THE NEW BLACK - III: Cut Loose

Cuando tu mayor virtud se convierte en handicap. Así se podría resumir, en una simple frase, la impresión que siempre ha dado la escucha de un CD de THE NEW BLACK. Este conjunto germano, formado hace un lustro por gente con experiencia en el mundo del Metal, ha editado tres álbumes desde entonces, cortados por el mismo patrón, si bien con su segunda entrega, “Better In Black”, pegaron un pequeño bajón de calidad. La historia comienza con Fabian Schwarz, guitarrista curtido en mil batallas en el Heavy alemán (a saber: TYRAN PACE, PARADOX, STORMWITCH, o su principal grupo, RUNAMOK, entre otros) montando un proyecto paralelo con algún compañero y la ayuda de Christof Leim, actualmente en SINNER. Para su propuesta, demandaban un vocalista alejado de este estilo. Encontraron a Fludid, de tesituras mucho más cercanas al Rock. Con él, encajaron las piezas de esta poco ortodoxa banda.

Si hubiera que definir con un término el género que practican sería Groove Metal pero no seríamos concretos ya que la mezcla en THE NEW BLACK es, cuanto menos, curiosa. Pongamos unos cuantos nombre que, inmediatamente, te llegan al cerebro: MOTÖRHEAD, NICKELBACK (antes de dejarse seducir por Mutt Lange), METALLICA, ALTER BRIDGE, VOLBEAT, ANTHRAX (con John Bush), BLACK SABBATH, DANZIG… ¿Suena raro? Probablemente, pero “III: Cut Loose” es un álbum para el disfrute de todos aquellos que tengan mente abierta, si bien no podemos referirnos a él como un trabajo esencial. De todas las menciones a combos famosos que se han hecho quizá habría que quedarse con VOLBEAT como la idea a la que quiere llegar estos bávaros, si bien su aproximación al Rock y las canciones comerciales es distinta. THE NEW BLACK carecen del gancho de los daneses.

Vídeo de "Count Me In"

Con una bonita portada que es toda una declaración de intenciones, “III: Cut Loose” arranca con un homenaje a las huestes de Lemmy. El riff principal de “Innocence & Time” es similar al de “Ace Of Spades” y, lógicamente, el tema solo se diferencia en la voz, si bien para toparnos con la realidad de la propuesta de THE NEW BLACK hay que avanzar hasta el segundo corte, “Count Me In”. Esa combinación entre un potente Hard Rock clásico y el Metal moderno (que no Nu Metal) es el sello característico del grupo, por momentos acercándose a sonidos más accesibles, como en la notable “Muzzle & Blinkers”.

Las guitarras de “Superhuman Mission” o la final “Antidote” les delatan; esta gente quiere seguir el camino marcado por VOLBEAT pero es necesario reiterar que, si bien estamos ante un álbum entretenido, no pasa de ahí, les falta el talento compositivo para despuntar de verdad porque, al final, nos queda una amalgama de influencias ya que, según se avanza en “III: Cut Loose” se adivinan ecos de ALTER BRIDGE en “Any Colour You Like (As Long As It´s Black)” o “One Thing I Know”, incluso en la estructura con una guitarra de limpia de inicia para desembocar en caña controlada y unas inflexiones vocales en el estribillo propias de Myles Kennedy, Tremonti y cía. No obstante, Kennedy no es la fuente de inspiración fundamental de Fludid porque, por momentos, es clavado a John Bush, el cantante de ARMORED SAINT, en los años que triunfó con ANTHRAX. Hay pasajes en los que casi se puede pensar si Bush no hace un cameo porque los registros sin idénticos.

La variedad estilística y la duración de los temas (ninguno sobrepasa los cuatro minutos y medio) hace que la escucha completa de “III: Cut Loose” sea agradable. La magnífica producción de Jacob Hansen ayuda, nítida, sin saturar, con cada instrumento en su sitio. No obstante, volvemos a la frase inicial con que se abría la reseña. THE NEW BLACK es una formación a la que se le puede aplicar eso de quine mucho abarca, poco aprieta. Para aquella mayoría que prefiera discos con una personalidad acusada dentro de un género, no creo que estén ante la obra de sus sueños. Esto no significa que THE NEW BLACK no sean un combo peculiar, que lo son; simplemente la coherencia interna del disco es discutible. Con todo, un buen trabajo, con canciones interesantes, y ante todo, divertido de escuchar. Seguidores del Groove Metal o VOLBEAT, probad con estos alemanes.

Marco-Antonio Romero