Crítica de SADISTIK FOREST - Obscure Old Remains

Seré breve, porque breve es “Obscure Old Remains”, el regreso discográfico de SADISTIK FOREST tres años después del intenso "Morbid Majesties", el que fue su tercer disco y el que más le ha empujado en el underground del Death Metal nórdico. Desde Finlandia, y con un sonido que desde luego no es puramente finlandés, aunque tiene cosas, “Obscure Old Remains” es un EP de solo 19 minutos con cuatro nuevas canciones.

Es excelente, y por eso repite lo que podríamos llamar la paradoja del EP: cuando un disco tiene un puñado de canciones sobresalientes junto a unas cuantas de relleno, solemos clamar “debería haber sido un EP”. Pero cuando un EP es brillante, nos preguntamos por qué no hay un poco más, porque no se ha optado por un disco completo y cuánto tardará en llegar el siguiente. Forma parte del encanto de este formato, en realidad: tiene lo suficiente para alimentar pero no sacia, deja con ganas de más.

“Obscure Old Remains” es brillante, desde luego. Arrollador, aplastante, una demostración de un grupo en pico de forma, en perfecto estado de revista. Creatividad, una ejecución quirúrgica y un sonido apabullante que vuelve a recoger lo mejor del ADN nórdico y a mezclarlo con todo lo que es Death Metal puro y añejo, de las corrientes más machaconas y europeas a una dosis muy alta de extremidad americana, ahora con todavía más influjo de Thrash y el viejo Death de primera hornada. Una gozada.

SADISTIK FOREST entrega en “Obscure Old Remains” un EP que sabe a poco

Markus Makkonen, que pasó por los excelentes HOODED MENACE, pone de su parte en ese regusto a Thrash salido de madre con un registro vocal que es una suerte de homenaje a Tom Angelripper en versión Death Metal. También se encarga, como el legendario frontman de SODOM, del bajo; y es, por cierto, uno de los autores de “Rotting Ways To Misery”, un libro esencial para conocer a fondo la historia del maravilloso Finnish Death Metal.

SADISTIK FOREST no está en la ortodoxia de su denominación de origen. Su apuesta es más amplia dentro de un sonido añejo, clásico… y lo suficientemente brutal. Arrolla con una base de ritmo estruendosa pero creativa y un saco de riffs fantásticos, un trabajo punzante, variado, violento y con un enorme gancho. Con el suficiente carisma para permitirse algún solo muy clásico o algunas melodías muy poderosas y marcadas como las de “Nihil”, destellos de Death Melódico entre galopes salvajes y ráfagas que son puro old school. Un puente entre el impacto frenético de “Mandragore” y el tremendo final que llega arrastrándose por los ritmos pantanosos y la maraña nocturna de “Waters Black”. Un temazo con una atmósfera malévola, un espíritu malsano que parece cobrar vida en la mirada insondable del protagonista del artwork, espléndida ilustración (como en “Morbid Majesties”) del madrileño Raúl Mortuus Fuentes.

Dije que sería breve porque es un trabajo breve, y cumplo: “Obscure Old Remains” es un excelente punto de apoyo en la carrera, claramente ascendente, de SADISTIK FOREST, esperemos que solo el aperitivo de mucho más Death Metal hecho con la misma pasión, la misma calidad y la misma frescura. Este EP es mejor que lo mejor de “Morbid Majesties”, así que esperemos la misma progresión para el próximo disco. Estaremos, si se cumple la fórmula, ante algo impresionante de verdad.

Discográfica: Trascending Obscurity

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