SERPENTINE PATH - Serpentine Path

Si juntas a gente que ha estado en ELECTRIC WIZARD, RAMESSES y UNEARTHLY TRANCE, probablemente te salga algo como SERPENTINE PATH: una oda al Doom más funerario y pesado que puedas encontrar. Sería difícil calificar este proyecto como banda de estrellas, pues sus orígenes son demasiado especializados y sectarios como para ello, pero no cabe duda de que de algo como SERPENTINE PATH sólo podía nacer este homónimo debut, faltando por analizar si el resultado es bueno, malo o regular. Pues bien, aunque adelante acontecimientos, diremos que este trabajo editado por Relapse, sello que últimamente anda muy enfrascado en recuperar estos mundos tenebrosos en su momento ya transitados por la factoría americana, tiene mucho de bueno, pero también bastante margen de mejora.

Empezaré por lo “menos” bueno: el sonido y la inspiración algo estática en la labor compositiva. En lo primero, SERPENTINE PATH ha optado por sonar tan opaco y frío que ha perdido mucho poder de absorción. Se trataba de eso, no cabe duda, en el estilo por el que transita este grupo no caben medias tintas, so pena de adentrarte en terrenos más “mainstream” y por tanto más accesibles. Sin embargo todo está tan plano y falto de matices que es difícil tener sensación de algo más que de opresión y vacío al mismo tiempo. En lo segundo, se nota que no sólo es necesario tener un buen bagaje a tus espaldas y juntarte en un mismo grupo con otros seres afines, sino que también hay que procurar ir más allá: como si unos HAIL OF BULLETS de la vida fueren, SERPENTINE PATH se sale poco del tiesto y acaba por sonar algo monótono.

En el apartado a resaltar, podemos partir del último punto flaco citado: precisamente por no querer ir mucho más allá de los patrones del género, y conformarse por personas con gustos parecidos y pasado similar en otras bandas, SERPENTINE PATH cumple bien su cometido, que es rendir tributo a los pesos pesados, dicho esto con todo el sentido, del mundo de la penumbra y la pesadez monolítica: WINTER, DISEMBOWELMENT y CATHEDRAL en sus más crudos inicios. Añadiendo a ello un toque más atmosférico a lo SHAPE OF DESPAIR y una mayor profundidad y opacidad en las guitarras, con cierto punto psicodélico, a lo COFFINS o DOT, tenemos una idea más o menos clara de por dónde van los tiros. Y no hay más. Todo eso es SERPENTINE PATH.


Por tanto, podemos considerar que SERPENTINE PATH, pese a la novedad en su concepción, es un grupo ya “viejo y asentado” en su gestación. Los seguidores tanto de ELECTRIC WIZARD como de UNEARTHLY TRANCE tendrán una buena alternativa, algo menos arriesgada y variada que los segundos, algo menos clásica y lisérgica que los primeros, pero en cualquier caso tan previsible como bien conformada: riffs pesados hasta decir basta, ritmos lentos y tortuosos, un bajo pulsante de notas eternas y la voz profunda y podrida de Ryan Lipynsky, uniendo la crudeza y el sonido tosco y poderoso del Death, con la lentitud y el paso lúgubre del Doom, moviéndose por terrenos cuadriculados e inmovilistas que buscan más agobiar que rellenar huecos con detalles innecesarios.

Abriéndose con una introducción bíblica que casi parece inspirada en el número de la bestia de IRON MAIDEN, “Serpentine Path” ofrece en algo menos de tres cuartos de hora ocho letanías mortuorias y opresivas. Con excepción de “Bats Amongst Heathens”, donde el sonido tira más del Death que del Doom, recordando a ASPHYX y en menor medida a SIX FEET UNDER y OBITUARY (por la gravedad del tono de las guitarras) y el tenor del resto del trabajo tiene el Doom como vehículo de expresión tiñéndolo de la crudeza Death como complemento. El ritmo más pegadizo de partida de “Arrows”, es continuado por “Crotalus Horridus Horridus”, ya en lo más profundo del abismo (con excepción de algún puente o algún sólo algo más melódico), y en la misma línea por “Beyond The Dawn Of Time”, subiendo aún más el contrapeso del metrónomo para que la velocidad sea menor o el pétreo final de “Only A Monolith Remains”, cuyo riff de inicio recuerda a CANDLEMASS ralentizado. Todo muy previsible pero al mismo tiempo hecho con convicción y buenas tablas, lo cual es garantía de disfrute si estás metido en estos sonidos.

En definitiva, SERPENTINE PATH no hace ningún requiebro más allá de lo esperado, no gustará a nadie más que los aficionados al género de la lentitud y lo funerario, no llamará la atención más lejos de las estelas de las bandas de las que parten sus componentes... pero debuta con un disco sólido, solvente y bien hecho, aunque necesiten un tiempo para poder redondear su propuesta y decir algo más. Mientras tanto, un disco no apto para todos los públicos, pero con buen acabado.


 

Raul Ureña

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí