NERVOSA es un grupo brasileño formado por tres mujeres que tocan Thrash Metal. Es sencillo y es lo que hay. A partir de ahí, claro, se le puede dar vueltas y enredar la madeja tanto como se quiera. Hace un cuarto de siglo que Roadrunner sacó a SEPULTURA de las favelas en lo que fue, aquello sí, una revolución en un mundo todavía demasiado grande. Y las mujeres como parte integral de la escena metálica dejaron de ser un hecho anecdótico hace, por suerte, mucho tiempo. Pero es lo que hay. Lo exótico tiene gancho y el sexto mueve el mundo. Así que seguramente su procedencia y sobre todo el género de sus miembros ayudaron a que hace un par de años y poco después de su formación, la demo de NERVOSA corriera como la pólvora gracias al vídeo -YouTube, otro signo de nuestro tiempo- del tema “Masked Betrayer”. Eso le valió el contrato con Napalm y ahora este primer disco, casi visto y no visto.
Aporto este kit de información básica pero sugiero a cualquiera que vaya a esgrimir un prejuicio, positivo o negativo, que escuche la música y se olvide de lo demás. Porque la música es finalmente lo importante y porque ahí NERVOSA adquiere una legitimidad incontestable. Ya han girado con EXODUS, ARTILLERY, EXUMER o RAVEN. Y me temo que su nombre no va a para de crecer. Porque sí, tienen todo lo demás pero también tienen un espíritu metálico a prueba de cualquier examen. Y hasta aquí llega este asunto porque me niego a pasar de la explicación a la justificación innecesaria.
“Victim Of Yourself” es un disco compacto y de una solidez muscular tremenda, sin los pasos en falso de muchos debuts. Seguramente es más compacto que brillante, pero no falta el suficiente gancho compositivo para rematar una apuesta desbocada por el Thrash más auténtico y violento. Con un toque de escuela americana por cada tres de la alemana, que manda. Y sin olvidar lo que hizo SEPULTURA en los tiempos de “Beneath The Remains”. De EXODUS o NUCLEAR ASSAULT a SODOM y DESTRUCTION, la música de NERVOSA se inclina por igual hacia el Speed más frenético y old school y hacia el Death Metal. La producción es cruda pero poderosa, apabullante. El sonido va directamente contra las costillas, una pulsión constante en formato trío: Prika Amaral deja una colección de riffs felinos y Fernanda Lira le acompaña con un bajo omnipresente, que cubre la ausencia de la segunda guitarra, y con unas líneas vocales apasionantes en su mejor versión. No siempre. Su registro es afilado y venenoso, sin trampa ni cartón. El que espero trucos en NERVOSA, que se olvide. Hay menos que en unos cuantos grupos de retrothrash con mucho más nombre. Esto es Metal, Metal, Metal y más Metal. Thrash con una energía que a veces se desborda y toca a LEGION OF THE DAMNED, DEATH o lo que haría ARCH ENEMY si tratara de hacer un Thrash más purista. No sé si me explico…
Es cierto que no todas las composiciones son extraordinarias pero casi todas tienen momentos extraordinarios. Riffs, cambios de ritmo y sacudidas de una ferocidad que hace retumbar el suelo. Como tiene que ser. Directo a la yugular y capaz de ponerte en pie a hacer headbanging. Como tiene que ser. En ese sentido, este disco es intachable, un hallazgo. Directo y apabullante pero bien rematado como demuestra el hecho de que algunas de las mejores canciones se van por encima de los cinco minutos sin amago de agotamiento: “Twisted Values” o “Nasty Injury” lo demuestran, sobre todo la primera con ese aire bélico del buen Thrash germano. Canciones para hacer headbanging y levantar el puño: Thrash Metal. Y pequeños himnos que realmente te disparan las pulsaciones como “Into Mosh Pit”, “Morbid Courage” o “Envious”. Una sobredosis de energía que mira a terrenos más extremos en “Death”, un compendio de violencia musical elegida no por casualidad para dar contenido al primer vídeo del disco. Y hasta un recuerdo en “Uranio Em Nos” al pánico nuclear y al crossover desfasado y macarra, dos elementos sin los que el desarrollo del Thrash ochenetero sería imposible de entender.
Sí, son chicas y sí, alguna de ellas es ciertamente atractiva. Me niego a pensar que les vamos a exigir más por eso aunque es obvio que supone un gancho para el oyente casual. Pues si eso sirve para que al que pase por allí despistado le apetezca echar un vistazo, mejor que mejor. Es probable que decida quedarse. Porque la imagen va por delante pero la música es lo que importa. Y la de NERVOSA, a juzgar por este tremendo “Victim Of Yourself” con el que debuta, merece la pena. Una dosis de Thrash Metal tremenda, auténtica y rebosante de furia. Sí, como tiene que ser.
Juanma Rubio
