Crónica del concierto de BLIND GUARDIAN y DAWN OF EXTINCTION en la sala Razzmatazz de Barcelona (26 de octubre de 2023)
El regreso de los bardos a nuestro país está siendo triunfal. Los teutones han conseguido un pleno absoluto logrando el sold out en Barcelona, Madrid y Villava, después de su destacada actuación en el Rock Imperium Festival del pasado mes de junio, donde la formación celebró el 30 aniversario de su icónico álbum “Somewhere Far Beyond”. En esta ocasión, BLIND GUARDIAN volvía a nuestra tierra dentro del marco de la gira de presentación de “The God Machine”, acompañados por la banda de Metalcore valenciana DAWN OF EXTINCTION. No dudamos ni un solo segundo en dirigimos hasta la sala grande de Razzmatazz para presenciar el retorno de los bardos a la Ciudad Condal, en un recinto ya familiar para ellos pero que no pisaban desde el año 2015.
DAWN OF EXTINCTION, Metalcore antes del Heavy Metal de los bardos
La formación valenciana DAWN OF EXTINCTION ha estado abriendo los conciertos del segundo tramo de la gira europea de BLIND GUARDIAN. La banda ha tenido la grandísima oportunidad de presentar sus canciones frente al público de países como Alemania, Austria y Francia antes de desembarcar en su España natal donde les esperaban unas salas llenas hasta la bandera.
DAWN OF EXTINCTION disfrutó de 45 minutos de actuación en el que gozó de un sonido muy bien ecualizado para tratarse de una banda telonera, a pesar de que los coros estuvieron un tanto bajos. Los valencianos desplegaron su mezcla de Metalcore con Melodic Death Metal a través de canciones como “Underrated”, “Rise From Oblivion”, o “This World Remains” en las que juegan con las voces limpias y las desgarradas a partes iguales y en las que predominan los riffs afilados y solos en los que manda la melodía por encima de todo.
Levantaron el pie del acelerador para mostrarnos su faceta más intimista de la mano de la balada “Lost Paradise”. Acto seguido ejecutaron la rabiosa “MotherFucker”, cuya letra se alza en contra de la violencia de género y en la que Daniel, vocalista y guitarrista de la formación, animó al publico para que cantara su estribillo dando indicaciones de cómo iba la jugada antes de empezar. Una vez cogida la velocidad de crucero nuevamente, atacaron con una “The Heresy” en la que se montó un wall of death que dividió la sala Razzmatazz en dos y tras la que llegó el desenfrenó mosher.
En la recta final nos embistieron con las enérgicas “From Tears To Vengeance” y una “Apocalypse”, con destellos death metaleros, tras la que recibieron un caluroso aplauso y se sacaron la foto de rigor para inmortalizar el momento mientras sonaba una “Dawn Of Victory” de RHAPSODY de fondo cuyo riff inicial fue entonado con emoción por muchos de los presentes. Quizás no estaban ante su público potencial, pero DAWN OF EXTINCTION supo cómo conectar con una audiencia power metalera en su gran mayoría.
Ayer y hoy en el directo de BLIND GUARDIAN
Un gran telón cubrió la parte frontal del escenario mientras los técnicos trabajaban a contrarreloj para dejar todo listo de cara a la actuación de BLIND GUARDIAN. Pasados veinte minutos, a las ocho de la tarde, casi en horario infantil, aparecieron las sombras difuminadas de los músicos mientras los presentes coreaban el nombre de la banda. Acto seguido, el telón se desplomó al mismo tiempo que los primeros compases de “Imaginations From The Other Side” enloquecieron a la sala Razzmatazz, que terminó colgando el cartel de entradas agotadas en su puerta.
A continuación, llegó un tempranero discurso de Hansi Kürsch, quebrantando ligeramente la intensidad del arreón inicial. En sus palabras recordó que la última vez que estuvieron actuando en Barcelona fue en el marco del Barcelona Rock Fest y que en aquella ocasión se vieron forzados a actuar con tan solo un guitarrista ya que Marcus Siepen dio positivo en covid-19 poco antes de viajar. El vocalista pidió un fuerte aplauso para su compañero y tras él continuaron su concierto de la mano de “Blood Of The Elves”, primer tema que interpretaron perteneciente a “The God Machine”.
El estribillo de “Nightfall” fue coreado a pleno pulmón como si fuese la última oportunidad que tuvieran para hacerlo en sus vidas. Tras el júbilo provocado por esta composición, llegó el turno para otro viejo clásico, el elegido fue “The Script For My Requiem”, que hizo temblar las paredes de una sala Razzmatazz que lucía pletórica y que fue la de las grandes ocasiones, con el piso de arriba abierto y gente sentada en el suelo, al borde de las barandas con los pies colgando sobre una pista en estado de ebullición.
Las palmas irrumpieron en el inicio de una “Violent Shadows” tras la que André Olbrich y Marcus desempolvaron sus guitarras acústicas por primera vez en la velada para llevarnos de cabeza al medievo de la mano de “Skalds And Shadows”, composición rescatada de “A Twist In The Myth”. Tras ella, el bueno de Hansi tomó las riendas de nuevo para realizar un nuevo discurso, más breve que el anterior, y que olvidamos rápidamente cuando comenzó la ejecución de un clásico del tamaño de “Born In A Mourning Hall” en el que el vocalista teutón demostró que se encuentra en un gran momento a nivel vocal.
El cambio de telón coincidió con el inicio de una “Secrets Of The American Gods” en la que sufrieron un leve corte de sonido que no consiguió empañar la gran ejecución de la que es una de las mejores composiciones de su último trabajo de estudio. Los seguidores de BLIND GUARDIAN mostraron su veredicto en forma de un aplauso que se fundió con el inicio de una “The Bard's Song - In The Forest” que se convirtió, como viene siendo tradición desde hace muchos años, en uno de los momentos más mágicos del repertorio. No hay forma de no emocionarse cuando el público canta a pleno pulmón la letra de dicho tema y enmudece al mismísimo Hansi.
La grandísima ovación desembocó en otro clásico, el público barcelonés pidió “Majesty” y BLIND GUARDIAN no pudo hacer más que conceder el deseo a sus fervientes seguidores. Tras ella, llegó una “Traveler In Time” que me sonó menos ruda que antaño, algo más sofisticada, pero que, Igualmente, consiguió poner a la sala patas para arriba justo antes de que la banda se despidiera ficticiamente envuelta en una grandísima ovación.
"Welcome To Dying", la sorpresa que guardaba BLIND GUARDIAN en un final explosivo
BLIND GUARDIAN se tomó un descanso breve, apareciendo rápidamente sobre las tablas de Razzmatazz para interpretar una “Sacred Worlds” tan intensa como inesperada a esas alturas de repertorio. La traca final llegó de la mano de “Lord Of The Rings”, cuyo final puso a la mayoría de los presentes a botar como si no hubiese mañana, y a la que le siguieron una épica “Welcome To Dying”, que no estaba incluida en el repertorio de la actuación, y en una “Mirror Mirror” que quizás sea el himno definitivo que aúna a toda una generación de metalheads que eran unos adolescentes cuando vio la luz en aquel maravilloso año 1998.
BLIND GUARDIAN nos devolvió a los viejos tiempos de dicha y risa alegre, tal y como reza la letra de “Mirror Mirror”. La banda germana está viviendo una segunda juventud en directo y trasladó a un buen puñado de cuarentones, que en su mayoría llenábamos la sala Razzmatazz de Barcelona, de cabeza a nuestros años de adolescencia. Épica y nostalgia se dieron la mano en un gran show de casi dos horas de duración en la que el público arropó y llevó en volandas a la banda.
Promotora: Madness Live!
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