Crónica de los conciertos de DISTURBED y SKINDRED en Madrid - Jueves 18 de abril de 2019 (sala La Riviera)
La Semana Santa ha sido muy especial para los aficionados al mejor Metal Internacional, debido a que Madrid y Barcelona fueron las ciudades españolas elegidas por DISTURBED para volver a tocar en nuestro país. Los americanos no pisaban estas tierras desde el lejano Festimad de 2003 durante el tour de presentación de "Believe". Por el camino han quedado varias giras abortadas y unos cuantos discos. La ocasión era especial, casi tanto como sus teloneros, los inclasificables SKINDRED, encargados de preparar el ambiente.
SKINDRED
A las 19:30 exactas, saltaron al escenario puntuales los galeses SKINDRED. La banda liderada por el incombustible Benji Webbe ofreció un divertido concierto de cincuenta minutos que convenció al público que poco a poco iba llenando la madrileña sala La Riviera.
La mezcla de Hip Hop, Rock, Heavy Metal, Reggae o música electrónica le funcionó una vez más a SKINDRED. Benji no paró de animar al público que entraba al juego con él, ya fuera coreando, saltando cuando lo pedía o haciendo cualquier tontería al ritmo de su música.
Su set estuvo marcado por algunos cortes de su último trabajo, “Big Tings”, como “Machine” o “That´s My Jam”, temas que supieron combinar con algunos clásicos de la banda del tipo de “Ninja”, “Kill The Power” o “Warning”.
Podrá gustar o no, pero lo que no se puede negar es que SKINDRED siempre sale a por todas y rara vez decepcionan a su público. Lamentamos no ofreceros fotos de su concierto, pero hubo una confusión con los horarios de acceso que nos proporcionó Live Nation.
Crónica: Txema Sáez
DISTURBED
Nada más y nada menos que la friolera de 16 años llevaban los de Chicago sin pisar tierras hispanas, y desde luego las ganas de verles se plasmaron perfectamente el pasado jueves en la sala La Riviera… Y es que el cartel de sold out para el evento llevaba colgado desde enero, lo que no hizo sino aumentar el hype por ver a la banda en directo.
Pues bien, antes de entrar en materia, hemos de decir que si bien fue la noche de DISTURBED como banda, no fue la noche de su vocalista, David Draiman, que mostró una voz irregular a lo largo de todo el concierto, lanzando numerosos gallos (sí señores, gallos) en los primeros temas, para después entonar durante el resto del concierto, pero acabar visiblemente agotado vocalmente al final del bolo. Quizá no tenía bien entonada la voz, quizá los años pasan factura… lo cierto es que Draiman no mostró su mejor registro.
Pero centrémonos en lo que importa. DISTURBED venía a presentar su nuevo disco, “Evolution”, a tierras patrias, y lo hicieron tirando de veteranía y profesionalidad. A las 21:00, con una puntualidad pasmosa, las luces de La Riviera se apagaron y comenzaron a proyectarse, con la intro de “Remnants” creando ambiente, en la pantalla del fondo del escenario diversas imágenes de giras, backstage y momentos con otros músicos (muy aplaudida la aparición de Chester Bennington de LINKIN PARK), lo que provocó que una Riviera abarrotada pusiera sus móviles en alto a grabar tan esperado momento.
Finalmente, y con el vídeo parado en la imagen de la portada de “Evolution”, la banda apareció a los acordes de “Are You Ready?”, que sonó como un cañonazo y que consiguió que La Riviera cayera rendida a los pies de DISTURBED desde el inicio, pues durante todo el concierto se notó que la gente tenía ganas de verles y participó activamente durante todo el bolo a las “órdenes” de Draiman, Donegan, Moyen y Wrengen.
Las luces blancas de inicio dieron paso a las azules, que ambientaron el siguiente tema: “Prayer”, donde nuevamente se proyectaron en la pantalla de fondo imágenes de la banda. Y de nuevo sin descanso, Draiman, con una voz de ultratumba y una barriguita incipiente (los años se notan, señores), nos invocó con un “My brothers and sisters, my blood” a darlo todo con “The Vengeful One”, que trajo tras ella el temazo que es “The Animal”, donde se hicieron más que notables los fallos vocales de Draiman.
Seguidamente, Draiman nos saludó con un “Hola Madrid”, diciendo que era el único español que sabía, y contándonos, a grandes rasgos y ya en inglés, que hacía mucho tiempo que había tocado en nuestro país, y que recordaba lo loca que era la gente española. Asimismo, nos soltó un discurso como presentación del siguiente tema, “Stupify”, diciéndonos que no importaba de donde viniéramos ni lo que creyéramos, que todos estábamos unidos por la música, siendo, al final del día, uno solo, una familia, pese a que los gobiernos y poderosos pretenden hacernos débiles. Ante esta arenga, la gente no podía hacer otra cosa que saltar y brincar como si no hubiera un mañana, y por ello, durante “Stupify”, la sala se convirtió en una fiesta.
Tras esto llegó el turno de lucimiento de Dan Donegan que, con un solo de guitarra espectacular, dio paso a “Voices”, seguida de la versión de GÉNESIS “Land
Of Confusion”, y de “Hold On To Memories”, tema de su último disco, “Evolution”, que fue interpretado en acústico y ambientado con las luces de los móviles del público asistente, en el que la banda nos invita a recordar a los seres queridos y los mejores momentos vividos. Durante este tema se proyectaron nuevamente imágenes de la banda con músicos ya fallecidos como el antedicho Chester Bennington, Dimebag Darrell o Chris Cornell, que levantaron numerosos aplausos en La Riviera.
Tiempo de descanso ahora para Draiman, que se suplió con el solo de bajo de John Moyer y el solo de batería de Mike Wengren (lo siento por los fans, pero durante este tiempo la bajona que se produjo en el ritmo del concierto fue más que considerable), retomando el ritmo del concierto con “Ten Thousand Fist” y “The Game”, que sonó espectacular. Durante estos temas la voz de Draiman se recuperó, mostrando todo su potencial y sin bajones, algo que duraría hasta casi el final del concierto.
Un nuevo momento de parón llegó con “A Reason To Fight”, previamente a la cual proyectaron un vídeo donde la banda explicaba su compromiso con la gente que padece ansiedad y depresión, siendo miembros de una ONG que lucha y que ayuda a esas personas que no pueden salir de dichas enfermedades psicológicas. Draiman nos indicó también que echaba de menos a compañeros suyos como Chester Bennington y Chris Cornell, y tuvo un detalle que, personalmente, me gustó mucho y considero que fue muy emotivo. Pidió a la gente que había sufrido ansiedad o depresión que levantara la mano, y bastantes en la sala La Riviera lo hicieron. Luego pidió que miraran a su alrededor bajo la consigna “You Are Not Alone”, haciendo ver que nadie es único en ese aspecto y que tales enfermedades pueden acontecer a todo el mundo, da igual quién sea y de donde venga. Por ello “A Reason To Fight”, interpretada en acústico, resultó bastante conmovedora.
Seguidamente, y continuando con el discurso anterior, Draiman nos hizo prometer que cuando viéramos a nuestros amigos y familiares caer con los demonios de la depresión no estaríamos parados, intervendríamos y les ayudaríamos, lo que dio pie para el siguiente corte: “Watch You Burn”, nuevamente en acústico.
Después de este parón, por así decirlo, emotivo, pero que bajó el ánimo de la sala de una manera espectacular, tenía que llegar la traca final. Y desde luego los de Chicago supieron levantar a La Riviera con tres temazos: “Sound Of Silence”, su versión de SIMON & GARFUNKEL que fue coreada por todo el mundo y que contó con la presencia de un violinista; "Indestructible", que enloqueció a la peña y mostró a un Draiman ligeramente fatigado vocalmente; e "Inside The Fire", que cerró de manera espectacular esta primera parte del concierto.
Pero DISTURBED no se iba a ir así como así. De esta forma, tras los ya típicos “oe oe oe” del público, la banda volvió a salir para interpretar el gran tema que es “The Light”, para el cual contaron con la presencia de dos chicas del público sobre el escenario, así como con la colaboración del resto de la sala con sus mecheros y móviles creando ambiente.
Y ya, sin descanso, llegaron los tres temas finales. En primer lugar, “Stricken”, que fue interpretado a la perfección y de manera muy fluida. En segundo lugar, “No More”, tema también de su último álbum, y donde Draiman ya sí que dio muestras más que evidentes de cansancio, pues le costaba entonar. Y por último, y en tercer lugar, “Down With The Sickness”, que puso el fin de fiesta de la mejor manera posible (hubo gente que incluso se puso a hacer pogos), dejando a la gente con ganas de más.
No fue la noche de Draiman, pero sin duda fue la noche de DISTURBED como conjunto y como banda. Buen sonido, buena actitud, compromiso y profesionalidad hicieron que los de Chicago salieran, tras 16 años sin pasar por España, por la puerta grande.
Prometieron que la próxima vez no tardarían tanto en volver. Esperemos que cumplan su promesa.
Crónica: Laura Ruiz
Fotografía: Michelle Mateos
Promotora: Live Nation
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