ese gran profesional que siempre ha sido sobre el escenario, mostrándose agradecido en numerosas ocasiones con la audiencia.
”Princess Of The Dawn”, la metalizada y coreable “Restless And Wild” y “Son Of A Bitch” fueron de las más celebradas, pusieron el foso patas arriba e hicieron que se elevaran numerosos puños en el aire. Aún se me pone la piel de gallina al rememorar ese instante en el que muchos de los que estábamos apelotonados frente al escenario nos dejamos la garganta vociferando aquello de “son of a bitch, kiss my ass”. Además, pudimos comprobar el buen acierto que ha sido por parte de Udo la inclusión de su hijo Sven a la batería, puesto que el chaval es joven y tiene pegada de sobra para compartir tablas con su experimentado señor padre.
“Screaming For A Love-Bite” y ese himno por excelencia de ACCEPT llamado “Metal Heart” fueron los siguientes temas en hacer acto de presencia, con la banda mostrándose incombustible y el vocalista de botas militares y atuendos de camuflaje entregándose al máximo. “Fast As A Shark”, en la que todos coreamos la intro antes del clásico berrido del señor Dirkschneider que nos llevó a la batalla, y ese tema de tintes políticos y tan efectivo que es y siempre será “Balls To The Wall”, pusieron el broche de oro a una gran actuación que, eso sí, se me antojó corta.
Muchos dirán que les faltaron temas, yo el primero, pero a pesar de lo voluminosa que es la discografía de ACCEPT y de que con una hora más de show me seguirían faltando himnos, poco se le puede reprochar a Udo, que se acopló perfectamente al tiempo de actuación que le otorgó el festival. Por pedir, yo hubiera alcanzado el clímax con temas como “Head Over Heals”, “T.V. War”, “Losers And Winners” o “Flash Rockin’ Man” entre muchos otros, pero, como digo, esto es un festival y ni un solo reproche merece la actuación de la formación alemana. Infalibles.
Jorge Osoro
ELUVEITIE
La verdad es que los suizos deben de haber caído en gracia al organizado del Leyendas del Rock, porque es la tercera vez que ELUVEITIE actúa en el festival desde que debutaron en él, el pasado año 2012 cuando se celebró por segunda vez en el patio de un colegio de Beniel. La formación liderada por Chrigel Glanzmann es mi banda predilecta de este género, creo que saben combinar perfectamente el folk metal, llegando a un equilibrio casi perfecto en estos dos estilos.
Este año además, ELUVEITIE actuaría por partida doble y es que además del bolo eléctrico, contarían con una actuación acústica en la plaza del pueblo que al parecer fue un gran éxito, un servidor prefirió recuperar fuerzas pues la jornada del viernes estaba cargadita.
Ahora bien, recientemente la banda sufrió una pérdida masiva de miembros y aunque los nuevos - Michalina Malisz, Jonas Wolf y Alain Ackermann – parecen bien acoplados, se echa muy en falta una sustituta capaz de hacernos olvidar el talento y la voz de Anna Murphy. Una pena que en Villena no pudiéramos disfrutar de Liv Kristine que sí que acompañó a ELUVEITIE en otras fechas de la gira veraniega de festivales.
Por ende, los setenta minutos que estuvieron sobre el escenario se me hicieron pesadísimos, tampoco comulgue demasiado con el setlist exhibido, que aunque sonó bien y con contundencia (tuvieron un gran técnico de sonido a su servicio), el exceso de temas de sus últimos discos y la ausencia del contrapunto que solía ofrecer Anna Murphy provocaron que con diferencia esta fuera mi peor vez con ELUVEITIE de las muchas que los he visto y es que me parecieron una banda más del estilo – que ya son muchas – sin nada que la haga despuntar sobre otras.
Pero ojo, esto es mi opinión personal, la banda estuvo a un gran nivel y la asistencia a su concierto fue monumental, formada esencialmente por gente joven, para mi consuelo y hablando con asistentes de mi misma generación, la sensación había sido similar. En lo referente algunos temas, fue un gusto escuchar algunas composiciones antiguas como “Tegernakô” de su álbum “Spirit” o “Inis Mona” de “Slania”, después fundamentalmente hubo temas de “Originis” como “King” o “Sucellos” (que me encantó, las cosas como son) y de “Helvetios”: “Havoc”, “Meet The Enemy” o “The Uprising”.
Txema Sáez
CHILDREN OF BODOM
Los fineses son un icono absoluto a nivel mundial dentro de la escena del Metal. El público español no fue ajeno a su eclosión y posterior ascenso hacia el estrellato y, por qué no decirlo, llegar a ser un grupo de moda. Laiho, Warman y compañía han ocupado páginas y páginas en la prensa (de la escena, entiéndase) desde entonces pero los más críticos (incluso entre sus fans) siempre tacharon a la banda de ser realmente floja en directo.
Muchos años habían pasado desde la última vez que había visto a CHILDREN OF BODOM. Desde aquellos tiempos yo ya formaba parte de la gente que censuraba su actitud de niñatos borrachos cada vez que estaban sobre las tablas, algo que repercutía en su mala ejecución. Ese comportamiento por desgracia también se extendía fuera de los escenarios, para qué engañarnos, pero en la noche de Villena estos jóvenes pudieron reflejar más madurez que la mostrada años atrás.
Eso sí, hay cosas que no cambiarán. Janne Warman, con una camiseta que rezaba “Tacos, burritos, enchiladas y nachos”, abandonó el escenario durante un intervalo de una canción donde sus teclas no eran requeridas para volver a aparecer con una bebida en la mano. Los ya conocidos problemas de alcoholismo que sobrevuelan los países nórdicos también revolotean sobre las cabezas de algunos músicos, y en algunos casos hasta se posan sobre las mismas.
Anécdotas al margen, de nuevo CHILDREN OF BODOM también tuvo problemas de sonido. Unos bombos excesivamente pronunciados saturaban las partes más feroces de las canciones, haciendo que los finlandeses no acabaran de encontrar el sonido ideal que siempre han tenido en sus discos. Sus canciones brillaron menos por este motivo, pero su buena disposición compensó esto, aunque solo fuera hasta cierto punto.
Entre otras sonaron “Sixpounder”, “Lake Bodom”, “Angels Don´t Kill”, “Needled 24/7”, “I Worship Chaos” o “Hate Me!”, que fueron algunas de las canciones más vitoreadas de su concierto. La puesta en escena ayudó a la banda, que según avanzaban tema a tema se ganaban al público, gracias a uno de los mejores trabajos a nivel de iluminación (de cara al espectador, que no para los fotógrafos) de todo el Leyendas Del Rock. Buen concierto y desde luego mejor que los ofrecidos en su primera y más exitosa etapa de subida a la cresta de la ola.
Carlos Herrero
AVANTASIA
Promocionada como la banda más grande que jamás ha tocado en los once años que se lleva celebrando el Leyendas Del Rock (y así podía verse su posición predominante en el cartel), llegaba a Villena Avantasia, el proyecto Tobias Sammet que ha terminado por fagocitar en parte su excelente trayectoria con EDGUY.
Sin duda fueron el plato de fuerte de un festival que ha estado muy equilibrado en cuanto a estilos (quizás faltó algo más de Hard Rock) y la cantidad de gente que se agolpó en la explanada principal fue algo monumental. Quién ya haya visto a AVANTASIA en directo sabe que es una experiencia que transciende lo musical, da igual que seas fan de la banda o que re resulten unos completos desconocidos, es muy difícil poner o encontrar alguna traba a lo que se está viendo.
Y es que Tobias Sammet es un tipo muy listo, no sólo va acompañado de grandes vocalistas, es que sus músicos no se quedan cortos: Sascha Paeth, Oliver Hartmann o Felix Bohnke entre otros, han conseguido ser una formación muy compenetrada y eso se nota en la compenetración sobre el escenario. Escenario que fue espectacular, con un castillo en dos niveles y un telón de fondo con la ilustración de Rodney Matthews para la portada de su última obra.
El tema que dio el pistoletazo a su magna actuación fue “Mystery Of A Blood Red Rose”, cantada exclusivamente por Sammet y que ya puso a todo el mundo en su sitio. Este pequeño gran hombre ha mejorado su capacidad vocal una barbaridad en los últimos tiempos y no es para menos dada la compañía que suele llevar. Compañía que empezó a desfilar con “Invoke The Machine” con Ronnie “PRETTY MAIDS” Atkins sobre el escenario y que pertenece también a su último “Ghostlights”, canciones muy disfrutables y coreables para un público entregado estaban siendo las señas de identidad del concierto. La fiesta continuaba con el tema que da nombre a su trabajo más reciente y aquí llegó el momentazo de ver a Michael Kiske demostrando que ahora canta incluso mejor que en la época de los Keepers, el respetable directamente enloqueció la primera vez que soltó uno de sus alaridos.
Y hablando de enloquecer, el concierto de AVANTASIA estaba gustando mucho, se notaba en la gente, pero el primer punto de inflexión llegó cuando Sammet presentó el tema que da nombre a esta banda, “Avantasia” es todo un himno por derecho propio y el hecho de que en esta ocasión no la descartasen (como si hicieron en Sonisphere 2013) me hizo saltar lo que no está escrito.
El setlist fue bastante equilibrado, tocando un poco de todo de su ya nada despreciable en cuanto a cantidad discografía, ¿Qué tendrán los temas de AVANTASIA que cuanto más largos, casi son mejores? En el caso de “The Scarecrow” es muy fácil, se llama Jorn Lande y este vocalista alemán nos heló a todos la sangre en las venas cuando hizo acto de presencia en el escenario.
“The Great Mystery” con Bob Catley o “Promised Land” donde ganarían mucho protagonismo los coristas Herbie Langhans y Amanda Somerville, llegamos hasta “Dying For An Angel” donde aparecería Eric Martin y él ya habríamos visto a todos los cantantes oficiales de este gira. Destaco este hecho porque hubo rumores y casi confirmación de que Bob Catley no estaría en el Leyendas y durante la misma semana del festival, parecía poco probable que Eric Martin estuviera en Alicante.
No voy a detenerme mucho más en narrar la actuación de AVANTASIA, ya hemos hablado del gran sonido, de la comunión con el público y de la calidad de los invitados, pero antes de acabar me gustaría destacar algunos momentos, como fueron esa balada “The Story Ain´t Over” (que algún malnacido irrespetuoso del público que había a mi lado se empeñó en fastidiar) con un Bob Catley pletórico, el medio tiempo “Lost In Space” con Amanda demostrando que puede cantar lo que le echen y por supuesto el medley final “The Sign of the Cross - The Seven Angels” con todo el mundo sobre el escenario reclamando su momento de gloria.
Al terminar, Tobias prometió volver y todos los que estuvimos ahí lo estamos deseando.
Txema Sáez
ANAAL NATHRAKH
El viernes tenía una fecha apuntada con fuego sobre el escenario de Mark Reale. Los ingleses ANAAL NATHRAKH traían su casi inclasificable música por primera vez a España. He tenido la suerte de verlos en directo y sus conciertos suelen ser bastante anárquicos musicalmente hablando.
Destrucción y caos a partes iguales con una marcada melodía a medio ritmo entre Black y Grindcore con algún que otro estribillo con voces limpias y sonidos Industriales. Una mezcla que no atrajo a mucho personal, aunque quien estuvo no se marchó indiferente. Al ser ANAAL NATHRAKH un dueto en los trabajos de estudio, la pareja formada por V.I.T.R.I.O.L (voz) e Irrumator (guitarra) se acompañaron esta vez con varios miembros, entre ellos a destacar el bajista Drunk (FUCKPIG) quien también añadía voces grindcoretas de vez en cuando, dando un toque más poderoso, bruto y atronador.
En los dos primeros temas, la vorágine musical de los británicos produjo una bola que hacía que las distintas melodías no se oyesen con total claridad. Por suerte, esto fue sólo la tónica durante los temas iniciales. Una vez superado este problema, el sonido mejoró y se pudo apreciar un directo mejor con temas como “In the Constellation Of The Black Widow”, “Idol”, “Unleash”, “Of Fire, And Fucking Pigs” o “Between Shit And Piss We Are Born”, uno de sus mejores cortes.
Durante todo el concierto, no faltaron los circle pits y mosh que animan el cotarro. El propio V.I.T.R.I.O.L agradeció en varias ocasionas la presencia de los asistentes, recordado que era su primer concierto por estos lares. Para finalizar “More Of Fire Than Blood” y “Do Not Speak” volviendo a repetir dichos agradecimientos a un público que no dejó de moverse y quedó deseoso de volver a escuchar en directo la ración caótica de los británicos.
Nacho Martín
MAYHEM
Conciertazo de MAYHEM, aunque imagino que no para todos los paladares. La banda noruega de Black Metal interpretó integro su gran clásico, "De Mysteriis Dom Sathanas", su primer larga duración y legendario por ser uno de los discos básicos del género y por toda la historia negra que tiene detrás. El caso es que el grupo logró crear una atmósfera alucinante, eso sí, a costa de actuar prácticamente a oscuras.
Entre muchísimo humo, y bajo pocos focos (a Hellhammer casi ni se le veía) medraban los encapuchados miembros de MAYHEM, con un telón de la portada del álbum al fondo, y liderados por un Attila Csihar con un extraño maquillaje caprino, tras un altar adornado con dos largas velas y un cráneo humano. Muy malrollero, para el que se dejase llevar por toda esa puesta en escena de los black metaleros, una misa negra en la que había que tomar parte por propia voluntad, ya que si no se entraba en el juego propuesto por los noruegos la cosa podía derivar incluso en risas, y es que algunos momentos -puntuales- se prestaron a ello.
Attila tuvo que encender en un par de ocasiones las velas que le apagaba el viento, tratando de ocultar su mechero, pero más allá de eso, y de sus constantes gesticulaciones con las manos, era francamente perturbador, y se traía un jugueteo siniestrísimo con la calavera, a la que acariciaba, a veces con extraños arrumacos y también pasándole por encima un crucifijo invertido, e incluso se frotaba con ella con necrofílica fruición.
Así, poco a poco, MAYHEM fue desgranando las canciones de esa obra maldita titulada "De Mysteriis Dom Sathanas", con algún momento álgido como "Freezing Moon" o el tema final que da título al disco, pero brillando especialmente toda la parafernalia y ese ambiente decadente, ese ritual del que nos hicieron a todos partícipes... si nos dejábamos embaucar.
Attila se desprendió de esa especie de máscara con hocico de cabra grabada con símbolos para el último tramo del concierto -al vocalista le encanta disfrazarse, como ha hecho en varias giras- y toda la negra ceremonia que dirigió se nutrió vilmente de un sonido denso y perfecto, para hacer más terrorífica la experiencia, algo que había que vivir y sentir más que meramente contemplar. Black Metal como debe interpretarse, con maldad y frialdad, y que hubiera ganado más en sala, haciendo todo mucho más opresivo.
Enrique Herrero
BELLA BESTIA
Las fronteras suelen ser líneas muy tenues y frágiles. Tú estás de repente andando tan tranquilo por Salamanca o Badajoz y sin darte cuenta... ¡hop! De repente te has metido en Portugal. Pues lo mismo pasa con la comedia involuntaria: es muy difícil delimitar el momento exacto en que acaba de ser voluntaria. ¿A qué viene todo esto? A que con el concierto de BELLA BESTIA llegué a plantearme si se lo estaban tomando en serio o si Pepe Mari y los suyos habían decidido hacerle de pronto a la competencia a Charly Glamour y sus GIGATRON.
Pasen los maquillajes ridículos. Vale, siempre ha sido seña de identidad del grupo y fueron de los pocos que en su momento reunieron el valor para salir con una estética original, diferente y rompedora. Tomarles en serio ya se complica más si te fijas en el atrezzo de "Bazar Chino Todo A Un Euro". Pero bueno, no seré yo quien critique a un grupo por arriesgar en su puesta en escena y querer tener su propia identidad visual. El Rock And Roll es espectáculo, sí señor.
Lo que me hizo pensar si realmente BELLA BESTIA se toman actualmente a sí mismos en serio fue el registro vocal de su actual cantante. Mientras que Cachorro y Pepe Mari mantienen el nivel con dignidad, el nuevo frontman de la banda desentonó y sonó totalmente fuera de lugar. Porque, vamos a ver, es innegable que el grupo tiene muy grandes temas como "El Gran Mago" o "Rompecuerpos". El problema es que fui incapaz de reconocerlas hasta el estribillo. Y eso en el mejor de los casos.
Mi paciencia se colmó con la preciosa balada "Háblame". El destrozo al que estaban sometiendo su pobre línea vocal me hizo emigrar a pastos más verdes, cuando en realidad debí haberme ido a dormir o a ahogar mis penas en hidromiel...
Brave Sir Robin
BARÓN ROJO
Llega el momento de escribir esta crónica y plasmar la sensación que me dejó el concierto de los hermanos de Castro. Mi principal duda es si dejarme llevar por la pena, la rabia o tomarme los calmantes antes de escribir.
Pena, sí. Vamos a ver. Carlos y Armando de Castro siguen siendo guitarristas de primera categoría. Casi nadie puede negarlo. Y por si fuera poco les acompaña una formación sólida. ¿Cuál es el problema entonces? La voz de Carlos. Nunca ha sido un gran cantante. Ni lo será. Es imposible que mejore con la edad. El resultado es que tenemos a una gran banda, con un gran repertorio, arrastrándose debido a un vocalista que lucha contra lo inevitable. Y esa lucha está más cerca del patetismo que de la épica. El espectáculo del pobre Carlos sufriendo lo indecible en cada tema, con un tono débil y tembloroso, quedándose sin voz en pleno tema solo puede provocar risa cruel o llanto amargo. Y a mí me gusta demasiado BARÓN ROJO como para poder reírme de ellos.
Así que lo que me queda es la rabia. La rabia de ver cómo uno de los mejores discos de la historia del Heavy Metal español, el fantástico Volumen Brutal, era interpretado de manera íntegra y yo era incapaz de disfrutar hasta el último tema (la instrumental "El Barón Vuela Sobre Inglaterra"). Cada vez que sonaba uno de los pasajes o riffs con los que he agitado la cabeza y tocado la guitarra imaginaria millones de veces se encendía una débil pero esperanzada llama de entusiasmo, que era aplastada brutalmente en cuanto llegaba un pasaje vocal.
Más rabia al ver como tras himnos como "Con Botas Sucias", "Tierra de Vándalos" y "Cuerdas de Acero", los de Castro y el resto de músicos subiesen a ejecutar -nunca mejor dicho- "Barón Rojo" sin que prácticamente nadie pidiese un bis antes o después.
"Vaya un exagerado", estará pensando alguno. "No será para tanto", exclamarán otros al leer esta crónica. Pues creedme, estáis leyendo a un devoto fan de BARÓN ROJO que llora ante un espectáculo bochornoso. Un espectáculo indigno de darse con el telón de fondo de una de las bandas más grandes que ha dado este país. El Barón no se lo merece. Pobre Barón. Rompeolas de lo que fue.
Y estas son las crónicas que me salen cuando no me tomo la medicación.
Brave Sir Robin
AVULSED
La formación madrileña comandada por el singular Dave Rotten lleva en torno a veinticinco años en la escena del Death Metal y es, por derecho propio, la banda más internacional del género en nuestro país. Después de ver el abrasivo show que ofreció a las tantas de la noche el viernes en el escenario Mark Reale, resulta más fácil comprender ese amplio recorrido que la banda está haciendo por todo el mundo, dejándose caer hasta en diversos países de Asia y Sudamérica con su incisivo y contundente metal extremo.
El show arrancó sin fisuras con “Stabwound Orgasm”, tema que rotuló el compacto de los madrileños editado a finales de los noventa. Con toda la banda perfectamente alineada sobre el escenario y haciendo headbanging al unísono, incluido Rotten mientras cantaba, la presentación resultó inmejorable, y más teniendo en cuenta que la P.A. del escenario escupía decibelios con saña.
Tras esta, siguieron cayendo piezas como “Breaking Hymes”, “Powdered Flesh” y “Devourer Of The Dead”. Poco a poco, y pasados los minutos de arranque, parecía que se iba congregando más gente en el escenario pequeño de Villena. El propio Rotten, muy comunicativo durante todo el show, dijo que “a ver si iba llegando la gente del bolo de BARÓN ROJO”, y así sucedió, aunque el recinto nunca llegó a estar hasta arriba. En el tramo final del bolo, el quinteto madrileño interpretó piezas como “Nullo (The Pleasure Of Self Mutilation)”, “Sick Sick Sex”, presentada con ayuda del participativo público, y la ya clásica “Exorcismo Vaginal”, que cerró la velada.
AVULSED está en una forma encomiable y su cuidada y precisa puesta en escena, así como la mala leche y el derroche de energía que proyectan, no tiene nada que envidiar a muchas de las bandas norteamericanas o europeas con las que muchos hemos crecido. Por eso están dónde están, ni más ni menos. Solo espero que Rotten, Juancar, Tana, José y Arjan puedan repetir en otra edición del Leyendas del Rock, pero que lo hagan en uno de los escenarios grandes.
Jorge Osoro
SAUROM
Cerrar el tercer día de un festival, tocando casi a las cuatro de la mañana y que todavía haya miles de personas esperando para saltar con tus canciones, es algo de lo que muy pocas bandas aparte de SAUROM pueden presumir. Los andaluces son una apuesta segura de Marcos Rubio – organizador del Leyendas – para la jornada de los viernes y nunca fallan.
Sabedores del papelón que tenían por delante, SAUROM optó por confeccionar un setlist sumamente festivo, formado exclusivamente por canciones alegres, rápidas, divertidas que implicasen al público y esto vaya si lo hizo, pues no paró de bailar, saltar, formar congas improvisadas, el ya famoso círculo juglar.
Narci, líder de la banda y además guitarrista, violinista, gaitero… ha creado una formación con una producción muy ambiciosa, la banda en los últimos tiempos ha incorporado a dos coristas femeninas y uno masculino (que en esta ocasión si se pudieron apreciar, no como en su concierto XX aniversario de Madrid), además de un músico que se encarga de tocar los pitos castellanos y otro la guitarra española. También la animación es un aspecto fundamental de SAUROM y durante sus conciertos no es extraño ver saltimbanquis, malabaristas, zancudos o incluso un dragón chino sobre su escenario.
Debo decir que a esas horas estaba exhausto, pero lo bien que estaba sonando la banda y bueno vocalista y frontman que es Miguel (que además no paró de agradecer que hubiera tanta gente viéndoles) me ayudaron disfrutar de un concierto que se permitió rescatar algunas canciones de la época Lamderth, como “La Posada Del Poney Pisador”. Centrándonos un poco en el set antes de dar por terminada la crónica del viernes, pudimos disfrutar de algunos clásicos como “La Taberna”, “Fiesta”, “Dracum Nocte”, “La Musa Y El Espíritu” o “La Batalla De Los Cueros de Vino” que se fueron intercalando con otras más recientes del tipo “Círculo Juglar”, “El Carnaval del Diablo”, “Cambia El Mundo” o “El Duende En La Ventana”, entre otras.
Sobresaliente para la banda por saber animar así un concierto a tal intempestivas horas de la madrugada.
Txema Sáez
Fotos: Enrique Herrero
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