Crítica de DARK MOOR - Origins

Tras su escarceo con los extraterrestres hace tres años en su disco "Project X", DARK MOOR regresa a la palestra musical con un nuevo disco: "Origins", que desde la perspectiva de la que esto suscribe resulta un disco mucho más Folk y, por así decirlo, tradicional, que los anteriores.

Atrás quedaron los tiempos de Elisa y los primeros discos de Alfred Romero, así como el Metal Sinfónico que nos ofrecieron con discos como "Tarot" o su "Ancestral Romance". DARK MOOR es una banda que evoluciona, que siempre ha tenido otra perspectiva de lo que es la música y que nunca ha querido quedarse estancada en un solo género. "Origins" es una nueva vuelta de tuerca, un disco más ligero, más Folk, menos metalero, pero que no pierde un ápice de esa capacidad de enganche y de atracción que tiene la banda.

El disco comienza con "Birth Of The Sun", primer single, donde ya desde el inicio aparecen las gaitas, protagonistas del tema, que se combinan a la perfección con los riffs de Enrik García y la voz contundente de Alfred Romero, ofreciéndonos un buen corte de inicio de disco, directo y potente.

A este tema le sigue "The Spectres Dance", más cañero que su predecesor, más Power, y que nos recuerda en cierto modo a esas composiciones que nos presentaron en su disco "Tarot" y que tanto disfrutamos.

Cómo tercer corte tenemos "Crossing Through Your Heart", típico medio tiempo de los madrileños que tanto engancha, cómo fue el caso de "Love From The Stone" de su  "Ancestral Romance". Con "Raggle Taggle Gypsy" cambiamos de tercio y nos acercamos al mundo zíngaro, con bandurrias, balalaikas y ritmos mucho más alegres y desenfadados, algo totalmente distinto a lo que nos tiene acostumbrados.

Sigue el disco con "In The Middle Of The Night", otro medio tiempo con algunos toques más hard rockeros y melódicos, que contrastan con el siguiente corte: "And For Ever", que nos traslada a los paisajes norteños con esa melodía que nos balancea y esas gaitas que nos mecen y nos llenan de melancolía. La verdad es que es una balada bastante interesante, a la par que desgarradora. "Druidic Creed" vuelve a introducir a las gaitas como protagonistas en un tema más juglaresco y alegre. Por su parte, "Iseult" sigue con las gaitas, configurando de nuevo un medio tiempo en el que destaca sobre todo la voz de Alfred Romero.

Y ya para terminar tenemos "Mazy", corte en el que la banda vuelve a demostrarnos la garra y la caña de la que hicieron gala en sus anteriores trabajos, y que probablemente sea uno de los mejores temas del disco. Le sigue "Holy Geometry", con una guitarra mucho más baja y oscura y contundente que, acompañada del bajo de Daniel Fernández, dota a la canción de un aire mucho más rítmico y mucho más Heavy. Como fin de fiesta tenemos "Green Lullaby", que es en esencia una nana, y lo digo por la melodía, no porque cuando uno la escuche tenga ganas de irse a dormir (que en absoluto es el caso).

DARK MOOR camina la senda del Folk Metal en "Origins"

El Heavy Metal más melódico de DARK MOOR solo queda ya a través de breves reminiscencias. Con "Origins" se han adentrado por la senda del Folk, creando un disco un tanto irregular en lo que a calidad de los cortes se refiere. Así hay algunos muy buenos, que no pierden la esencia de la banda, como por ejemplo "The Spectres Dance";  pero sin embargo hay otros que, sinceramente, no creo que casen del todo con lo que se presupone que es DARK MOOR, como "Iseult" o "Green Lullaby".

No obstante, hay que reconocer el mérito de los madrileños, que llevan muchísimos años ya dentro del mundo musical y que nunca han sacado un disco igual. Eso teniendo en cuenta cómo está la música actualmente es de agradecer.

Ahora sólo resta ver como defienden en estos temas en directo. Para ello tenemos una cita el día 1 de febrero en Madrid y también tocarán en los festivales Leyendas del Rock y Galia Metal Fest. Les esperamos con ganas.

Autoeditado

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