"Digital Race", el mordisco de REDSHARK que no suelta a su presa

Digital Race: Disco de Redshark
Portada de Digital Race

El  primer larga duración de REDSHARK es un disco poderoso de principio a fin

Desde Barcelona aterriza en nuestra redacción "Digital Race", el primer larga duración tras dos EPs editados anteriormente de REDSHARK, un álbum poderoso de principio a fin, bien ideado y mejor ejecutado y cuya calidad podría y debería evaluarse de un modo categórico atendiendo al contenido del trabajo, que claramente está llamado a ser uno de los mas sólidos y mejores trabajos que depare el presente curso 2022.

"Digital Race" se ciñe a los cánones más dogmáticos del clásico US Metal

El primer largo del cuarteto catalán es un disco tremendamente académico, ceñido a los cánones más dogmáticos del clásico US Metal esencialmente. Heavy-Speed-Power en un interesante devaneo entre ese material de la vieja guardia, donde podemos acordarnos de agrupaciones como LIEGE LORD, CHASTAIN, SAVAGE GRACE, HELSTAR, etc., y lo que actualmente viene ofreciendo buena parte de la escena underground actual, especialmente en Europa y Canadá, con bandas de la talla de EVIL INVADERS y RIOT CITY, con las que empasta a la perfección el sonido contemporáneo pero de mirada retro que ofrece la propuesta de REDSHARK. A su vez, se podría decir que este trabajo contiene elementos de la etapa americanizada de JUDAS PRIEST en discos como “Painkiller” o “Ram It Down”, sobre todo en lo que a construcción de riffs se refiere.

A decir verdad, hacía tiempo que no escuchaba un disco de esta índole con un acabado tan fino en todo lo que se pueda analizar musicalmente hablando. "Digital Race" atesora nueve temas de envergadura y ofrece un material escrupulosamente aferrado a las bases del género citado en el párrafo anterior, donde todo raya a gran altura. El trabajo de la base rítmica es resolutivo, mientras que las guitarras rítmicas y solistas ejecutan con tino lo que compete a su parcela. Y qué decir de la sorprendente labor vocal de Pau Correas, moviéndose constantemente en una tesitura asfixiada y con un rasgado de voz que me traslada hasta el buen hacer de voceras como Sean Peck (CAGE, DEATH DEALER...) o Joe Comeau (LIEGE LORD) y ofreciendo un trabajo titánico y abrasivo en los instantes más viscerales como en los más melódicos. Una suma de talentos, en definitiva, cuya proyección es innegable si te gusta el Heavy Metal más épico y vigoroso.


Unos escasos segundos de "The Drill State" me valen para intuir que el trabajo tendrá mucho que rascar. Velocidad, un sonido cuidado y viejas consignas metaleras aprendidas al dedillo.

Esos mismos rasgos aparecen en muchos otros cortes del álbum, donde el denominador común es el acelerador pisado recurrentemente, pero sin dejar de ponerle mimo a cada melodía, a cada estructura, como demuestra "Never Too Late", que a pesar de su ritmo desbocado presenta algunos matices en su estribillo con cierto deje Hard N' Heavy, una corriente separada del US Metal más voraz por meras cuestiones milimétricas. "Digital Race" se apoya en una musicalidad más nebulosa, oscura y densa, siendo una canción que sin problema, y dejando de lado las diferencias estilísticas vocales, podría haber rubricado MERCYFUL FATE por ese aroma pernicioso que logra inocularte durante su escucha.

Los sintetizadores de "Arrival", al más puro estilo New Romantic 80's, dan paso a "Mars Recall", uno de los temas más corpulentos y estimulantes del trabajo, que entra con un penetrante doble bombo para acabar estallando en uno de los mejores estribillos de todo al lanzamiento, con el cual rememoro a CAGE en discos como "Hell Destroyer".


"Kill Your Idols" se nutre de un vertiginoso y testarudo riffeado y de ese semblante Power/Thrash que tan bien llevan a cabo a día de hoy bandas veteranas como FLOTSAM & JETSAM. La agrupación no baja de revoluciones ni pierde fuelle con "The Death Rides", otro espectacular tema en el que vuelven a salir a flote todos los ingredientes enumerados líneas atrás.

Por su parte, "Burning Angels" nos otorga, por primera vez en todo el plástico, la oportunidad de escuchar a Pau en una tesitura menos ácida y desprovista de rasgados en las estrofas del tema.

"Pallid Hands", por su carácter rupturista con respecto al conjunto del album, se antoja como una de las sorpresas del trabajo. Estamos ante un interesante medio tiempo que me transporta al buen hacer de MANOWAR en sus tiempos de máximo esplendor con este tipo de cortes, sabiendo pausarlo para, a continuación, acabar elevándolo a los cielos en su último tramo. Especial atención merece el pasaje final redecorado con una llamativa guitarra flamenca.

"I'm Falling" nos despide de este trabajo con las más reconocibles señas de identidad de la banda y sin que la propuesta flaquee en ningún instante. Al contrario, queda la sensación de que el quinteto de Barna, dada la facilidad y la soltura que evidencia componiendo material de tal calibre, podría haber añadido otro par de temas a su obra sin problema.


Pau Correas marca la diferencia en REDSHARK

En todo buen disco que se precie, al menos desde mi perspectiva, siempre tiende a suceder lo siguiente: por mucho que el trabajo tenga empaque y denote una labor colectiva, uno de sus miembros suele sobresalir por encima del resto. A veces, este asunto se reduce a una mera cuestión del nivel cualitativo que hay entre unos músicos y otros, pero este no es el caso. Pau, a mi parecer, marca la diferencia como vocalista en "Digital Race", habiendo llevado a cabo una labor más que exigente, pero ¿de qué valdría tener a un tipo con tan óptimas aptitudes si detrás de él no hay temas que lo respalden? Si no hay piezas solventes, se derrumba el equipo entero. ¿Acaso JUDAS PRIEST o IRON MAIDEN, con sus míticos y difícilmente igualables vocalistas, no han sido capaces durante su longevo recorrido de ofrecernos obras históricas así como lanzamientos mediocres y olvidables? ¡Pues de eso se trata, ni más ni menos!

En el debut de REDSHARK, de primeras, se expone recurrentemente la bestia que hay a las cuerdas vocales, pero el respaldo compositivo que hay detrás de cada canción, haciendo que cada una brille con luz propia y aporte su personalidad al lanzamiento, también es digno de elogio.

"Digital Race" es un soberbio disco de una banda que se ha puesto el listón muy alto y que tendrá que hacer las cosas demasiado bien en el futuro para superar o, al menos, igualar lo cosechado en un plástico en el que absolutamente todo funciona sin la más mínima fisura.

Canciones de "Digital Race"

1. The Drill State
2. Never Too Late
3. Digital Race
4. Arrival
5. Mars Recall
6. Kill Your Idol
7. The Death Rides
8. Burning Angels
9. Pallid Hands
10. I'm Falling



Discográfica: Listenable Records

Más información sobre REDSHARK en su Facebook.

Reseña
Nota
8.5
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Licenciado en Comunicación y redactor en varias webs especializadas en Rock y Metal desde hace más de una década, plataformas que me han servido, al igual que el actualmente aparcado mundo radiofónico, para darle rienda suelta a mi creatividad enfocada a una de mis grandes pasiones: la música. A su vez, soy un gran entusiasta del cine en todas sus vertientes, especialmente en la rama dedicada al terror, fantasía y ciencia-ficción.
redshark-digital-race-disco-critica“Digital Race”, un disco bien ideado y mejor ejecutado y cuya calidad podría y debería evaluarse de un modo categórico atendiendo al contenido del álbum.

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