Crítica de "War Against All", el épico disco de los IMMORTAL de Demonaz

El evocador e impecable nuevo álbum de la banda de Black Metal

IMMORTAL, o mejor dicho lo que queda de IMMORTAL, vuelve a ofrecer un nuevo disco de estudio cinco años después, aún con el contexto que ha rodeado a la marca en los últimos años muy presente. Titulado "War Against All", un nombre que no parece escogido al azar, parece un álbum cuyo lanzamiento no ha tenido mucho foco. Tratándose de un ente del Black Metal noruego tan relevante e histórico, la atención sobre este disco debería ser mayor. Lo cierto es que he percibido un cierto desinterés en este trabajo por parte de su público potencial, y esa desgana que se respira nace seguramente de plantear tantas batallas legales en vez de plantear batallas en el norte encima de los escenarios. Ese es el contexto, el legal y económico, y no logro disociarlo de la música, porque necesitaría una mente mucho más limpia y ajena a todo lo que ha venido ocurriendo durante años.

Dicho de otra manera: la energía invertida en los juzgados por Demonaz (primero el caso con Abbath, y posteriormente otro litigio con Horgh) alimentó el morbo de los seguidores, pero desnutrió a IMMORTAL, que desde entonces va con el nombre "manchado", desprovisto de su "pureza" tras verse salpicado por tantos dimes y diretes judiciales.

El suflé con el supuesto reflote del grupo es una mentira que se deshinchó hace mucho, al ver que pasaban los años y dejando como resultado solo dos discos, sin conciertos ni otro tipo de actividad. Ha sido una pérdida total del momentum generado en 2018 con "Northern Chaos Gods", no habiéndose aprovechando las oportunidades para impulsar su carrera de nuevo, aunque quizá al bolsillo de Demonaz le ha venido bien.

Así Demonaz, que ha salido triunfante en los juzgados, aún sigue sin despejar la duda que más o menos cualquier seguidor de IMMORTAL se plantea, y es si el "grupo" saldrá a girar. Es algo que dudo bastante que llegue a suceder, porque aunque fuera operado de su tendinitis crónica, no parece que haya habido intención alguna, sin giras ni shows selectos a lo grande. Por falta de ofertas económicas relevantes no habrá sido, eso por descontado, y de ahí justo nace la duda de su capacidad para el directo por motivos de salud: si no tocas habiendo buen dinero por delante, es porque no puedes. Pero no pierdo la esperanza de ver estos temas en directo. Ojalá.

War Against All: disco de Immortal

Canciones de altura en "War Against All"

Ciñéndonos a lo artístico y echando a un lado la parálisis en cuanto a actividad como grupo, estamos ante álbum que se presenta con una portada demasiado manida, pero a pesar de eso (y de todo el ruido que rodea al trabajo) con un contenido musical de tal altura como el del vuelo poderoso del cuervo negro Blashyrkh. Este es otro muy buen disco de IMMORTAL en el que se mantienen las referencias a su propio universo, que siguen estando ahí en letras y títulos, además de seguir capturando esa emotividad típica que siempre ha tenido esta formación en su sonido. Épico y evocador, aún te traslada a esas cumbres nubladas del paisaje noruego.

“War Against All” es el punto de partida del disco y, como decía al principio, parece una declaración de intenciones, quizá velada, sobre la lucha interna de poder que ha vivido IMMORTAL durante demasiados años, con la consabida victoria legal, que no moral bajo mi punto de vista, de Demonaz. Un trallazo, directo y a la cara, y desde ahí hasta el final todo tipo de referencias clásicas: frío, dioses, reinos y tronos a conquistar, montañas... su particular visión del norte.

No se sale nada de lo previsto, excepto quizá "Norlandihr", que sin ser para nada dispar respecto al resto del material, muestra una faceta más melódica y fresca pero que aún mantiene la esencia de IMMORTAL y realza de algún modo su vena más épica, una canción que a algunos recordará a bandas más melódicas y de otros géneros paralelos al Black Metal. Aún así, como decía, la tónica general del álbum es no moverse ni un ápice de lo esperado, aunque sí desplaza algo la sequedad y aspereza de "Northern Chaos Gods" y refuerza la vena más épica y melódica de la banda.

La uniformidad en el nivel de las canciones es algo digno de alabar, como atestiguan la propia "Immortal" o "Blashyrkh My Throne". Cualquiera de las canciones de este trabajo van a encandilar al típico seguidor de IMMORTAL, en las que, aparte de la voz y guitarras de Demonaz escuchamos la batería de Kevin Kvåle (GAAHLS WYRD) y el bajo de Ice Dale (Arve Isdal de ENSLAVED, AUDREY HORNE, etc.).

Eso sí, un corte como "Wargod" suena a ya escuchado. La definida como "canción más heavy del álbum" por Demonaz recuerda mucho a la poderosa "Tyrants", aunque el propio músico admite que quería seguir esa senda.

Posiblemente "War Against All" sea un disco carente de inventiva pero del total gusto de la base de fans de IMMORTAL. Pero al final Demonaz llega y toca la fibra sensible de cualquier seguidor clásico, con menor intensidad y frialdad que "Northern Chaos Gods", pero sonando puramente a IMMORTAL (en su vertiente más accesible) en cualquier caso. Seguro que ese cariño a Demonaz viene por su respeto pétreo a la esencia musical de IMMORTAL.

A pesar de entregar otro disco exitoso, me gustaría haber visto a Demonaz, sin embargo, tratando de tirar del carro bajo su propio nombre en vez de aprovechar la lucha legal para limpiarse del camino a otras partes vitales de la marca IMMORTAL. Desde luego lo que hizo en "March Of The Norse" fue impresionante, pero claro, el dinero por ventas no llueve igual de una manera que de otra. Entiendo que quiera un sustento, y que además sea justo porque él era una parte necesaria de IMMORTAL, pero desde luego no la única. Sea como sea, el juez decidió en favor de Harald Nævdal y así están las cosas, al menos de momento y si es que en un futuro hay reconciliación posible entre las partes.

Yo por mi parte intentaré olvidar el trasfondo, que como ya dije cuesta mucho hacerlo, y disfrutar de la música, que sigue siendo impecable, en "War Against All".