Crítica de "Somos", un disco excepcional de PORCO BRAVO

La declaración de principios de PORCO BRAVO

Pasados seis largos años desde la edición del deslumbrante “La Piara”, los barakaldeses PORCO BRAVO retornan a la primera línea de combate con “Somos”, una honesta declaración de principios que marca, en mi opinión, un punto de inflexión en la sólida trayectoria de la mejor banda de Power Rock de este país. La combinación de la triste pérdida de personas muy queridas e importantes para la banda, operaciones quirúrgicas y paternidades felices llevó al jabalí herido a hibernar a su guarida a la espera de que el momento fuera propicio para que la catarsis se produjera y todo lo vivido y sentido durante ese tiempo fuera hecho canciones que ya nos pertenecen a todos. “Somos” es toda una declaración de autoafirmación musical y un vigoroso puñetazo en la mesa del Rock de este país. Y os lo explico.

“Somos” marca un claro punto de inflexión en la carrera de PORCO BRAVO y es todo un manifiesto de autoafirmación.

Las canciones de "Somos", de la caña a la nostalgia

No se puede empezar más enérgico, motörheadico y rabioso que con “Al Despertar”, tema vitriólico donde los haya en el que las guitarras de Asier y Kapi escupen fuego de metralla mientras las voces de Manu y Podri (RAT-ZINGER) muerden la letra con una ferocidad descarnada. El espectacular videoclip filmado para la ocasión merece más de un visionado y el tema es firme candidato para quedarse en el repertorio de la banda durante muchos años.

Igual de anfetamínico y despendolado es “Condenados”, una historia de pasión reencontrada y de rescoldos que renacen al calor de un amor predestinado que vuela a lomos de la desbocada y demoledora batería de Oskar Montilla y el empuje bombástico del bajo de Mr. Hell.

Tras dos cortes de estilo “clásico” de PORCO BRAVO viene “Últimamente”, uno de los temas más nostálgicos del disco, donde se expresa la añoranza de aquellos añorados tiempos en que la calle marcaba la ley de lealtad entre amigos que lo eran para toda la vida y el mundo era un lugar que conquistar. Los arreglos musicales, minuciosos y sutiles, empujan la fuerza melódica de la canción teniendo en la cúspide las guitarras y la voz aunque sin perder un ápice de energía.

“De Cristal”, que musicalmente arranca como un claro homenaje a los mejores BARRICADA, es un tema cargado de honestidad y lucha por escapar de las debilidades que nos asaltan tras cada esquina. El estribillo es de los que te ponen un nudo en la garganta y se te meten en la cabeza y en el corazón para siempre y la letra es, probablemente, de las mejores del disco. Encaja como un guante la colaboración vocal de Mikel Gorosabel (EH SUKARRA) y la sutil presencia de un acertado órgano Hammond dan un cuerpo melódico impecable a la canción.

“Morir o Matar”, tal vez mi tema favorito de del disco, está trufado de riffs infecciosos y posee una cadencia algo más pausada que permite apreciar mejor la maestría musical de Asier, Kapi, Mr. Hell y Oskar, así como comprobar la versatilidad de la voz de Manu. Los coros desgarrados y el final orquestal, con esa tormenta amenazante en el horizonte, ponen los pelos de punta y marcan uno de los momentos más emotivos del disco.

Aunque si de emotividad y desgarro debemos hablar, eso lo encontramos a caño libre en “No Te Puedes Marchar”, una bellísima canción plena de dolor y de fuerza que nos habla de un fatídico adiós que jamás querríamos haber dicho. Las guitarras dobladas al más puro estilo THIN LIZZY y la voz desgarrada de Asier nos ponen el corazón en un puño y nos demuestran que cuando se habla y se canta desde el corazón siempre se hacen cosas memorables.

Seis años después PORCO BRAVO irrumpe en la escena rockera con un disco excepcional y los colmillos bien afilados

“Quiero Creer” parece la consecución lógica de lo dicho hasta ahora en el disco y marca el punto de inflexión narrativa de un disco que es la “visión del mundo de un hombre apesadumbrado, pero con esperanza”, en palabras de Asier Domínguez, compositor principal de la banda. Todo lo sufrido por el jabalí lo ha hecho más fuerte y rabioso y la canción, forjada a ritmo de frenesí rockero escandinavo, es toda una declaración de principios y una promesa de lucha en memoria de quienes no están ya y de los que acaban de llegar.

“Corazón Negro” remansa el ritmo acelerado del disco y suena fronterizo y desértico, lleno de pesar y abatimiento. Las guitarras, tan protagonistas en este trabajo, tienen en el momento del breve solo un momento de lucimiento melódico que demuestra que PORCO BRAVO es mucho más que una banda de Rock combativo y que cuida como pocos los arreglos y las melodías. Energía desbocada sobre melodías pegadizas llenas de inteligencia y pasión. Así son ellos.

Y el remate de autoafirmación total que es este disco llega de la mano de “¡Somos, Fuimos y Seremos!”, un auténtico himno cuyo videoclip, grabado en el local de ensayo de la banda, es toda una fiesta y un manifiesto de autoestima totalmente justificado.

Si a todo lo dicho le añadimos una producción explosiva y matizada y un diseño gráfico cuidado y lleno de detalles tenemos el disco del año pasado, en mi humilde opinión. El embate furioso del jabalí sónico es algo que cualquier amante del buen Rock debería sentir en sus carnes de manera obligatoria para pasar así a ser parte de la Piara para siempre. ¡Bravo, PORCO BRAVO!

Discográfica: Another Freak Production Records

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