STRIKER y HORA LÍMITE - 22 de noviembre de 2018, Madrid (sala Silikona)
El pasado 22 de noviembre los canadienses STRIKER volvían a pisar Madrid como cabezas de cartel. No me explico como una banda tan explosiva y enérgica como ellos no se prodigan más con ese rol. Digo esto porque en los últimos años hemos podido disfrutar del grupo como teloneros de PRIMAL FEAR, SONATA ARCTICA o BULLET. El concierto se celebró en la madrileña sala Silikona que presentó una entrada bastante decente para ser un concierto entre semana y teniendo en cuenta el mal tiempo imperante y la saturación de conciertos en la capital.
HORA LÍMITE
En principio estaba previsto que la banda local FRENZY se encargase de abrir para STRIKER. Lamentablemente, uno de sus integrantes tuvo compromisos laborables ineludibles y fueron los naturales de Alcorcón HORA LÍMITE quienes tocasen en su lugar.
Lo cierto es que la banda tuvo un papelón, el público de la sala no esperaba un grupo de su calado. HORA LÍMITE practica un Hard Rock que coquetea (en exceso) con el Pop en muchas de sus canciones, algo bastante opuesto a lo que hacen FRENZY o STRIKER. Tampoco le acompañó un sonido particularmente bueno y sobre el escenario, ya fuera por falta de tablas o de compenetración, estuvieron bastante sosos y fuera de lugar en su mayoría.
HORA LÍMITE hizo lo que pudo y trató de meter a la gente en el concierto, en especial habría que aplaudir la labor de su vocalista Sara, que tiró de la banda en todo momento y el concierto, siendo justos, fue de menos a más y mereció mejor suerte. HORA LÍMITE presentó unos cuantos cortes de su primer larga duración, “Resultado De Un Error”.
También se atrevieron con dos versiones tan dispares como fueron “Días De Escuela” de ASFALTO (el único tema que cantó el respetable) y “Perdido” de WARCRY.
STRIKER
Con algo de retraso sobre la hora programada el torbellino STRIKER asaltó el diminuto escenario de la Silikona. Una pena que sea tan reducido porque a Dan Cleary todo se le hace pequeño. El vocalista de STRIKER es un culo inquieto que no para de moverse de un lado a otro y consigue transmitir una energía como pocas veces se ve sobre unas tablas.
Lo malo es que parece que esta energía pasa factura y sus bolos no suelen ser muy largos, el de Madrid apenas llegó a los setenta minutos con quince cortes que sonaron potentísimos. STRIKER es una banda infalible en directo, da igual que sus últimos discos de estudio no estén a la altura de sus primeras obras pero, en vivo, esos temas tienen muchísima fuerza.
Con el reciente “Play To Win” bajo el brazo, STRIKER comenzó su actuación con “Heart To Lies”, tema que también abre el disco. Los primeros temas tuvieron una mala ecualización estando la batería del, siempre sonriente, Adam Brown y el micro de Dan con un volumen muy alto. Siguieron con “Born To Lose”, donde dispararon sus cañones de humo y pudimos disfrutar de esas guitarras tan IRON MAIDEN que tienen muchos de los cortes de STRIKER.
“Phoenix Lights” presentó un gran trabajo a los coros de Chris Segger y Tim Brown. Tras este tema, STRIKER tuvo que parar un momento (el único respiro que dio en su actuación) para ajustar unos cables y mejorar el sonido de la guitarra de Tim, hecho que aprovechó el resto de la banda para pedir cerveza ante las risas del respetable.
Una vez resueltos estos problemas, STRIKER empalmó un tema tras otro en una demostración de energía que nos hizo disfrutar de “Lethal Force” o “Crossroads”. El ritmo no caía y así disfrutamos de ese trallazo que es “Former Glory” del disco homónimo de la banda. “Too Late” y “Out For Blood” nos dejó ver a una formación que está perfectamente conjuntada sobre el escenario, moviéndose al unísono y sobre todo, disfrutando de tocar en directo. Tengo la sensación de que STRIKER es una de esas bandas con una entrega total y absoluta con su público, sin importar que toquen ante 50 o ante 1.000 personas. Algo que es muy elogiable.
“Pass Me By” redujo un poco el ritmo en la sala. Lo mismo con “Locked In”, tema con el que Dan ofreció un largo discurso de agradecimiento a Madrid. Indicó que la capital era una ciudad especial para ellos pues fue la primera ciudad de España donde tocaron y también agradeció a asociación Pounding Metal Union la confianza que siempre han tenido en STRIKER. Su parrafada terminó con una merecida ovación.
Lamentablemente todo lo bueno tiene un final y como ya indicamos en la crónica de Barcelona, los bolos de STRIKER son explosivos, pero muy concisos. Apenas quedaban una tripleta de canciones para el carpetazo final. El primero de ellos fue “Head First”, uno de sus temas nuevos y que en directo tiene un acabado extraño por culpa de sus bases pregrabadas.
Dos cortes para terminar. Dos auténticos hits del Speed Metal moderno como “Full Speed Or No Speed” y “Fight For Your Life”, que provocaron saltos, pogos y que no dejaron a nadie en su sitio ni indiferente. Un buen colofón que con tres o cuatro canciones más habría dejado mucho mejor sabor de boca.
Crónica: Txema Sáez
Fotos: Laura Ruiz
Promotora: Kivents