Crítica de VENOM - Storm The Gates

Si uno se para a pensarlo con detenimiento, adoptando una postura aséptica y simplemente pretendiendo entender la envergadura del acontecimiento, podría llegar a la conclusión de que seguir teniendo noticias de VENOM a finales de esta segunda década del siglo XXI es como una especie de hito. Y es que VENOM, esa figura estéticamente tenebrosa y afeada que nació entre espeso humo y un olor nauseabundo hace casi cuarenta años, regresa con "Storm The Gates", su nuevo disco.

La banda no esperaría escribir ni en el mejor de sus diarios que hoy seguiría entre nosotros vomitando ruido, lo que mejor sabe hacer. Remontándonos años atrás, su viscosa y destartalada estampa no le proporcionó a la banda precisamente cuantiosas cantidades de dinero, pero en su impredecible andadura, y hasta llegar al presente disco, el trío ha ido dejando su hedor en numerosas escenas musicales, primordialmente ligadas al Metal Extremo y al Thrash más cazurro, primitivo y genuino. Su maliciosa estrella de cinco puntas con la cabra enclaustrada dentro hizo mella en los primerísimos años ochenta entre muchísimos jóvenes dispuestos a entregar su alma por la causa.

SLAYER, BATHORY, SODOM, CELTIC FROST, DEATH… Tantos y tantos hijos bastardos desplegados por el mundo, algunos de ellos cosechando vítores y consiguiendo su trono particular dentro de la escena metalera, todo ello mientras sus progenitores han seguido editando música con cierta continuidad y siempre a la sombra de los grandes del género, pero con el respeto ganado por parte de esas hordas metaleras contagiadas en su día por el irremediable encanto que posee la bacteria de Cronos y cía.

VENOM presenta un trabajo más contundente

Tras varios años presentando una formación supuestamente estable en la que Dante y Rage acompañan y respaldan al citado Cronos, el tridente británico vuelve con otro trabajo belicoso y sañudo en el que, eso sí, se percibe una cierta bajada de intensidad en lo que a velocidad se refiere. En todos los discos que ha compuesto y editado el combo de Newcastle siempre ha existido esa balanza de piezas más disparadas con otras más oscuras y densas, pero en la ocasión presente parece que los de Cronos se han decantado preferiblemente por un sonido más pesado, a veces groovie, que no por ello necesariamente moderno, sino más bien enfocado a un diseño de guitarras arenoso y embarrado que, en su conjunto, me ha llevado a pensar que VENOM, en el presente curso, suena como a una banda amamantada en el seno de los viejos lanzamientos de VENOM, intentando, valga la múltiple redundancia, sonar a VENOM.

Esto no es necesariamente malo, entendiendo la cantidad de discos que tiene la veterana agrupación a sus espaldas y que, de vez en cuando, y sin salirse de lo que es esa idiosincrasia y esa impronta contracultural sellada a su música, al ruidoso trío no le queda otra que jugar sus armas y experimentar dentro de lo que la etiqueta VENOM se lo permite. A fin de cuentas, Cronos es un personaje que cuenta con la condescendencia de los que gustan de sus diabluras y haga lo que haga VENOM siempre estará medianamente bien mientras no se corrompa la marca, cosa que, de momento, no ha sucedido. El tipo se lo ha ganado a pulso.

"Storm The Gates" mantiene la esencia de VENOM

Cada vez que exhala uno de sus alaridos, te llega ese pútrido aliento, como bien expone "I Dark Lord", pura tosquedad bañada en un penetrante riff de guitarra y un ácido estribillo que llega a ser adictivo; "Dark Night (Of The Soul)", tozuda y rocanrolera, abrazada a ese estilo pasado de vueltas pero corpulento que nos presentó MOTÖRHEAD en su álbum "Sacrifice"; "Over My Dead Body", la pieza más atolondrada y thrasher del LP; o la propia "Storm The Gates", otro ejercicio de riffs obstinados y peleones donde luce tanto la sequedad de la propuesta de VENOM como esa dinámica más groovie; todo ello, eso sí, con un sonido crudo, aceitoso y embarullado que define mejor el universo musical del trío británico.

VENOM: puro empeño y tesón en mantener una postura firme, arraigada, constante. Un trabajo más con el que dejarse embadurnar por sus toxinas, aún potentes y efectivas actualmente. No es su mejor trabajo, tampoco el peor, es un trabajo de VENOM. No le des más vueltas.

 

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Discográfica: Spinefarm Records

Os recordamos que VENOM actuarán en nuestro país en la próxima edición de Rock Fest Barcelona.

Más información de VENOM en su página de Facebook.