Crónica de los conciertos de ARCH ENEMY, WINTERSUN, TRIBULATION y JINJER - 19 de enero de 2018, Barcelona (sala Razzmatazz 1)
El éxito que está cosechando ARCH ENEMY desde que Alissa White-Gluzz entró en la banda está siendo espectacular. Con apenas dos discos desde que se incorporó y ya se encuentran encabezando giras por salas de gran capacidad -en Barcelona han pasado de Razzmatazz 2 a 1- y ocupando plazas privilegiadas en los carteles de los festivales veraniegos.
[Lee aquí la crónica de Madrid]
Esta vez nos acercamos a la sala grande de Razzmatazz para presenciar una de las giras del año, uniendo fuerzas con WINTERSUN, TRIBULATION y JINJER, dentro del marco de un nuevo Route Resurrection Fest en un tour en el que están colgando el cartel de sold out en muchas de las ciudades europeas que están visitando. Barcelona fue una excepción por muy poco.
JINJER
La jornada empezó pronto y los ucranianos JINJER fueron los encargados de abrir fuego. Dieron el pistoletazo de salida a su concierto con la potentísima “Words Of Wisdom” seguida de “Sit Stay Roll Over”, dejando claro que son una banda con mucha fuerza y que técnicamente están a otro nivel.
Tatiana se metió pronto al público en el bolsillo con su potentísima voz, no paró ni un segundo mientras iban desgranando temas como “I Speak Astronomy”, “Just Another” o “Pisces”, pertenecientes a su disco “King Of Everything”, donde la vocalista demostró que tiene una voz limpia preciosa y que no solo vive de guturales.
“Who Is Gonna Be The One” fue la elegida para terminar el concierto con un público entregado y exhibiendo una aparente facilidad para fusionar estilos como el Metalcore, Death Metal, Jazz o Reggae. Disfrutaron de muy poco tiempo sobre las tablas, pero les bastó para ganarse los corazones de muchos de los asistentes.
TRIBULATION
La oscuridad se apoderó de Razzmatazz de la mano de los suecos. La evolución musical de TRIBULATION durante los últimos años ha sido enorme y es que han ido dejado atrás el Death Metal de sus inicios para incorporar unos sonidos más bien góticos o incluso psicodélicos.
Empezaron con “Lady Death” de su EP editado el pasado año. Con una puesta en escena muy sobria y apenas con tan solo una luz verde que iluminaba la cara de Johannes, atacaban con “Melancholia” tema perteneciente a “The Children Of The Night” trabajo que hasta la fecha se trata del último disco que han editado. Acto seguido aprovechaban la ocasión para presentarnos “The Lament”, la canción que abrirá su inminente próximo álbum de estudio. Jonathan no paró de bailar por todo el escenario con su guitarra como si de una bailarina se tratase, mientras iban cayendo temas como “The Motherhood Of God” o “Suspiria” que se abría paso con su pesadísimo riff de guitarra.
Se acercaba la recta final con la enorme “Strange Gateways Beckon”, canción que fue de las que calentaron más a los asistentes y decidieron poner fin a su espectáculo presentando en multitud “The World”, que estará incluida en su próximo disco. Con este tema pusieron el broche de oro a una notable actuación de la que lo único que se les puede echar en cara es que no tocaran absolutamente nada de “The Horror”, su genial disco de debut.
TRIBULATION ha elegido evolucionar y dejar el Death Metal de sus inicios a un lado, esta es su decisión y hay que respetarla. La verdad es que su nuevo sonido es altamente adictivo.
WINTERSUN
Los fineses tuvieron que “marcarse un POWERWOLF” ya que antes de empezar el concierto se daba a conocer la noticia de que su bajista no iba a actuar esa noche. Rolf Pilve de STRATOVARIUS fue quien estuvo sentado tras los tambores, sustituyendo a Kai Hahto quien ahora milita en las filas de sus compatriotas NIGHTWISH y Teemu y y Asim a las seis cuerdas demostraron tener las guitarras bien afiladas para la ocasión.
Así que arrancaron su show con la épica “Awaken From The Dark Slumber (Spring)” de “The Forest Seasons” su último disco de estudio. Jari cogió las riendas del grupo dándolo todo sobre el escenario, sin dejar de calentar al público y exhibiendo un muy buen nivel vocal en directo.
La locura se apoderó de Razzmatazz con “Winter Madness” de su primer disco, a la que le siguió una coreadísima y mágica “Sons Of Winter And Stars” de su aclamadísimo “Time I” del que todavía seguimos esperando la segunda parte del álbum. Quizás algún día Jari nos sorprenda.
“Loneliness (Winter)” fue la segunda y última canción que iban a interpretar de “The Forest Seasons” y es que el set de WINTERSUN fue corto en cuanto a número de canciones, pero es bien sabido que sus composiciones no suelen ser cortas de tiempo precisamente.
La caña llegó con “Battle Against Time”, mostrando a unos WINTERSUN que pese a tener mermada la base rítmica, lo supieron suplir con ganas, intensidad y saber hacer sobre el escenario. El público se volcó con los finlandeses y me dejó impresionado ver que muchísima gente cantaba sus canciones. Esperemos que está gira les sirva para ampliar sus hordas de fans.
“Time” fue la elegida para despedirse de una sala Razzmatazz, que pese a no estar llena del todo, se encontraba ya bien abarrotada.
Los fineses dejaron muy buen sabor de boca a pesar de las adversidades que sufrieron. Esperemos poder verlos en un futuro no muy lejano con su propio set, tocando más tiempo y con su bajista sobre el escenario. De lo que seguro que no nos vamos a librar es de las partes pregrabadas que suelen llevar en directo.
ARCH ENEMY
La banda de Michael Ammot llegaba a Barcelona para tocar delante de una de las mayores audiencias que han tenido en la Ciudad Condal a lo largo de su ya larga carrera musical como cabezas de cartel. Encabezando una gira muy ambiciosa que está consiguiendo buenos números de asistencia en lo que llevan de su periplo europeo. La banda ha sabido venderse muy bien desde que Angela Gossow abandonó la formación años atrás y a día de hoy pocos parecen echarla de menos.
Las luces de Razz se fundieron cuando las primeras notas de “The Ace Of Spades” empezaron a sonar por los altavoces, seguidamente se escuchó “Set Flame To The Night” con la que al llegar a su fin se hizo el silencio durante unas pocas milésimas de segundo. La banda saltó al escenario desatando la locura de los asistentes con el riff inicial de “The World Is Yours” que hizo agitar las cervicales de la gente que se agolpaba en las primeras filas.
Con un sonido nítido y potente desde el principio pusieron la sala patas para arriba con un clásico inmortal como es “Ravenous”, destrozándolo todo con “Stolen Life” y entrando a matar con “The Race” de su reciente “Will To Power”.
La sala se vino arriba con “War Eternal” uno de los éxitos más rotundos de la era White-Gluz, seguida de un clasicazo como es “My Apocalypse”. Retomaban las canciones de su última etapa con “Blood In The Water, una coreada “No More Regrets” y la enorme “You Will Know My Name”. Las canciones del primer disco de Alissa son unos auténticos clásicos hoy en día, ocupan gran parte del set list y son tan bien recibidas como las canciones de la época de Angela.
El sonido era nítido y atronador, Daniel Erlandsson machacaba su batería sin apenas despeinarse mientras el gran Sharlee D’Angelo le acompañaba a la base rítmica y la dupla de guitarras Ammot/Loomis se antoja como un auténtico lujo. Si a todo esto le sumamos que Alissa sobre el escenario es un volcán en erupción, pues el resultado no puede ser mejor. La formación está bien compenetrada, se entienden y parecen disfrutar sobre las tablas.
“Bloodstained Cross” fue una de las canciones recuperadas de la época Gossow y que bordaron a la perfección, sonó potentísima y fue muy ovacionada al terminar. La sala estalló durante los primeros compases de “The Eagle Flies Alone”, uno de los temas elegidos como sencillo de su nuevo disco en la que pudieron escuchar algunos coros enlatados al más puro estilo Blackie Lawless.
Seguían desgranando “Will To Power” con “Reason To Believe”, canción lenta que ha suscitado algo de polémica por las voces limpias que ha metido Alissa en una parte de la canción. Personalmente me parece una de las mejores de su nuevo trabajo.
Con “As The Pages Burn” Ammot demuestra que ha decidido apostar fuerte por la reciente encarnación de su banda y es que más de la mitad del set list pertenece a los discos grabados con Alissa. Las guitarras dobladas suenan espectaculares en este tema y Ammot lo culmina marcándose un solo de guitarra tremendo quedándose él solo en el escenario únicamente acompañado por Daniel a la batería.
Los mosh pits llegaron de la mano de “Intermezzo Liberté” en la que Alissa lució una gran bandera con uno de los logos de la banda y acto seguido decidieron abandonaron el escenario con uno de sus grandes clásicos como se trata de “We Will Rise”.
Tras un corto espacio de tiempo la banda volvió para atacar con “Avalanche” que fue recibida calurosamente por el público. Recuperaron “Snow Bound” de su “Wages Of Sin” que sirvió de introducción para “Nemesis” que puso punto final a una brillante actuación de hora y media.
La banda se despidió triunfal con las melodías de guitarra de “Fields Of Desolation” sonando de fondo mientras Razzmatazz les ovacionaba cálidamente. Me pregunto cuantos más echan de menos que toquen algún tema de la época de Johan Liva.
Pese a quien pese, la banda de Ammot está en un lugar privilegiado en la escena metálica. Su banda esta compuesta por una formación envidiable que ofrece conciertos muy sólidos y que parece que en pleno 2018 está llegando a más gente que nunca.
Promotora: Resurrection Fest