Los madrileños OMERTA realizaban la puesta de largo de su debut, “Inertial Inception”, en la sala We Rock, y lo hacían con la compañía de CARDINAL y LAKESIDE PROJECT. Ya había visto anteriormente a las bandas darlo todo sobre un escenario, unos grupos que, con sus particularidades y diferencias marcadas, tienen un claro elemento en común: su calidad.
LAKESIDE PROJECT
Reintegrada la formación de LAKESIDE PROJECT, la banda ofrecía su primer concierto desde nuestro HELLPRESS FEST 2014, que se celebró en febrero. La verdad es que parecía que sus músicos, solventes en directo, llevaban tocando juntos mucho tiempo, y eso que su batería, David Vrl, ha vuelto hace poco de Inglaterra.
Poco a poco se les ve más asentados sobre el escenario, y ganan fuerza cuando el cantante Javier Vega toma las riendas, ya que es expresivo, se maneja bien a la hora de cantar melódico o rasgado y no para de moverse, saltar, pegar patadas al aire o bajarse del escenario. Por otro lado, los guitarristas Sergio Orihuela y Manu Báez son quizá demasiado estáticos, pero Víctor Yuri al bajo lo compensa, siendo el segundo miembro más activo después de Javi, y es que tampoco para quieto.
Ante una cantidad considerable de público, esta banda de Metal Progresivo con tintes hard rockeros desgranó cortes como “F.T.L.”, “B.L.C.K”, “Beyond The Sun”, presentado como un “momento tristón”, o “Running From The Sun”.
Los miembros de LAKESIDE PROJECT no tenían su salud al cien por cien, y el propio Javier estaba atravesando una gripe, dándolo todo aun así. Por eso contó con la ayuda puntual del exbatería del grupo en dos canciones, “Out Of My Mind” y “King Of Lies” y, entremedias, otra colaboración vocal, la de Víctor Hernández de ORION CHILD en “Hope”.
Así se despedía este grupo que cada vez que lo veo en directo me convence más. Alterna momentos contundentes con otros pausados, grandes melodías... Cualquier fan del progresivo no debería perderse la oportunidad de escuchar su música.
CARDINAL
Los chicos de CARDINAL se presentaron sin bajista a tocar, lo que pudo restar cierto empaque a su sonido, pero no personalidad a su show. Hablando con el técnico de la We Rock, por lo visto la anterior vez que tocaron allí fue llevando las pistas de bajo grabadas, pero en esta ocasión el batería había preferido no estar limitado por ese factor a la hora de tocar.
De cualquier manera, CARDINAL sigue siendo un grupo con fortísima pegada, con una evidente influencia de NEVERMORE tanto en lo musical como en lo vocal, palpable para cualquiera que escuche algunos de sus cortes, por ejemplo “Oblivion”, y es que Diego Ballestero parece el mismísimo Warrel Dane a la hora de interpretar. Eso sí, a Diego, que por cierto iba descalzo, parece que, a pesar de tener sentido del humor, le falta algo de chispa a la hora de hablar con el respetable entre tema y tema, no así mientras canta, donde hace valer su actitud.
CARDINAL aprovechó la cita para presentar nuevas canciones, las que formarán parte de su EP “Ambivalence”, como “Circadian Disruption”, que fue la que dio el pistoletazo de salida al concierto y “Obsolete” -de ahí la camiseta de Leo Jiménez que lució Diego en la primera parte de la actuación, ya que el ex SARATOGA colabora en el corte-, dejando claro que la formación sigue su abrasiva senda musical.
Fueron pasando poco a poco las canciones, la oscura y pesada “Cell XIII” o una más intimista “Black Dawn”, con Álvaro Alegre y Daniel Ballestero haciéndose con el escenario, y con la enorme presencia de Diego, que llegó a echarse al hombro el pie de micro dando mucho juego gracias a un cierto aire macarra que siempre es bien recibido.
La actuación se estaba desarrollando ante un público escaso. Después de acabar LAKESIDE PROJECT al menos la mitad de asistentes desapareció de la sala. Está claro que el público es soberano y que no se puede obligar a nadie a quedarse todo el tiempo en el recinto, pero no deja de ser un poco triste que las bandas pierdan audiencia y potenciales fans de esta forma, especialmente un grupo como CARDINAL, que merecía mayor atención.
De todas formas, ajeno a esto CARDINAL tuvo el enorme detallazo de regalar copias de su disco “Black Dawn”. Es la segunda vez que veo a los madrileños hacerlo, un gesto que les honra (y segunda vez que me quedo sin álbum, ya que preferí regalárselo a una persona que disfrutó enormemente el show de la banda).
Casi terminando su repertorio, Diego le dedicó un breve pero profundo “happy birthday” a alguien del público con su vozarrón, y CARDINAL pasó a acometer el último tramo de su concierto con “Tomorrow Never Comes” y “What Lies Beyond”, más muestras más de que hay que estar atento a este grupo.
OMERTA
OMERTA presentaba su primer disco, “Inertial Inception”, un trabajo que ha sido financiado por los fans vía crowdfunding. Así, ante un nutrido número de seguidores interpretaron sus nuevas canciones, demostrando de nuevo que su Metal es difícil de encasillar y que es un grupazo en directo, potentísimo, y con una puesta en escena y un cantante, Roberto Galeano, espectaculares.
OMERTA, cuyo nombre he de averiguar si proviene de la banda de Russel Allen, por lo que se le parece físicamente Roberto , se desfogó con temas como “Nightmare”, “Your Game”, ya sobradamente conocida por ser uno de sus cortes con mayor solera, o “Break The Line”, disparando al respetable cañonazos de efusivos riffs y pesada rítmica.
Juan Mondejar al bajo, Dani Corregidor y Santiago Elipe a las guitarras, se movieron como es costumbre de un lado a otro, pusieron posturas a la hora de tocar -algo que puede parecer una tontería, pero que a mí siempre me gusta ver porque denota que un grupo se quiere comer el escenario- y además fueron ayudando de forma alterna en los coros, lo que dio muchísimo dinamismo a la actuación. Que yo recuerde ha sido en este show la vez que más activos han estado los miembros de OMERTA en ese sentido, apoyando a Roberto a la voz. Que no dejen de hacerlo porque está bien que los demás músicos ocupen también el primer plano, tanto desde el plano meramente musical hasta el visual que requiere un espectáculo en vivo.
Después, entre quejas del calor y saludos a las chicas de merchandising, OMERTA interpretó “Fear”, “Chains”, “Let It Burn”, “Ego Biased” y “All In”, que recreaba la “historia de un puñetero motero” que conoció Roberto, continuando un completo repaso a cada uno de los cortes de su debut.
En la recta final, sin parar de dar caña, sonaron “Shaman” y una versión del “Absolute Zero” de STONE SOUR, que encaja especialmente bien con el estilo de OMERTA, en la que pidieron la colaboración del público para cantar -respondió estupendamente- y ya, para terminar, una despedida por todo lo alto con la aplastante “Lust For Life”, haciendo de nuevo un llamamiento a los asistentes para que prestasen su voz.
De nuevo, OMERTA demostró que es un diamante cada vez más pulido. La próxima cita, en el HELLPRESSS FEST 2015, donde podréis ver su actuación y juzgar por vosotros mismos.
Crónica y fotos: Enrique Herrero
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